La pizarra de un bar de Alicante ha servido como lienzo de una nueva versión del imborrable lema 'si bebes, no conduzcas'. Esta vez, mismo significado, diferente motivación. Si el objetivo del eslogan original es promover la responsabilidad individual y evitar accidentes y muertes en la carretera, en esta ocasión la consigna es descaradamente comercial: 'Bebe y no conduzcas'. Las frases son prácticamente idénticas y coinciden en una idea fundamental: la de no mezclar alcohol y conducción. 

Las tragedias en el asfalto fueron el origen del lema inicial; en esta ocasión, la causa radica en los elevadísimos precios de los combustibles. Este contexto hostil para el bolsillo de los conductores ha encendido el ingenio del propietario del local alicantino, que ha utilizado parte de su pared a modo de mural para escribir una aguda comparación y dejar un elocuente mensaje digno de encabezar la mejor campaña de marketing.

No sabemos si la ocurrencia habrá supuesto un empujón a las ventas de cerveza en el establecimiento, pero lo que sí es seguro es que ha gustado. Prueba de ello, es que un cliente no pudo evitar hacerle una foto y compartirlo en sus redes sociales. La imagen, publicada en Twitter por el usuario @AsuraRevemge, ha generado cierta repercusión y varios comentarios que felicitan al autor no solo por su originalidad, sino también su caligrafía. 

Un mensaje con sello alicantino que merece ser convertido en un fenómeno viral y que quizá deja entrever una lección que puede llegar a ser positiva: Todo lo que no han conseguido las campañas de la DGT, lo lograrán los elevados precios de la gasolina.