Un barrio nuevo, en crecimiento y prometedor, al que se han incorporado cerca de 5.000 nuevos vecinos en los últimos dos años para un total de entre 8.000 y 10.000, según la asociación vecinal recién constituida, pero un barrio sin dotaciones. La realidad del PAU 5 es la de un barrio moderno y con la playa al alcance, pero que aún no se ha consolidado al no tener centro de salud, colegios o transporte público.

José Díaz, presidente de la Asociación de Vecinos PAU 5-Playa de San Juan, señala que la principal demanda que tiene el barrio es la de contar con más servicios y dotaciones: "El barrio es completamente nuevo. En dos años han venido unas 5.000 personas en diez o doce promociones bastantes grandes a la vez. Es un barrio muy bonito, pero que no tiene servicios".

Un grupo de personas hace cola en el centro de salud del Cabo de las Huertas. HÉCTOR FUENTES

El tráfico y los problemas para encontrar de aparcamiento concentran la mayor preocupación de vecinos y comerciantes: "El autobús no pasa, no da servicio, no hay dotación. El otro día estuvimos con el concejal de Urbanismo y están proyectados dos colegios y un instituto, pero aún no hay nada. Es un barrio joven y con muchos niños pequeños, tenerlos evitaría además colapsos de tráfico. Los más mayores tampoco tienen transporte. En verano, además, hay un problema de aparcamiento que se agravó este año con el Circo del Sol".

Armando Ortuño, profesor de Urbanismo y Planificación del Transporte de la Universidad de Alicante (UA), señala que cuando se constituye un nuevo barrio es necesario actuar antes de que lleguen los vecinos: "La oferta de transporte público tiene que ser completa desde el momento en el que empiezan a aparecer residentes. Si llegan a un barrio en el que no hay transporte público van a utilizar el vehículo privado y darle la vuelta a esa situación es complicado".

Los locales disponibles ya son la excepción. Antonio Garrigós es el presidente de la Asociación de Comerciantes del PAU 5 de Alicante: "Más locales no puede haber porque no quedan. Todos los locales comerciales están ya vendidos o alquilados y en marcha. Están aguantando pese a los problemas con el precio de la luz y el gas".

Un grupo de vecinos pasea junto a las terrazas de los comercios del PAU 5. PILAR CORTÉS

Para muchos de estos comercios, los precios de la electricidad se han disparado prácticamente un 500%: "Es genérico a todo el comercio, no solo el PAU 5. Se está consolidando como sitio de hostelería. Lo que sí tenemos son problemas propios como la falta de aparcamiento", destaca Garrigós. "Sin duda el principal problema es del aparcamiento de vehículos privados, sobre todo en verano. Es casi imposible aparcar allí. Es una circunstancia que hemos puesto de manifiesto al Ayuntamiento, parece ser que van a habilitar algunas calles con aparcamiento de batería".

Los comerciantes consideran el transporte público una solución a medio o largo plazo: "Ahora pasa el la línea 21 del autobús, que va a El Campello, pero creo que hacen falta más frecuencias. El tranvía no se puede poner de un día para otro. Está pensada una nueva línea que va hacia el Hospital de San Juan y que será bienvenida, pero a largo plazo", considera Garrigós.

Conflictos menores

Vecinos y comerciantes ya han tenido algunos conflictos respecto al espacio común: "Hay algunas pequeñas quejas, lo que pasa con la clientela, pero en líneas generales la convivencia es buena", destaca Díaz. Un punto de vista que comparte Garrigós: "Lo de los vecinos es algo muy excepcional. Por regla general los vecinos están muy a gusto con los locales. La mayoría de la hostelería son restaurantes, no discotecas, y los problemas han sido muy puntuales".

Desde la asociación vecinal destacan que los problemas se han enfocado en el uso de las aceras: "Hay algún problema con la movilidad peatonal porque entre terrazas, carril bici y árboles queda medio metro para andar y mucho niño pequeño con carro. El carril bici se usa bastante y estamos pensando cuál sería la mejor alternativa, tal vez que circulase por la calzada. Hace dos años había solo dos o tres comercios pero ahora la mayoría de locales tienen terraza al ser una acera ancha".

De los dos o tres comercios se ha pasado a cerca de 80 asociados: "Se están incorporando ahora los comerciantes a la asociación. Sobre todo hay hostelería pero hay de todo. Es gente emprendedora, joven, con ganas de trabajar y hacer las cosas bonitas, los locales tienen mucho gusto", concluye Garrigós.

Contacto con el Ayuntamiento

Vecinos y comerciantes se han asociado para poder trasladar sus quejas y sugerencias al Ayuntamiento: "Hemos tenido el primer contacto con el grupo de gobierno. La reunión fue muy buena para hacer peticiones. En las próximas semanas tenemos pensado hablar con más áreas para trasladar estas inquietudes. Algunas pueden tener solución a medio plazo y otras que corren más prisa, como el transporte", destaca Díaz.

"Lo ideal es que haya más dotaciones, pero no hay que olvidar que es una zona que se está consolidando y hay promociones en construcción. La gente está contenta. Si hay más dotaciones de escuelas estaría genial, es lo que hay que buscar. Los comerciantes estamos con los vecinos", apunta Garrigós.