El fenómeno conocido como inversión térmica ha dejado temperaturas récord en el interior de la Comunidad Valenciana, con un pico de 26,1 grados en Chelva (Valencia) este domingo y registros históricos en un mes de diciembre en Villena (Alicante) y Vilafranca del Cid (Castellón). Estos dos últimos observatorios llegaron a marcar 25,3 y 23,5 grados, respectivamente, el pasado día 31. En el caso de Vilafranca supone la máxima más alta de diciembre, enero o febrero desde que hay datos, según el balance de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Hoy vuelve haber niebla pero no ha afectados a los vuelos en el aeropuerto como sí sucedió el jueves pasado multitud de retrasos y cancelaciones.
Mientras, para Villena es su temperatura más elevada en diciembre durante los últimos 40 años, superando los 25 grados del 1 de diciembre de 1979. Esta ciudad marcó 24,5 grados el día de Año de Nuevo, casi récord porque solo hay un 1 de enero que haya llegado a una temperatura superior: los 26 grados del 29 de enero de 2021.
De hecho, muchos registros máximos del día de Año Nuevo de 2022 no superaron el récord histórico de enero porque hace menos de un año, en los últimos días de enero, se produjo un extraordinario episodio cálido que pulverizó efemérides en interior y litoral.
En cualquier caso, estos récords demuestran que durante los últimos días de 2020 y los primeros de 2021 se están registrando temperaturas significativamente más altas en el interior que en la costa, con diferencias superiores a diez grados en los observatorios más alejados del mar.
La diferencia se debe a que por el litoral penetra aire marítimo húmedo y fresco, mientras en el interior ese aire mediterráneo no llega y queda "sumergido" en la extraordinariamente cálida masa de aire subtropical que provoca temperaturas récord. Es lo que se conoce como inversión térmica, con aire fresco en el estrato más bajo de la atmósfera y aire cálido por encima.
Un recorrido por las máximas de este domingo, desde la costa hacia el interior, muestra esa significativa diferencia: de los 14,5 grados registrados en el observatorio de la Universitat Politècnica de València (UPV), a un kilómetro del mar, a los 16,8 del observatorio de Viveros y los 17,5 del aeropuerto de Valencia. Por encima están los picos de 20,9 y 26,1 grados en Llíria y Chelva, respectivamente.
También son muy destacables las temperaturas máximas de los días 30 y 31 en el Pico Gavilán, en la Puebla de San Miguel (Valencia) a 1.750 metros de altitud. El 30 llegó a 16,6 y el 31, 18,2 grados, registros que superan el anterior máximo de 15,1 grados del 23 de diciembre de 2012.
Tras el fin de semana, este lunes ha amanecido con nubes bajas y nieblas de un extenso banco que cubre gran parte del Mediterráneo occidental y penetra unos kilómetros tierra adentro. A primera hora de la mañana, el aeropuerto de Alicante-Elche ha registrado niebla, con una visibilidad de 500 metros, que no ha afectados a la operativa como sucedió la tarde noche del jueves pasado, con cerca de 30 vuelos desviados o cancelados, caso del Barcelona-Alicante de Vueling,cuyos pasajeros tuvieorn que viajar en autobuses tras regresar el avión a El Prat.
Por su parte, el aeropuerto de Manises (Valencia) ha notificado 6,8 grados a las siete de la mañana. A 110 metros de altitud ya había más de 10 grados; a 250 metros, 14,6 grados, y a 600 16,6, lo que supone una diferencia de diez grados en solo 500 metros entre la superficie y la zona de atmósfera libre a 600 metros de altitud.
