La autopista de circunvalación de Alicante cumple ya dos años con un tramo gratuito que en teoría no debería serlo, por la falta de una barrera en el enlace entre esta vía y la AP-7 que se dirige hacia València, a la altura de El Campello. Los usuarios que acceden a la infraestructura en San Vicente del Raspeig y se dirigen hacia la Marina Baixa o más hacia el norte no pagan peaje, ahorrándose así 1,85 euros en cada trayecto. También quienes entran en la circunvalación en Mutxamel dejan de pagar 0,80 euros. Sin embargo, si se hace el recorrido inverso sí que es necesario abonar la tarifa para salir de la autopista.
La paradoja se debe a la liberalización de la AP-7 entre Alicante y València. Hasta el 1 de enero de 2020, las tarifas entre la circunvalación y la autopista que discurre en paralelo a la costa eran combinadas, de manera que los usuarios que circulaban por la primera vía y que continuaban hacia el norte pagaban el peaje de todo el trayecto al llegar a La Vila Joiosa, Benidorm, Altea o donde fuera oportuno. Pero desde hace dos años, quienes entran en la circunvalación en San Vicente del Raspeig o Mutxamel empalman con la AP-7 en El Campello directamente y, al ser esta última libre de peaje y no haber barreras a la salida, el viaje les sale gratis. De recuerdo de cada trayecto les queda el ticket que deben recoger obligatoriamente al entrar.
Para quienes recorren toda la autopista desde el enlace con la autovía del Camino de Castilla en Monforte del Cid, el coste del peaje es el mismo si dejan la vía en San Vicente del Raspeig que si siguen hacia la Marina Baixa: 1,70 euros. Desde la liberalización de la AP-7 por la costa, el pago se hace abonando una tarifa fija en la barrera situada en el peaje de Monforte. En cambio, a la vuelta sí hay tarifas diferenciadas para quienes hacen todo el recorrido de la autopista y quienes han accedido a ella en Mutxamel o San Vicente del Raspeig, y que han recogido su ticket a la entrada, que en este caso sí entregan otra vez.
Es difícil calcular cuánto dinero se ha dejado de cobrar en peajes en estos dos años, aunque puede hacerse una estimación a partir de los 6.144 vehículos que, de media, han circulado cada jornada por la autopista entre enero de 2020 y agosto de 2021, últimos datos publicados por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Suponiendo que la mitad de ellos se hubiera ahorrado 1,85 euros, saldrían cerca de 5.700 euros diarios. O lo que es lo mismo, un acumulado de alrededor de 4,15 millones de euros.
La autopista de circunvalación de Alicante es una de las que fueron rescatadas por el Gobierno después de que su concesionaria quebrara. Desde 2018 es gestionada por la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre. Así, es el propio Estado el que deja de ingresar el coste de los peajes que no se abonan.
La solución a esta situación, anunciada ya hace dos años, pasa por la construcción de una barrera fija en el enlace entre la autopista de peaje y la que se liberalizó en enero de 2020, lo que permitiría que los usuarios que circulan en sentido norte abonaran su tarifa. Sin embargo, hasta la fecha no ha habido más movimientos al respecto. Consultado el Ministerio de Transportes por este periódico, en el momento de elaborar esta información no ha habido ninguna respuesta.
Tarifas congeladas, al contrario que en la autopista de la Vega Baja
La Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre ha congelado para 2022 el coste de los peajes de las autopistas que gestiona. De esta forma, se mantienen las tarifas para vehículos ligeros de 1,85 euros de la AP-7 en El Campello a San Vicente del Raspeig, y 3,55 hasta el Camino de Castilla en Monforte del Cid, así como 1,70 en el recorrido parcial San Vicente-Monforte. En cambio, en la autopista que discurre por la Vega Baja hacia Cartagena los peajes han subido cerca de un 3%. A partir de ahora, el paso por cada una de las dos barreras fijas cuesta 2,35 euros en temporada baja y 4,15 en temporada alta para los turismos y las motos.
