La ola de calor sahariano da a partir de hoy un respiro a la provincia de Alicante y las máximas no superarán los 34 grados, doce menos que ayer, en una situación que se prolongará hasta el fin de semana, ya que agosto llega con la tercera ola del verano. Con todo, en la franja costera de la provincia las noches van a ser bochornosas debido al alto grado de humedad. De hecho, el Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante ha constatado que en la franja litoral se están viviendo, por la humedad, situaciones tan “africanas” como el cuerpo humano está expuesto a sensaciones térmicas de 51 grados. Se dio, por ejemplo, a última hora de la tarde de ayer, cuando en Alicante el termómetro marcaba 37 grados y un 60% de humedad, lo que dispara la sensación térmica a esos 51 grados. “Vamos, más calor que en Córdoba”, subraya el climatólogo Jorge Olcina. "Y el Mediterráneo como el Caribe", apostilla el climatólogo. La madrugada ha vuelto a ser tremenda con 27 grados de mínima en Alicante pero una sensación térmica de 32 grados pues hubo momentos en los que la humedad relativa del aire alcanzó el 80%.

Según explican los analistas de Meteored, cuando la temperatura es elevada, la humedad es el elemento que aumenta la impresión de calor haciendo que la sensación térmica exceda al valor de la temperatura del aire; esto es debido a que una humedad alta dificulta o incluso inhibe el proceso de transpiración corporal.

Por el contrario, si la humedad es baja se facilita la evaporación del sudor corporal, por lo que nuestro cuerpo perderá calor más fácilmente y la sensación térmica será menor que la temperatura del aire. Una cosa es la temperatura que mide el termómetro o del aire y otra, a veces muy distinta, es la temperatura aparente que a nosotros nos parece que hace: la sensación de calor o de frío que sentimos los humanos.

Nuestro organismo, que se encuentra constantemente a unos 37ºC, tiene un mecanismo defensivo de regulación encargado de mantener un estado de comodidad idóneo para cada persona cuando las condiciones externas son adversas, con una temperatura ambiental demasiado alta o baja.

Esta autorregulación se realiza mediante el aumento o la disminución del diámetro de los vasos sanguíneos encargados de la circulación subcutánea. En el primer caso, cuando la temperatura exterior es alta, se consigue un mayor flujo de sangre que nos ayuda a perder calor mediante la transpiración. En el segundo, que se produce cuando la temperatura exterior es baja, se mantiene un menor flujo sanguíneo logrando retener más calor corporal.

Sin embargo, este mecanismo del cuerpo humano puede ser alterado por la aparición de elementos ambientales que dificultan su buen funcionamiento. Los principales son el viento, que ayuda a la pérdida de calor aumentando la sensación de frío, y la humedad, que perjudica la transpiración y aumenta la sensación de calor.

Toda esta incomodidad que sentimos los humanos como combinación de la temperatura ambiente con el viento y con la humedad, es lo que representamos con el concepto de sensación térmica. Pero claro, es muy distinto sentir más frío que más calor. A continuación separaremos ambos conceptos: nos referiremos a sensación térmica por efecto del viento, cuando sintamos más frío que el correspondiente al que marca el termómetro, y de sensación térmica por efecto de la humedad, cuando experimentemos una sensación equivalente a una temperatura mayor que la indicada por el termómetro.

El PSOE denuncia inacción de Barcala

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Por otro lado, el Partido Socialista de Alicante denuncia que "una vez más Barcala se ha olvidado de las personas más vulnerables al no activar el protocolo para atender a la población que vive en la calle y que durante estos días está soportando unas temperaturas extremas. Mientras el alcalde no hace nada, una ciudad como Murcia, habilita las instalaciones del Palacio de los Deportes para acoger a medio centenar de población sintecho. Qué partido gobierna en esta ciudad, efectivamente, el PSOE. Esta es la diferencia entre nosotros y el PP, que miramos por los más desvaforecidos”, subrayó este martes Miguel Millana, secretario local del PSOE de Alicante.

La responsable del área de servicios sociales del PSOE local, Lola Vílchez, incide en que el Ayuntamiento no ha activado el protocolo contra las altas temperaturas como sí han hecho localidades cercanas como Murcia. “Hay en la calle unas 300 personas, lo que pasa es que Barcala las esconde en la periferia para no estropearle la imagen de la ciudad”. Vílchez ha indicado que en Murcia se ha habilitado un pabellón de deportes para 50 personas con colchones, sillas, cámaras frigoríficas, comida, duchas. “Aquí, ni se ha abierto el gimnasio del CAI (Centro de Atención e Inserción) porque Barcala no se preocupa por las personas más vulnerables, todo lo contrario, aprueba una ordenanza que los persigue y sanciona cuando son ciudadanos que no tienen nada. Así funciona el PP, así funciona este alcalde”.