Más de un cuarto de siglo después de su fundación, la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante -AEFA- puede sentirse orgullosa de los logros alcanzados durante estos años. El arrojo y valentía de unas cuantas personas visionarias y pioneras permitió a la provincia de Alicante adentrarse en una aventura que nos llevó a ser la primera entidad de esta índole en España, con nuestro querido y recordado Manuel Pélaez Castillo al frente. Un hombre al que estaremos eternamente agradecidos por su espíritu precursor y su dedicación a nuestro desarrollo económico. 

La determinación, el dinamismo, la anticipación de acciones y, fundamentalmente, la estrategia de aglutinar los intereses del tejido empresarial de nuestros municipios para defenderlos con vehemencia ha marcado la hoja de ruta de AEFA desde sus inicios, en 1995. Estas premisas han contribuido al fortalecimiento, perpetuación, creación de empleo y riqueza, innovación, progreso, exportación e intercambio de conocimientos y experiencias de nuestras empresas, además de aumentar nuestra solidez y presencia en el panorama nacional e internacional. 

Porque ese espíritu emprendedor ha ido dando paso a una entidad que ha sabido impregnarse y asentarse en todas las comarcas de nuestra provincia, adaptando sus acciones a las peculiaridades, idiosincrasia, multiplicidad de sectores y prioridades de cada zona. Colaborando con el entramado social, cultural o deportivo, manteniendo un diálogo fluido con pequeñas, medianas y grandes empresas familiares que constituyen el 92% de nuestro músculo financiero y arropando la continuidad de sociedades que han pervivido de generación en generación. 

Carlos Mazón Guixot, Presidente de la Diputación de Alicante.

Alicante es una provincia abierta al mar, pero bien apegada a sus raíces y a la unión de sinergias y esfuerzos, elementos, ambos, que nos han permitido avanzar al unísono, sin dejar a nadie atrás. Una cualidad que nos envidian otras provincias, porque precisamente nuestras diversidades productivas, paisajísticas y lingüísticas, nuestra amalgama de tradiciones y enfoques, nos han estimulado a progresar como un todo, en conjunto, buscando el beneficio común. 

Esa conjunción de energías nos hace grandes y nos abre un camino de futuro ilusionante, lleno de posibilidades, donde se armonicen la tradición con la innovación, las empresas centenarias con otras de nueva creación, porque si hay una característica que nos define a los alicantinos y alicantinas es la audacia y la irrefutable capacidad de trabajo y superación. 

Mi compromiso y el de la Diputación de Alicante con AEFA y con su presidenta, Maite Antón, es más robusto que nunca en esta era de la recuperación, en la que debemos anticipar tácticas para relanzar nuestro progreso.