Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El Ayuntamiento reanudará el servicio de ascensor al Castillo la próxima semana

Una empresa de mantenimiento revisa la maquinaria, parada durante meses por el protocolo covid

Turistas suben y bajan a pie del Castillo de Santa Bárbara. | JOSE NAVARRO

El ascensor del Castillo de Santa Bárbara volverá a funcionar la próxima semana una vez realizadas el pasado martes las pruebas de maquinaria por parte de una empresa especializada, que en los últimos días prosigue con tareas de mantenimiento del elevador y de actualización del software. Así lo han confirmado desde el equipo de gobierno bipartito (PP y Cs), aunque aún se desconoce el día exacto en que entrará de nuevo en servicio el ascensor, cerrado al público desde el estallido de la pandemia de covid-19.

La falta de actividad de este servicio municipal, unido a la inexistencia de autobuses lanzadera que conecten la ciudad con la fortaleza, obliga a los turistas y a los alicantinos a subir a pie (o en taxi) hasta el monumento, ante la imposibilidad de aparcar el vehículo en la zona por decisión del gobierno municipal para evitar «estrés arquitectónico» al conjunto histórico. Especialmente afectados se vieron los más de diez mil cruceristas que llegaron la semana pasada a Alicante en seis buques con la recuperación del turismo de cruceros.

La previsión es que el ascensor pueda realizar 10 viajes en una hora, es decir, que podrán subir al Castillo 30 personas cada 60 minutos, cifra que aumentará cuando sean grupos familiares que sí pueden ir juntos. Hay un segundo elevador que está averiado, de ahí la revisión del que sí está en condiciones para que no falle.

Desde el Patronato de Turismo, que planea externalizar la gestión del Castillo para aumentar el número de visitantes y los ingresos, indican que el sistema se pondrá de nuevo en marcha de acuerdo a la normativa anticovid que rige en la Comunidad desde el pasado 9 de octubre y las siguientes medidas de prevención: distancia entre personas de un metro y medio dentro del túnel que comunica la fachada marítima con los ascensores, uso obligatorio de las mascarillas y un tercio de aforo. Esto supone tres personas a la vez dentro del ascensor (más si son convivientes). Si funcionase el segundo elevador, podrían subir el doble de visitantes.

Ante la inactividad del ascensor una vez suprimidas la mayoría de restricciones del Consell, el bipartito se escudó en un informe técnico del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo de julio de 2020 para mantener cerrado el elevador del castillo, que por otro lado sufre continuas averías. El instituto, cuya misión es velar por la salud de los trabajadores públicos, recalcó, sin embargo, que el citado informe no era vinculante.

En cuanto a las lanzaderas, el edil de Transportes dijo que se estudiaba retomar el proyecto de autobuses al Castillo, que cuesta 300.000 euros, sacando la iniciativa del paquete de mejoras del transporte público.

Compartir el artículo

stats