La playa del Postiguet ha sido testigo este sábado del IV Gran Desembarco en la ciudad, en el que 56 festeros en representación del bando moro han tomado el arenal alicantino en una batalla que ha conmemorado los ataques berberiscos sufridos por la ciudad en los siglos XV y XVI.

A la llegada del bando moro a la costa de la ciudad, los miembros de la representación islámica se han encontrado con 70 arabuceros cristianos, quienes han plantado batalla. Sin embargo, antes de la contienda, ha sido el turno de la Embajada, como es tradicional en las celebraciones de Moros y Cristianos.

El espectacular enfrentamiento ha contado con la participación total de cerca de 400 festeros, entre los miembros de los bandos moro y cristiano y los cerca de 200 figurantes que han animado la contienda.

El público que ha asistido a la representación no ha perdido detalle de una batalla que también ha contado con efectos especiales y tres narradores que han explicado a los asistentes el desarrollo de la escenificación.

El enfrentamiento, que conmemora las batallas vividas en la ciudad en los siglos XV y XVI, ha vuelto al Postiguet tras tres años de ausencia a causa de la pandemia de covid. En 2017, se recuperó la tradición del Gran Desembarco, que tuvo su origen en las fiestas de la ciudad del siglo XVI, cuando trabajadores de los gremios armadores y pescadores participaban en este desembarco.