Este viernes 24 de junio es el Día de San Juan, una fecha señalada no solo en el calendario cristiano sino también en muchas culturas debido a su coincidencia con el solsticio de verano. La celebración de la Noche de San Juan, aunque con diferentes nombres, es tan antigua como la propia humanidad y desde los albores de los tiempos esta noche se ha marcado a fuego, nunca mejor dicho, en diferentes civilizaciones.
Sin embargo, cuando se acerca esta fecha señalada resurge el debate eterno sobre cuándo es la Noche de San Juan. Y es que, aunque en la mayoría de lugares de España se celebra la noche del 23 al 24 de junio, en Alicante y otros lugares de la Comunidad Valenciana la noche de San Juan tiene lugar del 24 al 25 de junio, cuando a las doce de la noche se queman las hogueras en la Cremà.
El origen de este debate llega, como muchos otros, en la interpretación. Pues si bien en algunos lugares se considera que la noche de un día son las primeras horas de ese día, como ocurre en Galicia o Cataluña, donde celebran la noche de San Juan del 23 al 24 de junio; en otras zonas la lectura es diferente y consideran que la noche de un día son las últimas horas de ese día tras ponerse el sol, como es el caso de la ciudad de Alicante, que quema sus Hogueras de San Juan la noche del 24 al 25 de junio.
Pero debates a parte, lo que está claro es que esta fiesta tiene su origen en las celebraciones paganas del solsticio de verano, aunque la religión cristiana haya querido adaptarlas a su fe. En este caso el cristianismo amoldó su calendario a esta celebración y en la Biblia la costumbre de quemar hogueras quedó ligada al nacimiento de San Juan Bautista, cuando Zacarías mandó encender una gran hoguera para anunciar el nacimiento de su hijo.
Sin embargo, retrocedamos un poco en el tiempo y vayamos a aquella época en la que esta celebración tenía poco de cristiana. La llegada del solsticio de verano, la noche más corta del año, se celebraba encendiendo hogueras con el objetivo de "dar más fuerza al sol", ya que a partir de esa fecha los días se acortarían y "el sol se haría más débil". Además el fuego, protagonista de esta fiesta, tenía una función purificadora y "quemaba todo lo malo" atrayendo la buena suerte.
Y aunque nos parezca que esta costumbre labriega de agradecer las cosechas y apoyar al Sol en su viaje solo se celebra en España, lo cierto es que esta celebración tiene lugar en muchas zonas de Europa.
Desde el llamado Midsummer o St. John's Eve (víspera de San Juan) en Inglaterra, hasta el Jaanipäev de Estonia. Pasando, claro, por las fogueiras de São João de Portugal, el Jonsok noruego, la celebración de Sankthans en Dinamarca, el Midsommar de Suecia o incluso el Juhannus de Finlandia.
Qué rituales se hacen en la Noche de San Juan para atraer la buena suerte
Saltar en la hoguera
Uno de los rituales más comunes de la Noche de San Juan es saltar la hoguera. El rito consiste en saltar entre siete y nueve veces las hogueras de San Juan mientras las llamas aún están encendidas con el objetivo de quemar lo malo y alejar así a los malos espíritus. Otros, menos arriesgados, prefieren escribir una lista con lo que quieres que salga de tu vida y quemarla en la hoguera. Precisamente, muchos estudiantes aprovechan para despedirse de los apuntes mientras los ven arder.
Bañarse desnudo en el mar
En muchos lugares de España, las hogueras se prenden en las playas y los más creyentes en la magia de este día aprovechan para sumergirse en el agua del mar completamente desnudos durante 12 veces para atraer la suerte. Un baño purificador que se puede completar saltando siete olas de espaldas.
Además, muchas mujeres realizan este ritual con el objetivo de quedarse embarazadas. Este rito de fertilidad tiene su origen en la mitología romana, en concreto en la diosa Venus, y está lleno de simbolismo: Venus es la concha y la concha se relaciona con el sexo femenino. La playa tiene forma de concha y el mar penetra en la playa con tal fuerza que se forma espuma, que sería el semen. Lo sumamos a la magia que se atribuye a la Noche de San Juan y con tanto simbolismo no es extraño que muchas mujeres practiquen para quedarse embarazadas.
Plantas aromáticas y medicinales
Otra costumbre propia de estas fechas es salir al campo en busca de hierbas aromáticas a medianoche, como tomillo, romero o lavanda, y colgarlas e un ramo en la ventana de casa para recibir así la bendición de San Juan, de la misma forma que se cuelga el muérdago cuando llegan los fríos del invierno.
