Casi dos años se han pasado los agricultores de la provincia escuchando las promesas del Ministerio para la Transición Ecológica sobre la posibles soluciones al recorte previsto en el trasvase Tajo-Segura con la ampliación de la desaladora de Torrevieja y, de repente, el bofetón. La empresa pública Acuamed no contempla invertir un solo euro en 2023 de los 61,2 millones de euros consignados para esta actuación, según consta en el proyecto de presupuestos presentado en el Congreso. Los 61,8 millones se repartirán, en teoría, en 2024 (20 millones), 2025 (20 millones) y 2026 (21,2).  

En 2023, Acuamed manejará solo 680.000 euros. Una partida en la que lo más importante son los 500.000 euros para un depósito regulación para el agua desalada en la planta de Mutxamel, la que se ha impuesto a los ayuntamientos de l’Alacantí descolgados del trasvase de agua del Júcar. La Mancomunidad de Canales del Taibilla manejará 9 millones de euros para mejoras en las desaladoras de Alicante (Agua Amarga) y la depuradora de La Pedrera. 

En materia agrícola destacar, por otro lado, la partida de un millón de euros que recibirá la comunidad Riegos de Levante Margen Izquierda del Segura para un proyecto para mejorar la gestión del agua presupuestado en 37,6 millones de euros pero que también se dilata en el tiempo: 5,4 millones en 2024, 22,9 millones en 2025 y 8,1 millones de euros en 2026.

Acuamed también tiene en previsión, por otra parte, 1,8 millones de euros para la mejora de la eficiencia energética del trasvase Júcar-Vinalopó (energía fotovoltaica). Un actuación valorada en 97 millones de euros de los que el grueso se invertirán en 2025 (25 millones) y 2026 (65,8 millones).

La Confederación Hidrográfica del Júcar ha llegado a un acuerdo para que se dejen de extraer en los próximos diez años 86 hm de los 95 hm actuales de agua subterránea para regadío de los seis acuíferos del Alto y Medio Vinalopó desde el que se abastecen regantes y municipios, que serán los únicos que seguirán teniendo acceso, de momento, a los 41,3 hm a los que tienen derecho. Agua, la de los agricultores, que tendrá que ser sustituida por la del trasvase. La propuesta es reducir un 90% el derecho y la concesiones de los regantes, que pasaran a disponer solo de 9,2 hm al año por los 95,2 hm actuales.

Acuamed invertirá, por otro lado, 80.000 euros para iniciar la tramitación de la conducción de agua residual depurada de la planta de Orgegia desde el pantanet a la Huerta de Alicante. Proyecto este que también se eterniza. Valorado en 9 millones de euros, 8,8 millones de euros se dejan para 2026.

Por otro lado, el ambicioso proyecto anunciado por la Dirección General de Costas para regenerar las playas de la provincia de Alicante, muchas en claro proceso de regresión por el efecto de los temporales y el descontrol urbanístico de los años del «boom» urbanístico, apenas tendrá fondos en 2023. Costas tiene presupuestados 6,3 millones de euros a invertir hasta 2026, pero para el año que viene solo aparecen consignados 430.000 euros, según el documento de los presupuestos.