La Conselleria de Transición Ecológica presentó este miércoles en Alicante el proyecto “Vertido 0”, una solución integral que contempla una inversión de 150 millones de euros para reutilizar el 100% de las aguas residuales de Alicante. Un porcentaje que hará del territorio el primero con mayor fuente de agua reutilizada a escala estatal. La Conselleria aportará 45 millones a cargo de los fondos de la empresa autonómica gestora de las aguas residuales (Epsar) y la Dirección General del Agua y los otros 105 millones de euros restantes los aportará el Ministerio para la Transición Ecológica.

El plazo de ejecución es de cuatro años, entre 2023 y 2026, tiempo estimado por los técnicos para remodelar las tres grandes depuradoras el municipio y construir la canalizaciones para llevar el agua residual depurada (30 hm3 al año) a las comunidades de reganes de l`Alacantí y el Medio Vinalopó, un proyecto del que se viene hablando durante los últimos 20 años, y que vuelve a lanzarse hoy a ocho meses de las elecciones.

La consellera Mireia Mollà explica que “los regantes de l’Alacantí y el Vinalopó dispondrán de 30 hm3 de agua de alta calidad, a precio mínimo, a través de una propuesta que aúna reutilización y economía circular en una zona de alta tensión hídrica”.

La secretaria autonómica, Paula Tuzón, el director general de Agua, Manuel Aldeguer, y el gerente de la Entidad Pública de Saneamiento (EPSAR), Juan Ángel Conca, han explicado los detalles de la propuesta conjunta de la Conselleria y el Ministerio de Transición Ecológica que evita los vertidos y mejora el sistema de las depuradoras de Monte Orgegia, Rincón de León y Alacantí Nord. De esta forma se evitará, según la Conselleria, verter agua residual depurada en la bahía de Alicante.

Las obras instalarán tratamiento terciario (el más avanzado de depuración) en las plantas de Rincón de León y Monte Orgegia y ejecutarán una nueva red de colectores en la de Alacantí Nord para incrementar el porcentaje de reutilización del 72 al 100%. Asimismo, el proyecto incluye la implantación de 30 MW de energía fotovoltaica para reducir el coste y las emisiones.

Mireia Mollá, consellera de Agricultura Información

Mollà ha subrayado el beneficio ambiental de la iniciativa que, “hará de Alicante el territorio con mayor fuente de agua reutilizada a nivel estatal y deja a cero los vertidos y los alivios procedentes de las depuradoras”. La consellera ha concretado los plazos de ejecución de las obras que según las previsiones podrán comenzar en 2024, tras la licitación y adjudicación en 2023.

“Tenemos el proyecto, el presupuesto, los terrenos y la capacidad de ejecutarlos”, ha indicado Mollà. En este sentido la dotación está ya consignada y el calendario marcado refleja un periodo constructivo de tres años (2024-2026), un plazo a razonable para una obra que, entre otras medidas, prevé la construcción de 36 km de tuberías y 4,5 hm3 de embalses.

La conselleria de Transición Ecológica ha instado al Ayuntamiento de Alicante a ejecutar las obras de alcantarillado, desbordamientos para que el agua llegue en condiciones óptimas a las depuradoras y prevenir impactos sociales.

Al respecto, Mollà ha concretado que el consistorio debe hacer, sobre su sistema, las obras necesarias para mejorar el sistema y aprovechar al máximo los beneficios que introduce la inversión de la Generalitat y el Gobierno de España

La Generalitat mantiene parado desde 2007, año en el que finalizaron las obras de la tubería, un proyecto en el que ya se gastó 8 millones de euros para llevar agua depurada de la planta alicantina de Rincón de León hasta el Campo de Elche, que se repartiría después por las canalizaciones de la comunidad de Riegos de Levante. El caso es que la tubería se construyó pero al final no ha servido para llevar ni una sola gota de agua, debido a que no se amplió la capacidad de desalación (sistema terciario) de la macroplanta de Agua Amarga con una unidad que desalara el caudal (sistema terciario), actuación básica para que el agua pueda reutilizarse en el riego agrícola como sucede con caudal de la planta en municipios del Medio Vinalopó.

La depuradora de Rincón de León recoge las aguas de gran parte de la ciudad de Alicante y l´Alacantí. La ampliación consistió en la instalación de un nuevo bastidor para albergar las membranas que tratan un caudal de 33.740 m3 diarios de agua residual -12 hm3 al año-.

Las competencias sobre depuración y reutilización de las aguas residuales se reparten entre el Consell, que debe construir las infraestructuras y el Ministerio de Transición Ecológica, que se encarga de conceder las concesiones y, por lo tanto, de concienciar a colectivos como los agricultores de la necesidad de aprovechar este recurso, limitado por el hecho de que las grandes masas de agua residual se localizan en la costa y las explotaciones agrarias están en el interior, lo que genera gastos para elevar las aguas.

La provincia fue pionera en la reutilización de sus aguas residuales cuando a finales de los años 70. José Ramón García Antón y Francisco Santiago, ingenieros del Ayuntamiento de Benidorm, convencieron a la Comunidad de Regantes del Canal Bajo del Algar para que cediera parte de las aguas del sistema Algar-Guadalest para el consumo urbano de Benidorm, Villajoyosa y Alfaz del Pí. A cambio, los agricultores reciben caudales depurados de la planta benidormí que riegan 2.400 hectáreas de cítricos y nísperos de gran valor.