Aterrizaje del Botànic en Alicante. Si este sábado se echó en falta a representantes del Consell en el disparo de la mascletà -algo que fue criticado incluso en el seno interno de los partidos de izquierda- PSOE y Compromís parecen haber aprendido la lección.
Ambas formaciones desplegaron sus comitivas en la zona reservada de la plaza de los Luceros, de nuevo sin representantes locales ni autonómicos de Unidas Podemos. Frente a ellos, Mazón y Barcala volvieron a darse un baño de masas. Eso sí, agridulce esta vez, con algunas recriminaciones vecinales.
La consellera socialista de Innovación, Josefina Bueno, ha sido la primera -y por el momento la única- representante del Gobierno autonómico en dejarse ver en las Hogueras. Arropada por ocho de los nueve concejales de su formación en la ciudad -con la única ausencia de Miguel Millana- protagonizó una de las imágenes más "esperadas" de la zona para autoridades: la del encuentro con el portavoz municipal, Paco Sanguino.
Bueno, que suena con fuerza para suceder al alicantino al frente de las listas municipales en 2023, apenas conversó unos instantes con él. Ambos, sabedores de que gran parte de las miradas estaban puestas en su encuentro, posaron juntos sin grandes muestras de complicidad.
Todavía no ha empezado el ruido de sables en el PSOE de Alicante, al menos en público, pero sí empiezan a moverse las fichas en el tablero. Hace unos días, Sanguino se apoyaba en su secretario de organización autonómico, que dijo que "no tiene por qué haber un cambio de cartel en Alicante".
Pero la realidad es que las dos principales candidatas a arrebatarle el puesto de alcaldable le hicieron un marcaje de cerca: la consellera, a escasos metros de él y la síndica, Ana Barceló, en un acto del partido en San Vicente del Raspeig, segundo "acercamiento" de la sajeña en menos de un mes.
El portavoz socialista, eso sí, se colocó junto a los ediles de Vox y el popular Toño Peral en la foto de familia, en el extremo opuesto al de sus compañeros de grupo. Los concejales del PSOE en Alicante ya no se esfuerzan por disimular la ruptura interna.
Compromís acude, Unidas Podemos no
La coalición valencianista, en plena crisis por la reciente imputación de la vicepresidenta Mónica Oltra, también tuvo representación autonómica en la mascletà.
La diputada en las Cortes Valencianas Aitana Mas se dejó ver en el interior de la plaza de los Luceros acompañada de los dos ediles de la formación en Alicante, Natxo Bellido y Rafa Mas.
Ambos estuvieron ausentes el día anterior, ya que acudieron a un acto del partido en València en apoyo a la consellera de Políticas Inclusivas, cuya presencia en la Fiesta alicantina está más que en el aire.
En un primer momento, la coalición anunció la presencia de Oltra en el disparo del día 22, arropada por compañeros de Gobierno, sin embargo, fuentes del partido aseguran que su visita pende de un hilo. Por el momento, el evento sigue en la agenda de la vicepresidenta.
Quienes siguen sin "debutar" en las Hogueras son los representantes de Unidas Podemos, tanto a nivel local como autonómico. Este sábado, el portavoz de la coalición en Alicante, Xavi López, excusó su ausencia por "motivos de agenda".
Sin embargo, tampoco acudieron este domingo ni él ni su compañera en el grupo municipal, Vanessa Romero, quien sí estuvo una hora antes de la mascletà en una concentración contra la tauromaquia celebrada en la plaza del Ayuntamiento.
Los morados tienen una difícil papeleta, ya que son la formación que más firmemente se ha posicionado contra las mascletás en Luceros. No obstante, continúan acreditados para todos los disparos oficiales junto a la frente de Bañuls, y previsiblemente acudirán acompañados de representantes autonómicos de la coalición. La incógnita es cuándo.
Mazón y Barcala pescan en río revuelto
Ante la "guerra fría" del PSOE, el perfil bajo en Compromís por la imputación de Oltra y la inexplicada ausencia de Unidas Podemos, Mazón y Barcala volvieron a sentirse como en su casa, con algunos matices. Los dirigentes populares incluso se arrancaron a bailar cuando el público les vitoreó por haber retirado unos furgones que tapaban la visibilidad de parte de los asistentes.
Eso sí, algo más agridulce fue esta vez el baño de masas del candidato a la Generalitat y el alcalde alicantino. Después de los vitores, llegaron los reproches. En el "paseíllo" que ambos dieron antes del comienzo de la mascletà muchos vecinos les mostraron su apoyo y otros, en cambio, aprovecharon para trasladarles sus quejas por aquellas cuestiones con las que no estaban de acuerdo.
Aunque la conversación no llegó a convertirse en un enfrentamiento, ahí terminó la vuelta al ruedo. Mazón y Barcala no se arriesgaron a una mala foto.
