Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El éxodo de profesionales sanitarios de Primaria se acelera por la sobrecarga de trabajo

La falta de recursos humanos y materiales dispara las jubilaciones anticipadas de médicos rompiendo la tendencia de cinco años atrás

Protesta de médicos en el centro de salud del barrio San Blas en Alicante. RAFA ARJONES

El Día Nacional de la Atención Primaria se conmemora este 20 de abril pero para los profesionales sanitarios de la provincia "hay muy poco que celebrar". A pesar de ser la base del sistema público de salud, se está perpetuando como "la cenicienta", un problema que en la Comunidad Valenciana comenzó cuando se crearon las Gerencias únicas en las áreas de cobertura en las que se reparte la población.

De este modo se aglutinó el control de la Atención Especializada y de la Primaria privilegiando a una y marginando a la otra. Es el sentir general de los profesionales de los centros de salud que llevan años enfrentándose a la falta de recursos materiales y personales, al tiempo que van asumiendo progresivamente funciones más propias de Especializada que de Primaria.

Esta situación ha generado un éxodo de profesionales de Primaria a Urgencias, Samu, Especializada y Hospitalaria, o incluso a otros países europeos donde las condiciones laborales y salariales mejoran con creces las que ofrece España.

Cinco años atrás era habitual que los médicos de familia solicitaran a la Administración una prórroga para seguir trabajando cuando alcanzaban la edad de jubilación a los 65 años. Pues bien, según se señala desde el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana CESM-CV, en los últimos años se ha registrado una avalancha de peticiones de jubilación anticipada por la una sobrecarga de trabajo, en la mayoría de las ocasiones sin posibilidad de ser planificada, que pone en riesgo la propia salud de los facultativos por el estrés y la presión a la que se ven sometidos al verse obligados a acortar al máximo los tiempos de consulta para atender a todos los pacientes.

La Medicina de Familia ya no resulta un destino atractivo para un médico. La prueba es que figura en las últimas posiciones de solicitudes de plaza para los médicos internos residentes. Los motivos son varios y llevan camino de convertirse en una "enfermedad crónica" del sistema.

Según explica Víctor Pedrera, vicesecretario general de CESM en la Confederacion Estatal de Sindicatos Medicos y experto en gestion clínica e investigacion sobre la gestion clinica en Atención Primaria de la Salud, para garantizar la calidad en la atención del paciente un facultativo debería atender un máximo de 25 adultos diarios y un pediatra a 20 menores. Así lo establecen las sociedades científicas dentro de los parámetros establecidos para un funcionamiento adecuado.

70 pacientes diarios

Sin embargo muchos de ellos, especialmente los asignados a centros de salud de zonas costeras donde la presión asistencial es muy alta, tienen que enfrentarse a agendas de hasta 60 y 70 pacientes diarios -algunos por atención inmediata sin cita previa- y a ello se añade la carga de actividad burocrática a la que se les obliga desde la Conselleria.

Un "auténtico lastre" para los profesionales porque no es el trabajo para el que se han formado y le resta mucho tiempo para atender a los enfermos en consulta. De hecho, consideran que esa función la debería asumir el personal administrativo en la propia consulta, tal y como se hace en Atención Especializada y Hospitalaria.

"El nuevo plan de la Administración para subsanar el problema de la Atención Primaria no van a tener ningún efecto porque sigue sin cubrirse el número de médicos que hacen falta, y sin adoptar las medidas realmente necesarias que hagan atractivo trabajar en Primaria como sí lo era ocho años atrás", apunta Víctor Pedrera advirtiendo del "grave error en el que puede incurrir la Conselleria de Sanidad si pretender sustituir a los profesionales de Medicina aumentando los profesionales de Enfermería y de Administración".

Para el experto en gestión clínica "actuar así es un fraude para el paciente y supone perpetuar la condición de la Atención Primaria como la cenicienta del sistema sanitario público". Una reflexión que hace después de que en la Comunidad Valenciana se vayan a reforzar las plantillas de los centros de salud con 316 administrativos frente a 304 médicos, "que es menos de la mitad de los facultativos que se necesitan para hacer frente a las actuales necesidades", subraya el doctor Pedrera.

Plan de Acción de Sanidad

Precisamente el pasado 12 de abril se celebró el Día Internacional de la Atención Primaria y la consellera de Sanidad aprovechó para resaltar la importancia que tiene la Atención Primaria dentro del sistema público sanitario en la Comunidad Valenciana. “Día a día se trabaja en mejorar la atención que recibe la ciudadanía y para que los centros sanitarios cuenten con más y mejores recursos para poder responder a las necesidades asistenciales de la población”, manifestó la consellera.

Ana Barceló también adelantó aspectos relacionados con el Plan de Acción para Atención Primaria y Comunitaria, el documento que detalla y desarrolla las actuaciones contempladas en el Marco Estratégico y que se ha remitido al Ministerio de Sanidad para optar a la cofinanciación con fondos estatales de algunas de las iniciativas recogidas en el Marco Estratégico.

Entre estas medidas se encuentra la cofinanciación del nuevo equipamiento tecnológico con el que se dotará a los centros de salud.

La incorporación de nueva tecnología para mejorar la capacidad resolutiva es una de las medidas contempladas en el nuevo Marco Estratégico de Atención Primaria y Comunitaria 2022-2023, puesto en marcha por la Conselleria de Sanidad y que cuenta con un presupuesto de 326 millones de euros destinados a la mejora de las infraestructuras, equipamiento y sistemas de información, así como al aumento de los recursos humanos en los centros sanitarios de la Comunidad Valenciana y a la puesta en marcha de un nuevo modelo asistencial y organizativo en los centros.

Según indicó la consellera “la finalidad es consolidar este nivel asistencial como eje vertebrador del sistema sanitario. Por ello, además del presupuesto inicial durante estos dos años para renovar la Atención Primaria (326 millones), en los próximos años se seguirán aumentando los recursos hasta alcanzar en 2025 el 25% del total del presupuesto sanitario”. De hecho, la Comunidad Valenciana ya es la cuarta que más porcentaje destina en España con un 15,1%, según datos del Ministerio de Sanidad.

El objetivo del nuevo modelo de Atención Primaria es adecuar la asistencia sanitaria a la nueva realidad. "De esta manera, se pretende responder a la cronicidad y el envejecimiento de la población, de ahí que se vaya a incrementar el personal y a potenciar las nuevas tecnologías y los sistemas de información", señalaron desde Sanidad.

Como prueba de ello Ana Barceló anunció que adquirirá “más de 2.000 nuevos equipos de tratamiento y de diagnóstico, lo que va a permitir agilizar y aumentar la capacidad resolutiva de los centros de salud”. De esta forma, los centros sanitarios contarán con nuevos ecógrafos fijos y portátiles, retinógrafos, Doppler, cámaras para teledermatología, dermatoscopios, electrocardiógrafos, dispositivos de monitorización de tensión arterial, desfibriladores y equipos completos para la atención de emergencias en entornos rurales.

De esta manera se permitirá agilizar la realización de pruebas diagnósticas, evitar el desplazamiento de los pacientes a otros centros y, en definitiva, ofrecer una mejor calidad asistencial.

Aumento de plantilla

De hecho, la plantilla actual de Atención Primaria se va a incrementar en un 13%, y este año contará con 1.613 plazas más, "lo que va a permitir reducir las ratios por debajo de las recomendaciones existentes". Para ello, la Conselleria de Sanidad ha anunciado que va a invertir 130,7 millones de euros.

Además, en cuanto a recursos materiales, la inversión en tecnología e infraestructuras de 2022 y 2023 asciende a los 188 millones de euros. Del total, más de 76 serán para la construcción de nuevos centros de salud; y 8 millones irán destinados a mejoras en los sistemas de información.

Los centros de salud contarán con tres coordinaciones diferenciadas: médica; de enfermería y de administración/admisión. El objetivo es conseguir una mayor agilidad y eficiencia en la atención sanitaria. Para ello, se van a establecer indicadores propios de los equipos de primaria en los acuerdos de gestión con el fin de mejorar aspectos particulares identificados en cada centro.

Todas las acciones contempladas en el Marco Estratégico de Atención Primaria "pretenden optimizar la atención clínica, además se van a establecer mecanismos para mejorar la coordinación entre los distintos niveles asistenciales, de primaria con especializada, con salud mental, salud pública, así como los ámbitos sociosanitarios y educativos".

En paralelo, se está trabajando en un decreto para la puesta en marcha de mecanismos para incentivar la ocupación de los puestos de difícil cobertura. “Vamos a crear un potente sistema de Atención primaria que le va a permitir convertirse en el eje principal de la sanidad valenciana. Todas las medidas que se van a poner en marcha están orientadas a fortalecer el sistema, a modernizarlo y, sobre todo, a responder a las necesidades de los ciudadanos”, destacó Ana Barceló.

Compartir el artículo

stats