Los centros de salud de la ciudad de Alicante permanecerán cerrados desde el miércoles hasta el lunes con motivo de las fiestas de Hogueras. La única excepción será el sábado, cuando los centros abran, como es habitual, para atender urgencias.
Desde hace años, la víspera del 24 siempre ha sido fiesta en Sanidad. Este año, al ser el 23 también festivo local, se ha trasladado esta libranza al miércoles. De esta manera, quienes precisen atención médica durante estos días de fiesta tendrán que acudir a las Urgencias de los hospitales o a los puntos de Urgencias extrahospitalarias. En la ciudad de Alicante, estos dispositivos están ubicados en el centro de salud Cabo de la Huerta, en la calle Aaiun junto al Hospital General de Alicante y en el conjunto sanitario de Babel-Florida.
Consejos de los podólogos
Por otro lado, el Colegio de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) ha destacado que las afecciones más frecuentes en los pies durante estas fiestas son quemaduras, torceduras y laceraciones, que se producen principalmente al saltar las hogueras o al andar descalzo por la arena con poca visibilidad.
La entidad ha lanzado algunas recomendaciones de cara a la noche de San Juan. “Aquellas personas que quieran saltar una hoguera, es importante que tengan en cuenta algunas recomendaciones". Por ejemplo, es aconsejable llevar una ropa ajustada y preferentemente de algodón, como los pantalones vaqueros, para que sigan mejor el movimiento del cuerpo al dar el salto. Por supuesto, "Se debe utilizar un calzado apropiado". Esto supone evitar sandalias y cualquier otro tipo de calzado que deje al descubierto el pie o que no lo sujete bien. El objetivo es evitar quemaduras por salpicaduras de brasas o torceduras del tobillo en el aterrizaje del salto”, ha explicado Jorge Escoto, podólogo y miembro de la Junta Directiva del ICOPCV.
Junto a esto, y para proteger la salud de los miembros inferiores, se recomienda tener en cuenta las posibilidades reales de cada uno a la hora de dar un salto (altura y perímetro de la hoguera, agilidad, etc.), asegurarse de tener espacio suficiente para saltar y, por supuesto, nunca hacerlo sujetando a otras personas (ya sean niños o adultos).
“Cuanto mayor peso soportemos al dar el salto, mayor será el impacto sobre nuestros tobillos al aterrizar y esto, a menudo, es la causa de un buen número de torceduras. También es clave que cuando la hoguera se apague le echemos agua para confirmar que no quedan ascuas encendidas. Muchas veces, lo único que hacemos es enterrar las brasas y al no verse fuego, alguien podría caminar justo por esa zona y quemarse las plantas de los pies”, ha asegurado Jorge Escoto.
