El potencial y demanda mundial del español podría perder fuste si no se refuerza la digitalización del idioma, junto al resto de las lenguas cooficiales. El objetivo expuesto en Alicante por la comisionada de España en la Unión Europea para la nueva economía de la lengua, Cristina Gallach, se traduce en reforzar las tecnologías del lenguaje para no quedarnos atrás como país en un sector de la Inteligencia Artificial que es “fundamental”.

“En un país multilingüe como el nuestro, las lenguas se pueden beneficiar de las tecnologías de lenguaje y del desarrollo de los datos aplicados al sector industrial desde la lingüística”, subraya esta especialista de la comunicación, invitada al Foro Europa celebrado ese martes en Casa Mediterráneo y organizado conjuntamente con la Universidad Miguel Hernández de Elche, la EUIPO, la Cámara de Comercio, la Generalitat y el diario INFORMACIÓN, además de la participación directa de Manuel Palomar para que Gallach presente por primera vez en Alicante el plan estatal Perte.

Transformación

Gallach expone que el extremo más importante de dicho plan, que contribuye a que los fondos europeos se destinen a proyectos de calidad para potenciar el español, es “la T de transformación mediante recursos de impacto”.

Al hilo de la explosión tecnológica del lenguaje, los datos lingüísticos, explica, generan un ecosistema de pequeñas y medianas empresas, además de grandes plataformas que impulsan el tejido económico, y de lo que se trata es de ayudar al sector empresarial en una situación que reconoce que es “compleja”.

El español en el espacio digital está mucho menos representada que lo que implica su potencial

Cristina Gallach - Comisionada de España en la UE para la nueva economía de la lengua

Y es que pese a figurar entre las lenguas más habladas en todo el mundo “el español en el espacio digital está mucho menos representada que lo que implica su potencial” advierte Gallach. De ahí el objetivo gubernamental de corregir este hecho. “O corregimos esta discrepancia o nos iremos alejando, porque en el espacio digital se crece exponencialmente”, alerta la comisionada.

Esta apuesta por reforzar la lengua en el mundo tecnológico en un país multilingüe, puede y debe favorecer el desarrollo de los datos también aplicados al sector industrial “desde la lingüística”, valora.

Iniciativas

Convencida de que las nuevas iniciativas tanto industriales como económicas deben reforzar las lenguas, Gallach apunta que se van a coordinar acciones desde entidades públicas y también del sector privado, pero siempre desde la calidad y la rigurosidad que representa la Real Academia de la Lengua “para que el español de las máquinas sea correcto y el ecosistema de innovación tecnológica se beneficie” en su conjunto.

Un instante de la intervención de Gallach este martes en Alicante Héctor Fuentes

Como la situación actual el español en un mundo cada vez más tecnológico no es la deseable, se tata de potenciarlo desde la inteligencia artificial junto al resto de lenguas cooficiales.

“También el valor de la ciencia en español es mayor que lo que proyectamos”, añade, por eso destaca que es clave todo el ámbito del aprendizaje en español. El aprendizaje artificial, la ciencia, la industria, la cultura, las sitúa como actividades transformadoras pero “con la lengua como vector”, teniendo presente una mirada tanto multilingüe como abierta a Iberoamérica.

Los datos que a partir de modelos inteligentes prestan servicios públicos desde los traductores, los análisis científicos, o los asistentes de conversación son a su vez grandes oportunidades “que solo estamos empezando a desarrollar”. Afirma que las opciones son innumerables aunque parezca que las grandes plataformas lo copan todo. “Dejan muchos huecos, se puede profundizar en la especialización” aprecia, y todo ello sin que la medida sea la de competir. “No se trata de derrotar a nadie”, indica en referencia al dominio de inglés, “el espacio es infinito para todos y lo importante es hacer crecer al español con calidad, teniendo en cuenta los distintos acentos e incorporando las lenguas cooficiales” subraya.

Gallach concluye que la economía de la lengua supone una "gran oportunidad transformadora" que nos da la oportunidad "de colocar al español y las lenguas cooficiales en el estado en que deben estar, porque es una obligación y la lengua es de todos, vivimos de ella y es parte de nuestras vidas". Y que con el plan Perte se ayuda a organismos y empresas a llegar a los recursos para que "definan bien su idea y su proyecto".

El valenciano y las grandes plataformas en inglés

Preguntada entre los numerosos asistentes a este nuevo Foro Europa sobre el papel de la lenguas cooficiales como el valenciano, Gallach puntualiza que impulsar el español en el ámbito digital lleva aparejadas todas las lenguas cooficiales por supuesto el valenciano", porque se trata de "una acción pública muy importante. No veo más opción que la colaboración porque sin duda hay una conexión directa de las lenguas catalana, valencia y balear", concreta.

Las ayudas se enfocan en su conjunto porque el español es igual en toda España, abunda, y los datos lingüísticos útiles en un mundo avanzado "también tienen en cuenta los dialectos y fórmulas específicas. La lengua española es para toda España e Iberoamerica", insiste. "El plan Perte tiene una mirada multilingüe y se van a ir viendo todos los aspectos", asegura.

En esta línea apunta a las recomendaciones de los expertos "que dicen que la tecnología del lenguaje ha evolucionado y que para alimentar las máquinas en inteligencia artificial no es necesario separar todas las lenguas".

A nivel también cultural apunta que la nueva economía del dato va más allá de la industria, y debe reflejar la presencia del español fuera dentro de España "porque la industria de la enseñanza del español en el extranjero" es muy potente y " muy emergente" basada en las nuevas tecnologías.

Gallach apuesta por "compartir" y "enriquecer" el español sin entrar en batallas frente al inglés. "Nuestra tarea es que el español no está a la altura que debería porque las grandes plataformas han surgido a partir de inglés, y debemos estar ahí", asevera.