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La Guardia Civil aborta tres intentos de introducir droga en Fontcalent y Villena

Un perro del Servicio Cinológico descubre a dos mujeres que llevaban hachís para visitar a familiares y un paquete con estupefacientes en unos pantalones

Pantalón vaquero donde ocultaron láminas de hachís en la cintura. INFORMACIÓN

Los dispositivos de la Guardia Civil para reforzar la vigilancia y seguridad de las prisiones de la provincia de Alicante han permitido abortar en los últimos días tres intentos de introducir droga en los centros penitenciarios Villena y Alicante por parte de familiares de presos que han sido investigados por estos hechos. La droga fue descubierta en los servicios preventivos que se realizan en colaboración con Instituciones Penitenciarias para controlar las visitas y envíos a internos de Villena y Fontcalent. 

El Servicio Cinológico de la Guardia Civil realiza de forma periódica inspecciones en los accesos a ambas prisiones y el pasado día 7 se detectaron dos intentos de introducir droga en Villena. "Anty", uno de los perros de la Guardia Civil adiestrado para detectar sustancias estupefacientes, ayudó a descubrir a dos mujeres que iban a visitar a sendos reclusos y portaban droga.

Según la Guardia Civil, en la primera identificación que se realiza a la entrada a la prisión el perro ya marcó a su guía un coche en el que viajaba una mujer, por lo que se procedió a realizar un cacheo exhaustivo a la conductora y encontraron que ocultaba entre sus efectos personales una bellota de hachís que arrojó un peso de 17 gramos.

"Anty" continuó olisqueando los vehículos y detectó nuevamente la presencia de droga en otro coche conducido por una mujer. Los agentes le incautaron una bellota de 10 gramos de hachís y 38 pastillas de un medicamento para trastornos de tipo psiquiátrico, aunque la mujer no aportó prescripción facultativa alguna. 

La Guardia Civil realizó el día 10 de abril otra inspección en la prisión de Foncalent, donde revisaron los paquetes enviados a los internos. "Anty" marcó uno de ellos y al abrirlo los agentes hallaron unos pantalones vaqueros y en el forro interior de la cintura descubrieron tres láminas de hachís de tres gramos cada una. 

La Benemérita ha explicado que la introducción de sustancias estupefacientes en un centro penitenciario supone para el responsable la imputación de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas. Las sustancias incautadas en Villena y Fontcalent han sido intervenidas y enviadas a Sanidad para su análisis, mientras que las diligencias fueron remitidas a los juzgados de Alicante y Villena.

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