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Urbanismo busca el aval de Barcala para "trasladar" la residencia de salud mental del PAU 1 a Rabasa

La concejalia propone reubicar la infraestructura en el bulevar de Vía Parque, junto a la rotonda de la avenida de la Universidad tras descartar otras parcelas próximas por el paso de un colector - El alcalde se comprometió a respetar el pacto entre la fundación y los vecinos, manteniendo el centro de día en el PAU 1

Parcela sobre la que se proyecta ahora la residencia de salud mental, entre San Agustín y Rabasa PILAR CORTÉS

El Ayuntamiento de Alicante tiene nueva ubicación para la residencia de salud mental proyectada en un principio sobre un solar del PAU 1, donde se construirá un centro de día. La Concejalía de Urbanismo ha propuesto a la promotora del proyecto, la fundación Adiem, "reubicar" la infraestructura en una parcela situada en el bulevar de Vía Parque, entre los barrios de Rabasa y San Agustín, frente al colegio público de la zona.

La propuesta, con todo, está a la espera de contar con el aval del alcalde, Luis Barcala, que en un pleno reciente se comprometió a respetar el pacto alcanzado entre dos partes enfrentadas en un inicio, la fundación y los vecinos del PAU 1.

Tras meses de enfrentamiento, los vecinos del PAU 1 y la fundación que promueve la construcción de un centro de salud mental en Alicante llegaron a finales de marzo a un principio de acuerdo. El pacto entre ambas partes recogía que el proyecto se divida en dos instalaciones diferenciadas.

Una de ellas, el centro de día, se mantendría sobre el solar previsto en el PAU 1, ya cedido por el Ayuntamiento de Alicante, ocupando 3.000 metros de los 5.000 metros previstos en el terreno situado entre las calles Doctora Matilde Pérez Jover, Médico Manuel Alberola y Enfermera Angelina Ceballos. La segunda de las instalaciones, un centro residencial, se construiría en otro barrio de la ciudad, para así liberar espacio en el solar para dotaciones deportivas. En el pleno, se habló de trasladar esa infraestructura a las proximidades de la futura comandancia de la Guardia Civil, que se ubicará en Rabasa. Sin embargo, elegir ese suelo retrasaría el proyecto.

El debate más bronco de esa sesión plenaria, la de marzo, se produjo en la recta final de la sesión, a consecuencia de una propuesta de Compromís sobre el centro de salud mental, que iba a ser enmendada, a propuesta del PSOE, tras el acuerdo alcanzado entre los vecinos del PAU 1 y la fundación Adiem, promotora del proyecto. El gobierno municipal, de PP y Ciudadanos, bloqueando la enmienda, torpedearon que se ajustara la propuesta inicial de Compromís para que el Ayuntamiento hiciera propio el pacto suscrito entre los vecinos del PAU 1 y la fundación Adiem para la construcción de un centro día de salud mental en el barrio y buscar otra parcela para el centro residencial.

Tras el duro debate, con acusaciones cruzadas entre la izquierda y el gobierno municipal, el alcalde dijo en público, delante de las dos partes implicadas que habían intervenido previamente en la sesión, que el ejecutivo aceptaba el acuerdo entre vecinos y la fundación, aunque en días previos, desde el gobierno, se hablaba de trasladar todo el proyecto a otra parcela.

Posteriormente a esa sesión plenaria, se valoraron otras ubicaciones próximas, pero también se descartaron al pasar un colector y un sumidero bajo las parcelas o también por tratarse de suelo viario. Así, el terreno que presumiblemente acogerá la residencia estará en la zona central de la Vía Parque, cerca de la rotonda de la Universidad. El promotor de la obra tendrá que ubicar el acceso en una vía perpendicular al viario principal y deberá permitir el paso peatonal.

Tras lo sucedido en el pleno con el compromiso púbico del propio alcalde, desde Urbanismo buscan el aval del conjunto del bipartito para cambiar la ubicación de una de las dos dependencias previstas en un inicio en el PAU 1. El centro de día debe activarse cuanto antes para que la fundación no pierda la subvención recibida de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.

Reacción de la oposición

Desde Compromís, el portavoz, Natxo Bellido, ha lamentado que el equipo de gobierno lleve "meses tomando el pelo tanto a la fundación como a los vecinos del PAU 1". "Cuando parecía que todo estaba claro, tanto el solar en el que situaría el CRIS como el solar de la futura residencia, siguen mareando la perdiz; un día les dicen una cosa y otro día les dicen otra y les ofrecen otro solar", ha señalado Bellido, quien ha incidido en que se trata de "cuestiones muy serias, como lo es la salud mental, por lo que no se puede actuar de manera irresponsable ni jugar con los vecinos con reivindicaciones que vienen planteando desde hace años". 

El portavoz de Unidas Podemos, Xavier López, se ha preguntado "cómo es posible que Barcala y el PP pasen por encima del consenso que ha generado en el barrio del PAU-1 el acuerdo entre Adiem y la asociación vecinal, dilatando los tiempos y evitando sumarse a los acuerdos alcanzados, si no es porque están dispuestos a hacer perder la subvención de la Generalitat para la construcción del centro de salud mental, antes que colaborar y facilitar unos trabajos que son en beneficio del interés general".

La concejala socialista Trini Amorós ha apuntado que "Barcala ha de explicar a todos los alicantinos por qué está obstaculizando la creación de una residencia que atienda a personas con problemas de salud mental". "¿Es porque el proyecto lo financia la Generalitat o es porque no le parece urgente dar solución a familias alicantinas que llevan años esperando atención en salud mental?", se pregunta la edil, que recuerda que hace dos meses que vecinos y fundación llegaron a un acuerdo y que, a 31 de diciembre, la promotora del proyecto "ha de presentar el certificado de final de obra y Barcala sigue se brazos cruzados". "¿Cuánto vale la palabra del alcalde de Alicante?", finaliza.

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