La Policía Local de Alicante ha puesto en marcha un operativo especial durante este mes de noviembre en las partidas rurales del término municipal de Alicante, con el objetivo de incrementar la vigilancia y seguridad, organizando controles aleatorios en turnos de mañana, tarde y noche, con la que se pretende también prevenir robos tanto en explotaciones agrarias como en propiedades rurales.
Este dispositivo puestos en marcha en los accesos, explotaciones agrarias y entornos de viviendas rurales, viene a reforzar la vigilancia constante que durante todo el año realiza la Unidad de Partidas Rurales (UPR) de la Policía Local para atender y garantizar la seguridad de forma permanente a los vecinos de todas las zonas rurales, facilitándoles además un móvil de contacto directo para que su comunicación sea más rápida, ágil y cercana, y mejore así la atención de la Policía en las partidas.
Desde principio de noviembre se han realizado diversos controles que se han desplegado junto con la unidades de Tráfico, la Unidad de Seguridad Ciudadana y la de Partidas Rurales, en las que han participado una treintena de agentes en La Alcoraya, El Bacarot, La Cañada del Fenollar, El Rebolledo, El Pla de la Vallonga, Font Calent, El Moralet, El Verdegás y Tángel. Los policías han organizado controles preventivos y de protección de los delitos, y contra la propiedad en el medio rústico y la vigilancia forestal.
En estos controles, la Policía Local ha verificado documentaciones tanto de vehículos como de conductores. Fuentes policiales aseguran que, estas vigilancias, producen un efecto disuasorio sobre posibles autores de hechos delictivos en las zonas más alejadas de la ciudad.
Como resultado del operativo, en los controles llevados a cabo durante este mes de noviembre, se han levantado decenas de actas por infracciones a la normativa de tráfico, así como varias administrativas por tenencia de drogas.
El Ayuntamiento de Alicante cuenta con una unidad policial especializada en las zonas rurales con más de treinta años de experiencia, que fue suprimida por el tripartito, y que el actual Consistorio retomó en julio del 2018 para que volviera a operar en materia de prevención e informativa, han destacado desde el ejecutivo.
El edil de Seguridad, José Ramón González, ha puesto en valor la vigilancia que desempeña la Unidad de Partidas Rurales y ha señalado que «este operativo policial viene a reforzar el trabajo que desarrollan todo el año, ya que su contacto es directo, y con estos controles y la presencia policial continua se consigue mejorar y dotar de una mayor seguridad a estas áreas rurales».
Vecinos y policía en contacto
Según fuentes municipales, los vecinos de las partidas cuentan con un contacto directo con un mando de la UPR para poder recibir una asistencia policial ágil y cercana que mejore el servicio. Los policías trabajan en varias jornadas en turnos de mañana, tarde y noche, con el sistema de lunes a domingo.
La unidad policial cuenta con desfibriladores en sus patrullas, y mantiene una colaboración con los bomberos y los servicios sanitarios que es decisiva a la hora de poder solventar una emergencia ya que la policía de las partidas rurales conoce cada una de las calles y caminos que sirve de guía en las emergencias.
Presencia permanente
La UPR controla y vigila durante todo el año las zonas de las partidas rurales con unidades divididas en dos zonas, norte y sur, con patrullas que trabajan de forma continuada en vehículos y a pie realizando vigilancia preventiva.
Además, la UPR realiza un servicio de vigilancia específico e interviene en temas relacionados con animales, para el que se mantiene una coordinación con la protectora y el veterinario municipal.
Además, en noviembre, la Policía Nacional realizó varias intervenciones en empresas que actuaban de manera ilícita en las partidas rurales de la ciudad. A principio de mes, se realizó un operativo para intervenir cuatro talleres y un desguace. Esta operación dio lugar a una segunda, que resultó en la paralización de dos empresas y un taller ubicados en la partida El Bacarot, además del desmantelamiento de 28 vehículos. En total, 35 personas fueron identificadas en ambas operaciones.
