Sin ningún cambio pese a las cuatro alegaciones presentadas en tiempo, aunque no en forma, según los técnicos municipales. La Comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Alicante ha dado luz verde al Presupuesto para 2022 tras rechazar las propuestas de cambio registradas por los sindicatos SEP, UGT y CCOO y de Miguel Ángel Pavón, exvicealcalde de Alicante y ahora militante del PCE.
El visto bueno de la comisión, celebrada este martes, ha salido adelante con el reparto de votos previsto, idéntico al que se produjo en el pleno de aprobación inicial: los votos a favor de los socios del bipartito (PP y Ciudadanos), la abstención clave de Vox y el rechazo de la izquierda (PSOE, Unidas Podemos y Compromís). La validación definitiva de las cuentas se espera para el pleno extraordinario convocado para el 30 de marzo, justo un día antes de la sesión ordinaria del mes.
Para lo que todavía no hay fecha, y puede que no la haya, es para la reunión del Consejo Social de la Ciudad. El portavoz del bipartito, Antonio Manresa, ha dejado en el aire que se vaya a convocar al órgano consultivo. "Vamos a esperar al resultado de la Comisión de Hacienda y luego valoraremos todo. Ahora estamos en otros trámites", ha señalado. El Pleno de Alicante, en la sesión de enero, aprobó una iniciativa de Unidas Podemos para que se convocase el Consejo Social antes de la aprobación definitiva del Presupuesto con los votos a favor de la izquierda y de Vox.
El Presupuesto que se aprobará definitivamente la próxima semana se trata, como insiste el gobierno municipal, del más expansivo de la historia de Alicante, superando los 313 millones de euros, lo que significa un aumento del 14,4% respecto a las del pasado 2021.
El millonario aumento en las cuentas para este 2022 se basa, fundamentalmente, en un crédito "blando" de unos 20 millones que pedirá el gobierno municipal para asegurarse la ejecución de inversiones en la ciudad y en los fondos (transferencias) de la Generalitat para la ejecución del Plan Edificant (construcción de dos nuevos colegios y mejoras en otros tres centros) y para garantizar la estabilidad de la plantilla de Acción Social a través del Contrato Programa.
El documento aprobado en el Pleno incluye aumentos en la práctica totalidad de las áreas, con datos significativos en Servicios Sociales (12% más, hasta los 13,1 millones), además de en Infraestructuras (29% más, hasta 41 millones), Limpieza (14% más, hasta 54 millones) y Transportes (12% más, hasta 31,7 millones), por las nuevas contratas de limpieza de colegios, limpieza viaria (a la que se destinará 45 millones) y transporte urbano (más de 20 millones al año).
También se incrementan las partidas en Educación, por el Plan Edificant, de 2,4 a 9,2 millones. Por otro lado, crecen de igual forma las partidas para el fomento del empleo, sobre todo entre los jóvenes, con proyectos que alcanzan los 2,4 millones. Para Turismo también hay más presupuesto, hasta los 4,9 millones de euros (un 8% más que el pasado año), que se destinará, según el gobierno, a más apoyo a los sectores y a la promoción turística, además de para la externalización de la gestión del Castillo de Santa Bárbara.
Para sacar adelante el Presupuesto, el ejecutivo de Barcala se ha tenido que plegar ante las reclamaciones de la formación ultra. Los dos socios del gobierno local aprobaron 19 de las 21 enmiendas presentadas por Vox, rechazando solo la propuesta de supresión de las subvenciones a los grupos municipales políticos (45.000 euros, que se reparten proporcionalmente al número de concejales, con casi 14.000 euros para el PP y 7.800 euros para Ciudadanos) y a una petición menor: la creación de la partida “tratamiento antideslizante aceras” con un simbólico euro. Esas fueron las únicas propuestas de Vox que contaron con el "no" del gobierno.
En cambio, el bipartito aceptó el resto de propuestas de Vox, donde se incluyen las exigencias "ideológicas", como recortes o supresión de partidas de áreas sociales como Inmigración, Cooperación o Igualdad (LGTBI), todas en manos de Ciudadanos, además de reducir el presupuesto de "actividades de promoción cultural y celebración del 9 d´Octubre" en favor de la "Celebración del 4 de diciembre como Día de la Reconquista de Alicante", entre otras exigencias.
Así, entre las enmiendas más polémicas de Vox, que se incluyeron en el Presupuesto en la fase de enmiendas, tras el visto bueno de PP y Ciudadanos, destacan la supresión del convenio con la Coordinadora de ONG (10.000 euros) y recortes (de 80.000 a 60.000 euros) en programas del Plan de Acogida y Cohesión Social para crear la partida Proyecto Plan de Voluntariado con 30.000 euros.
También, dentro de la campaña de Vox contra las áreas de Cooperación e Inmigración, el bipartito aceptó recortes en las subvenciones para proyectos de desarrollo (pasando de 160.000 a 135.000 euros), en estudios y trabajos técnicos inmigración (de 40.000 a 25.000 euros) y en subvenciones a entidades de interés social (de 110.000 a 90.000 euros) para, en cambio, fomentar ayudas en territorio nacional ante catástrofes (de 1 a 60.001 euros).
Por otro lado, en Igualdad, otra área gestionada por Ciudadanos, también hubo recortes a petición de Vox. En concreto, el Plan Municipal de Igualdad pasó de 35.000 a 25.000 euros y la partida de apoyo al movimiento LGTBI se quedó en la mitad (de 50.000 a 25.000 euros) para impulsar una campaña "contra la violencia intrafamiliar", que es la catalogación que los ultras dan a la violencia machista, al negar el sesgo de género.
Desde el gobierno municipal, destacan entre las principales inversiones recogidas en el Presupuesto la construcción del CEIP La Cañada del Fenollar con 4.584.904,36 euros y del Centro de Educación Especial El Somni con 2.235.000 euros, la reforma de la plaza de San Blas y adyacentes con 3.437.811,35 euros, reforma de edificios y nuevas construcciones en Las Cigarreras con 2.941.987,19 euros, el asfaltado de caminos en partidas rurales con 2.050.000, la peatonalización del Centro Tradicional con 2.008.341,97 euros, la renovación del pabellón Pitiu Rochel con 1.840.000 euros, los proyectos incluidos en los presupuestos participativos con 1.795.703,21 euros, la construcción del parque público del PAU II con 1.702.700 euros y la remodelación de la calle San Mateo con 897.187,99 euros. La mayoría de estos proyectos, al margen de los relativos al Plan Edificant, ya estaban incluidos en las cuentas del pasado ejercicio.
Reacciones
El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha reiterado el carácter “expansivo del presupuesto y configuración para avanzar en la recuperación económica”. Las cuentas municipales contemplan 37 millones en inversiones, que aumentan un 112%, y otros 47 millones para políticas de creación de empleo, atención e inclusión social. Unas cuentas, que para el alcalde, "han requerido de un gran esfuerzo de los técnicos y funcionarios municipales y de todos los concejales, más allá de que se comparta o no su aprobación, pues siempre es una buena noticia para la ciudad”.
Por su parte, la vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez, ha explicado que “son unos presupuestos elaborados con una gran ambición, conscientes de su importancia y con el foco puesto en los alicantinos". "Unas cuentas en las que nos hemos abierto al diálogo con todos los grupos municipales, que han podido enriquecerlos con sus propuestas, por lo que creemos firmemente que son los mejores que podíamos tener para impulsar la reactivación económica y social de nuestra ciudad tras dos años especialmente difíciles”, ha añadido la también portavoz de Ciudadanos.
Desde Vox, con su abstención clave, el portavoz, Mario Ortolá, ha señalado que "hay que tomar en consideración las alegaciones, aun rechazadas, del SEP en lo que respecta a la carrera profesional por ser un compromiso electoral del alcalde". "Desde Vox nos mantenemos en nuestra postura de abstenernos para facilitar el presupuesto que es necesario para la ciudad y esperando que se cumpla con lo pactado para remanentes como es darle el importe a las partidas abiertas con un euro en las enmiendas aprobadas", ha apuntado.
La concejala de Unidas Podemos, Vanessa Romero, ha reiterado el "rechazo" de su grupo al Presupuesto porque "no da respuesta a las necesidades reales de Alicante, porque llega tarde y porque nace caduco para el contexto de guerra que vivimos". "Son unas cuentas de recortes sociales. Barcala ha asumido unos recortes vergonzosos para contentar a sus socios de la ultraderecha. No se atreven a presentarlos al Consejo Social como se comprometieron en el Pleno", ha apuntado la edil.
Desde Compromís, el portavoz municipal, Natxo Bellido, ha asegurado que han mantenido el voto en contra por tres razones fundamentales. "Dejan el dinero de los alicantinos en los bancos, con una previsión de 100 millones de remanente que ni estará invertido en los barrios de la ciudad, ni en impulsar la transición ecológica, ni en el fortalecimiento de la vacuna social frente a la crisis, ni en el bolsillo de las alicantinas y alicantinos.
La mayor partida presupuestaria de la ciudad se la queda la banca", ha explicado Bellido, quien ha añadido que las cuentas son "fruto del pacto PP-Vox y en el actual contexto de solidaridad internacional hacia las personas que huyen de la guerra de Ucrania, hacen todavía más indecentes e inaceptables los recortes en cooperación internacional y derechos humanos ordenados por la ultraderecha y asumidos por el PP con el silencio cómplice de Cs".
Por último, ha añadido que el Presupuesto llega "muy tarde, y está absolutamente desfasados por la actual crisis energética y humanitaria en la que se ve inmersa Europa, producto de la invasión de Putin". "Mientras debíamos estar hoy aprobando una modificación de crédito para dar respuesta con ayudas al aumento de los costes energéticos que están padeciendo nuestras empresas y autónomos, nos encontramos a finales de marzo, todavía, sin presupuestos. Un presupuesto de PP-Vox que, además, está superado y desalineado con la realidad", ha finalizado Bellido.
Desde el PSOE, el secretario local y concejal, Miguel Millana, considera "un grave error que Barcala no haya aceptado ni una sola de las alegaciones de los sindicatos a los Presupuestos de 2022". "Algunas de ellas son reiteradas de ejercicios anteriores y basadas en promesas electorales del propio Barcala. Es muy llamativo que este Alcalde haya vuelto a incumplir su compromiso electoral de 2019 cuando prometió mejoras laborales a los funcionarios y funcionarias del Ayuntamiento de Alicante, entre ellas, la Carrera Profesional", ha señalado el socialista.
