Licenciada en Químicas por la Universidad de Granada, Natalia Jiménez decidió seguir formándose a partir de buscar nuevas opciones para acercarse al mundo laboral, y recaló nada menos que en Alicante, en el Instituto Virgen del Remedio ubicado en la Zona Norte, una de las más deprimidas y el único que le ofrecía un ciclo afín a sus preferencias en la modalidad semipresencial, el de Alimentaria.
Quién le iba a decir que este ciclo de FP le iba a abrir las puertas, a su vez, de uno de los centros más demandados y con el que sueñan cuanto menos visitar, todos aquellos con la alta cocina como meta laboral. El Basque Culinari Center, BCC, en San Sebastián.
Tal y como concreta una de sus profesoras en el instituto alicantino, Raquel Reales, para el puesto que ha logrado esta alumna para hacer las prácticas remuneradas de FP Dual durante todo este curso ha competido con otra decena de estudiantes de toda España procedentes del propio País Vasco donde se ubica el prestigioso centro, València, Madrid, La Rioja y Castilla León.
«Muchos estudiantes desearían poder formarse allí. Igual que a Natalia, además del currículo académico hicieron entrevistas en toda España porque precisamente la FP Dual permite a la empresa hacer la entrevista para que elijan el perfil que más se adecue a su demanda. Nosotros recomendamos a determinados alumnos que pensamos que pueden encajar, pero es la empresa la que les entrevista y elige.
En este caso fue el propio BCC el que se puso en contacto con institutos de toda España que imparten un ciclo similar al de Alimentaria en el Virgen del Remedio, para demandar alumnado para las prácticas de FP Dual. Y el instituto alicantino se apresuró a proponer a tres de sus alumnos que, a su vez, remitieron las correspondientes solicitudes porque todos ellos tenían muchísimo interés y podían trasladarse todo el año a Donostia. «Buscaban alumnado excelentes de procesos de calidad en la Industria Alimentaria y el proceso de la documentación es bastante largo, a partir de convenios, pero se ha conseguido», señala muy orgullosa la profesora.
«Evidentemente vivir en San Sebastián no es barato -admite Natalia Jiménez a preguntas de este diario-. Ayuda mucho estar becada, porque la subvención cubre el mantenimiento del día a día». El propio profesor tutor que tiene asignado en el centro vasco le facilitó contactos antes de ir para allá para encontrar un piso adecuado a sus posibilidades. «Está en una zona pequeña donde se concentran muchos estudiantes y como mi pareja teletrabaja decidió trasladarse conmigo».
Natalia confiesa que se quedó «sin palabras» cuando le confirmaron que había logrado esta beca tan preciada. «Tan siquiera poder tener la opción ya era demasiado. Para mí desde luego es el top, fue mi ilusión desde siempre y también soy muy fan de Masterchef», el popular programa televisivo que premia a los ganadores con un plus de formación en el mismo centro donde está ella ahora.
«Me encanta la cocina en su vertiente más experimental y química. Soy muy cuadriculada, de ahí la carrera de Químicas, pero además mi padre trabaja en la hostelería y en casa siempre han cocinado muy bien mi madre y mi abuela. La FP después de la Universidad lo que me permite es entrar en la industria alimentaria y mayores posibilidades de acceder al mundo laboral que todavía no ha experimentado a sus 29 años.
Integra la primera promoción del ciclo semipresencial de Alimentaria en el IES Virgen del Remedio, los dos cursos del grado superior. Gracias a esta modalidad, el covid no fue un problema para sus estudios. «Es como si se hubiera hecho exprofeso para mí este ciclo, -añade encantada de lo que ha conseguido en poco tiempo-. Hasta el punto de que en el Basque Culinari le dieron una bata con su nombre nada más llegar y además de «aprender de todo, estoy como encargada o responsable de laboratorio y apoyo a otros alumnos en prácticas por mis conocimientos de Química»
Sus profesores confiesan su envidia y confían en que les organice una visita al prestigioso BCC.
