El Belén Municipal que, a principios de diciembre se podrá contemplar en el zaguán del Edificio Barroco del Ayuntamiento de Alicante, ha comenzado a tomar forma en los locales que la Asociación de Belenistas tiene en propiedad en la zona de Campoamor. Este Nacimiento incorpora, explica el presidente de los Belenistas, Alejandro Cánovas, “elementos alusivos al paraje de La Condomina, ofreciendo una imagen de alicantinismo, que es lo que nos proponemos en cada una de las creaciones destinadas al Ayuntamiento”. Así, y entre otros detalles, se podrá apreciar la recreación de una de las Torres de la Huerta o la azulada y representativa cúpula del monasterio de la Santa Faz.
A diferencia de años anteriores, en los que sí había un mayor número de figuras, en este belén de estilo popular se ha apostado por unas de 60 centímetros, todas ellas de la Escuela de Olot. Esto, lleva aparejado según Cánovas, que “debido a las dimensiones del espacio de que disponemos, haya menos imágenes con respecto a otros años”. Agustín Moreno, José Luis Hernández y Vicente Ramírez son los encargados de darle forma, con la colaboración de José Luis Hernández en la iluminación.
Por su parte, Antonio Manresa, concejal de Cultura, ha valorado la apuesta que la Asociación de Belenistas ha hecho en este 2021: “Aun cuando, debido a la pandemia, han dispuesto de cuatro meses menos para realizar su trabajo, hay que subrayar su meticulosa tarea para recrear el histórico momento del Nacimiento de Cristo. Éste, que es el verdadero espíritu de la Navidad, lo hacen posible unos verdaderos y auténticos artesanos, como son las personas que conforman la Asociación de Belenistas”.
Asimismo, unos 15 proyectos van adquiriendo vida en las distintas zonas en las que se divide el local, de unos 400 metros cuadrados y propiedad de la Asociación fundada ahora hace 62 años: electricidad y carpintería, vegetación, almacén, y vitrinas que guardan un fondo de un millar de figuras aproximadamente.
Además, otra de ellas la comparten las tareas de preparación del Belén Municipal y del denominado Social, que se sitúa en la Plaza de la Montañeta. Éste estará dividido, como es tradición, en cuatro escenas de unas dimensiones de 4 metros de largo, 1,80 de profundad, y un máximo de 1,1 metros de altura. Las figuras, dependiendo de la escena y la perspectiva, son de 30, 19 y 14 centímetros.
En este sentido, de “El Nacimiento de Jesús en Belén” se ocupan Francisco Ruso, José Gómez y Vicente Denia. Sobre la “Anunciación de los Pastores” ponen su particular sello, José Antonio Durá e Isabel Rameta. Le confieren su peculiar estilo a “Los Magos preguntando por Herodes”, Vicente Monllor, Antonio Genovés y Balta González. De la novedosa escena de “El Empadronamiento” son Alejandro Cánovas, José Luis Pitarch y Julio Lillo quienes ponen la firma.
Tradición es la seña de caracteriza al belenismo. Pero éste tampoco está exento de innovación como el que preparan Antonio Alonso, José Luis Sánchez, Antonio Zaragoza, Juan Carlos Gilabert y Manuel Zaragoza para el Palacio de la Diputación Provincial. En éste, y como si se tratara de viñetas de cómic, se podrán apreciar los pensamientos de los Reyes Magos, los pastores y la Virgen María.
