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Los familiares de ancianos en residencias exigen el fin de la cita previa para las visitas y poder entrar a las habitaciones

La asociación ReCoVa afirma que la Valenciana es una de las tres comunidades con las normas más restrictivas

La asociación ReCoVa pide el fin de la cita previa para las visitas

La Coordinadora de Familiares y Usuarios de Residencias de la Comunidad Valenciana, ReCoVa, denuncia que la vuelta a la normalidad en los geriátricos se ha enquistado, pese al fin de las limitaciones en el resto de ámbitos.

En este sentido, la entidad lamenta que la Valenciana es una de las tres comunidades autónomas con normativas en residencias más restrictivas junto con Galicia y Canarias.

Los familiares que tienen a sus mayores en residencias piden en este sentido que se levante la prohibición de acceder a las habitaciones de sus familiares, el fin de la cita previa en visitas y salidas, la vuelta a los horarios previos a la pandemia y la “eliminación de las concesiones que se hacen a las direcciones de las residencias en la redacción de la normativa y que les otorga un poder ilimitado”.

La asociación lamenta que lleva más de un mes esperando el cambio de normativa “y tras varios intentos infructuosos de conocer la fecha exacta del cambio de y los extremos que finalmente incluirá, queremos manifestar nuestro malestar por la dilación con que la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas está gestionando este tema”.

En Comunidades como Madrid o País Vasco, señala ReCoVa, no es necesario concertar cita previa para las visitas a la residencia. En Cataluña “pueden incluso visitar a los positivos”. “Y por supuesto en todas ellas, acceder a las habitaciones”. Mientras, en Comunidad Valenciana, “nos vemos obligados a recurrir a los Juzgados o Fiscalías porque las vulneraciones de derechos que se están produciendo son tremendas y, a nuestro parecer, no tienen sentido desde el punto de vista ético, científico o jurídico”.

En opinión de esta asociación, el retraso por parte del gobierno autonómico en esta actualización de la normativa “es una condena en firme a nuestros padres, madres y familiares”.

En este sentido, sostienen que los mayores que viven en residencias continúan con normas “que están apagando sus vidas”.

Afirman en este sentido que “las pérdidas de peso entre residentes están siendo generalizadas y significativas, dándose casos de pérdidas de 20 y 30 kilos”.

Denuncian también que se han multiplicado las úlceras y las caídas por falta de movilidad adecuada y cambios posturales. Además, aseguran que no en todos los casos se respeta lo previsto respecto del acceso de los familiares a las residencias para despedirse antes de fallecer los residentes como establece la normativa. “Hay residencias déspotas que llaman por teléfono a los familiares una vez ha tenido lugar el éxitus, incluso horas más tarde; esto supone una situación desgarradora para esas familias y ese dolor perdura para siempre”.

Exponen además que hay residencias donde los familiares sólo pueden ver a los mayores 15 minutos a la semana y que ni siquiera habilitan espacios en el interior de las residencias, “lo que ha supuesto estos días de lluvia, que ni siquiera les pudieran ver ese ridículo y mísero período de tiempo”.

Afirman también que la pérdida de objetos, dentaduras, ropa de los mayores es ingente. “Hace más de dos años que los familiares no tenemos acceso a las habitaciones de los mayores. Hay mayores que relatan con tristeza cómo otros residentes llevan sus prendas o que sus armarios están desorganizados”.

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