Cientos de agricultores, empresarios, cargos públicos y vecinos de Alicante se concentran desde la once horas de este martes en la plaza de la Montañeta para protestar por la decisión del Gobierno central de recortar el trasvase Tajo-Segura y la incertidumbre que sigue pesando sobre el Júcar-Vinalopó. La jornada está organizada por Asaja-Alicante, el Sindicato Central de Regantes del Tajo-Segura y la Junta Central de Usuarios del Júcar-Vinalopó. Cuenta con el respaldo del Consell, la Diputación, PP, PSPV, Compromís y Ciudadanos. El acto ha dado comienzo con Mazón y el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras. Se observan carteles en los que se reza "PSOE o agua"; "Más desalaciones = más contaminación"; "La muerte de la huerta de Europa". Esperando su turno para intervenir están Mireia Mollà, Ana Barceló y Roger Llanes.

Agricultores y empresarios hortofrutícolas, que denuncian que el paso adelante dado por la Confederación del Tajo, apoyado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el gobierno de Castilla-La Mancha, de subir el caudal ecológico del río, en principio hasta los 8,6 metros cúbicos por segundo, provocará una merma de agua del Tajo de 105 hm3 al año, el abandono de miles de hectáreas de cultivos y 6.000 empleos directos sólo en la provincia de Alicante. Los agricultores, el Consell, la Diputación y la patronal exigen la Gobierno que pare el desaguisado en el Consejo de Ministros.

Está prevista la presencia en la concentración, entre otros, de la consellera de Agricultura, Mireia Mollá, el presidente de la Diputación, Carlos Mazón, los alcaldes de Alicante y Elche, la síndica del PSPV en la Cortes y presidenta del PSPV, la exconsellera de Sanidad y sajeña, Ana Barceló, Roger Llanes, secretario autonómico de Agricultura, Ana Serna, vicepresidenta de la Diputación y, por supuesto, los principales dirigentes de las asociaciones de agricultores.

En el acto se apostarán una veintena de tractores y remolques con fruta para regalar y tirar por el suelo en protesta por la venta a pérdidas a la que están condenados nuestros productores por cada día que no se pone en marcha la Ley de Cadena Alimentaria. La acción representa también el destino al que están abocados los agricultores si se consuma el recorte del trasvase Tajo-Segura y no se garantizan los envíos de caudales en el Júcar-Vinalopó. Tras la protesta, tendrá lugar la lectura de discursos a las 12 horas. Está previsto que los portavoces de cada entidad convocante se dirijan al público durante cinco minutos.

Asaja Alicante ha hecho un llamamiento a los ciudadanos y a todas las entidades, sin distinción política o sectorial, a defender con su presencia el futuro del sector primario. Están en juego más de 3.000 millones de PIB y la forma de vida de decenas de miles de familias de nuestra provincia. La concentración se realiza frente a la Subdelegación del Gobierno en Alicante, en la Plaza de la Montañeta.

Los agricultores exigen el cumplimiento real e inmediato de la Ley de Cadena Alimentaria: precios agrarios justos y prohibición de la venta a pérdidas. Es necesario garantizar por ley que los precios sean superiores a los costes de producción. Incremento de los costes de producción. Un plan de choque, con apoyos directos y medidas fiscales para hacer frente a las continuas escaladas en los costes de producción y en los principales inputs agrarios. Gasóleo, energía eléctrica, agua, mano de obra, abonos y fertilizantes, semillas, pienso para ganado…

“La huerta de Europa depende exclusivamente del trasvase Tajo-Segura"

José Vicente Andreu - Presidente Asaja-Alicante

Y, por supuesto y como reivindicación general, el mantenimiento de la regulación del trasvase Tajo-Segura. Creación de un plan nacional hídrico y de infraestructuras hidráulicas que garantice la solidaridad entre territorios, la activación definitiva de la conducción de agua, y la derivación prioritaria de excedentes del Júcar hacia los regadíos del Alto y Medio Vinalopó a través del trasvase Júcar-Vinalopó. Y un precio máximo del agua desalada inferior a 0,30 €/m3 para los regadíos del Segura.

El presidente de Asaja-Alicante, José Vicente Andreu, considera que la crisis de la agricultura es sólo el anticipo de otra crisis más que sufrirán todos los alicantinos y españoles. “La huerta de Europa depende exclusivamente del trasvase Tajo-Segura. Aporta más de 3.000 millones cada año al PIB nacional, el 0,2% de todo lo que se genera en España en un año, y genera 70.000 puestos de trabajos directos e indirectos en las tres regiones que ahora deberán comprar ese agua diez veces más cara y con peor calidad”, afirma Andreu. “Es el interés de todos que sigamos aportando a la hucha común y que esas decenas de miles de familias sigan manteniendo vivo nuestro entorno rural”.