El sindicato de enseñanza CC OO anima a los padres de alumnos a solicitar formalmente que se paren las clases en los casos en los que se superen los 27 grados en el aula junto a una humedad del 70%.

Estas solicitudes de las AMPA son imprescindibles para solicitar la restricción del horario de las clases, y junto a los acuerdos de profesorado y la comunidad educativa "se pueden detener las clases antes del final de la jornada escolar mientras existan condiciones de excesivo nivel de temperatura en las aulas", afirma el sindicato.

El delegado Rafael Martínez detalla que en estos días de final de curso se está haciendo difícil soportar "las elevadas temperaturas que se sufren en muchas aulas", por lo que reclama a la administración educativa "una actuación rápida para preservar las condiciones óptimas tanto para el alumnado como para el profesorado de los centros educativos" de la Comunidad.

Por zonas

Concretan que hay localidades cuya situación geográfica lleva aparejada una mejor condición climatológica, "pero otras están sufriendo unas condiciones extremas que hacen imposible el normal desarrollo de las clases en un momento en el que el curso está prácticamente terminado", abundan.

De la misma forma precisan que también hay centros educativos más preparados que otros, en los que no hay "ni siquiera sombras en los patios y el profesorado no sabe dónde tener al alumnado".

Ante esta situación CC OO recomienda "que se tome la temperatura de las aulas cada hora y, en función del diagnóstico, la comunidad educativa coordinada con las AMPA, solicite en el centro el cese de las actividades lectivas si se llega a situaciones en las que la temperatura supera el máximo permitido de 27 ºC y el 70% de humedad relativa".

Protocolo

Además piden a los responsables educativos que den instrucciones a los centros educativos "con protocolos de actuación que sirvan para mejorar las condiciones de las aulas".

En este sentido recuerdan que la actual situación de emergencia climática "requiere de una planificación a largo plazo, revisando las instalaciones educativas actuales y realizando inspecciones técnicas periódicas·.

Exigen por tanto a la conselleria "que se implique en las dos demandas que hace el sindicato: por un lado, difundiendo, explicando y animando a los acuerdos en cada caso para hacer frente a las altas temperaturas cuando se dan, y por otro elaborando propuestas didácticas y dinamizando la implicación en la lucha contra la amenaza que supone el cambio climático".

Desde la Federación de Educación de CC OO concluyen considerando "imprescindible que la urgencia al cambiar nuestros modelos de gestión de la energía y producción de energía sea uno de los ejes principales y transversales en la programación y acciones de los centros educativos".

Mareos

Por otra parte desde el sindicato CSIF hacen hincapié en urgir medidas de cara a la próxima prueba de las oposiciones docentes este sábado, tras constatar el mareo sufrido por uno de los aspirantes en Valencia el pasado fin de semana en que arrancaron los ejercicios.

Exigen Educación "evitar situaciones como las que se han dado en el inicio de las oposiciones a maestro, con mareos e incluso el desmayo de un aspirante antes las elevadas temperaturas en el interior de las aulas donde se llevan a cabo las pruebas. La central sindical recuerda que la normativa de prevención establece máximos de 27 grados, y en las aulas se alcanzaron los 30".

El sindicato explica que curso tras curso insisten en un plan estratégico de revisión y mejora de las instalaciones, "que contemplaría una climatización adecuada para evitar las bajas temperaturas en invierno y las altas en semanas como las actuales, de mucho calor".

Opositores

Lamentan por tanto "la falta de actuaciones por parte de conselleria ante una previsible situación con alrededor de 20.000 opositores inscritos para participar en unas pruebas en las que optan a un total de 1.229 plazas de maestros en un contexto de lógicos nervios".

CSIF asegura haber ha recogido quejas de tribunales y opositores en este sentido, y detalla que la instalación de un pequeño ventilador en una esquina de un aula no permite climatizar una estancia "ni rebajar la temperatura a esos 27 grados como máximo que marca la normativa de prevención".

El sindicato concluye con críticas a "la dejadez de la Administración ante las altas temperaturas que sufren a diario profesorado y alumnado, y durante este mes de junio, además, los miles de opositores que concurren, en una situación de nervios y tensión, para ganar una plaza de maestro".