El sindicato CSIF alerta de la falta constante de facultativos en intervenciones del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) y exige a Conselleria de Sanidad que refuerce las plantillas y que garantice asistencia médica en todos los servicios. La central sindical advierte de que la situación se puede agravar con el incremento de visitantes por las fiestas de Semana Santa.
El sindicato alerta de la gravedad de la situación, que se repite sobre todo en fechas señaladas como las vacacionales y "que resulta especialmente alarmante ante el incremento de visitantes". La central sindical recuerda que estos vehículos llevan el rótulo de SAMU porque deben contar con un facultativo en todas sus asistencias.
CSIF lamenta “la falta de soluciones por parte de Conselleria” y advierte de que puede reproducirse esa carencia de facultativos en jornadas clave como las inminentes de Semana Santa, entre el 14 y el 19 de abril. El sindicato insiste en que “se dote de los medios necesarios a estas unidades para que sean totalmente operativas ante cualquier atención sanitaria urgente”.
El sindicato recalca que la situación resulta insostenible y se alarga en el tiempo, por lo que exige la “depuración de responsabilidades de quien permite estas graves carencias de personal y falta al respeto tanto a la ciudadanía como al resto de profesionales del SAMU”.
La central sindical reclama una dotación adecuada de personal en todas las unidades y turnos y una mejora de las condiciones laborales y retributivas a los profesionales para lograr que continúen con su tarea en la Comunidad Valenciana y no se marchen a otras autonomías.
En la provincia de Alicante 18 bases el pasado verano sufrieron este problema de falta de facultativos. Una situación que afectó a bases de 12 horas y bases de 24 horas, incluyendo el helicóptero de conselleria que traslada pacientes críticos, acude a sitios no accesibles o va a Tabarca entre otras funciones. Aunque la falta de médicos en los meses estivales es habitual desde hace años, este pasado verano la situación fue más grave e impactó en servicios como el SAMU, ya que con el coronavirus la demanda de especialistas por parte de todas las comunidades autónomas es mayor.
A falta de médicos en estas ambulancias, que son UCIs móviles para pacientes cuya gravedad es extrema, son los enfermeros quienes deben asumir la asistencia a los enfermos, una medida criticada por los sindicatos y los colegios profesionales.
La Conselleria de Sanidad se escudó el pasado verano en la falta de médicos para justificar que hubiera ambulancias del SAMU en la provincia de Alicante atendiendo urgencias sin facultativo. «El Servicio de Emergencias Sanitarias, en los planes de vacaciones, procura la cobertura del cien por cien de los profesionales de todas las unidades de SAMU de la Comunidad Valenciana, incluidos el personal de los helicópteros sanitarios». Sin embargo, añadía Sanidad, «este año hay un escaso personal médico disponible en la bolsa de trabajo de Instituciones Sanitarias, motivo por el cual y de modo puntual, ciertas unidades SAMU han realizado algunas atenciones sanitarias sin médico».
Sostienen desde la conselleria que, cuando se da una situación de este tipo, «la respuesta a la actividad asistencial se reorganiza, activando las unidades SAMU más próximas en caso de necesidad e intentando organizar la ubicación de los recursos SAMU para dar cobertura a la mayor población posible, con una unidad asistencial completa». También señalan que en caso de necesidad se puede movilizar a un médico de un centro de salud para que suba a la ambulancia.
