Mitad de noviembre. Es la fecha a la que apuntan los expertos en Salud Pública sobre la llegada de una nueva ola de covid-19 en función del aumento de los casos que se experimenta en las últimas semanas en la provincia de Alicante y en general en la Comunidad Valenciana. La gravedad de esta onda epidémica dependerá de lo agresivo de la variante que circule en esos momentos, sin olvidar que es el primer invierno sin mascarillas (salvo en el transporte público, los centros hospitalarios o las farmacias) ni vigilancia activa de casos, y que la gripe ha vuelto.
Los hospitalizados por covid han aumentado un 30% en la provincia en una semana, de acuerdo al último recuento de la Conselleria de Sanidad, aunque sin presión sobre las UCI, lo que significa una menor gravedad. La incidencia acumulada (casos positivos a 14 días por cada 100.000 habitantes) ha pasado de 171 a 206 en el territorio autonómico aunque también es cierto que en otras regiones están ya por encima del doble. En los centros hospitalarios consultados corroboran la subida y auguran que los ingresos irán creciendo hasta Navidad.
Las Sociedades de Medicina Preventiva recomiendan aprovechar las semanas que quedan de buen tiempo, que invita a más interacciones de las personas al aire libre que en interiores, para vacunar contra el covid-19 y contra la gripe al mayor volumen posible de población vulnerable. Con unas temperaturas varios grados por encima de lo normal en esta época, el calor ayuda a retrasar una mayor expansión de estas infecciones entre personas, algo que cambiará cuando baje el termómetro.
La infección causada por el virus influenza A y B, pues este año circulan ambos, regresa tras dos años en que ha sido residual, no porque no existiera, sino por la barrera a los contagios que supusieron las medidas de protección que tomaba la ciudadanía mediante el uso de mascarilla y el distanciamiento social a causa del SARS-CoV-2.
Como apunta Rafael Ortí, presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, "ya llevamos 10 ó 15 días con un aumento progresivo de casos y en Alemania y Francia los indicadores revelan un avance. Es previsible que (el covid) se dispare en las próximas semanas". Sin embargo, no se atreve a aventurar hasta qué nivel pues dependerá de las variantes y subvariantes, sin olvidar que gran parte de la población está inmunizada y muchas personas que presentaban patologías más graves fallecieron en las primeras olas.
"Ya llevamos 10 ó 15 días con un aumento progresivo de casos y en Alemania y Francia los indicadores apuntan un avance. Es previsible que (el covid) se dispare en las próximas semanas"
"A mediados de noviembre podríamos estar viendo el pico si nos atenemos a lo sucedido en las anteriores oleadas pero es difícil pronosticar el nuevo escenario de gripe y covid, sin mascarillas y sin darle tanta importancia a los casos detectados". Aún así, el experto llama a la calma pues entiende que no parece que vaya a ser tan grave como años anteriores.
Este será el primer año en que podrían expandirse a la vez dos ondas epidémicas, una de covid y otra de gripe, "que parece fuerte", apunta Juan Francisco Navarro, presidente de la Sociedad Valenciana de Medicina Preventiva y Salud Pública, y especialista del Hospital de Elche.
"La tendencia es clara, estamos al inicio de otra onda epidémica (de covid) totalmente esperable y también de gripe, que se ha adelantado. De hecho, en el hospital hemos visto casos durante todo el verano en los hospitales. Hace presagiar una acción combinada que puede comprometer el sistema asistencial". Pese al incremento de la incidencia no cree probable que se dispare a niveles alarmantes (por encima de mil casos por cada 100.000 habitantes), aunque lo supedita a las medidas comunitarias de prevención y a la conciencia y motivación de una ciudadanía cansada de tanta vacuna.
"La tendencia es clara, estamos al inicio de otra onda epidémica (de covid) totalmente esperable y también de gripe, que se ha adelantado. Hace presagiar una acción combinada que puede comprometer el sistema asistencial"
"La vacunación es la medida preventiva más importante, sobre todo en el colectivo de mayores de 60 años y los crónicos, aunque creemos que al final tendrá que inmunizarse todo el mundo (con dosis de refuerzo) contra ómicron", señala.
En este sentido, el experto incide en que ya no hay centros de vacunación masiva, que inmunizaban a miles de personas cada día, por lo que tendrán que pinchar los centros de salud, lo que considera que se llevará todo noviembre. No descarta por ello que haya que reabrir vacunódromos. Navarro coincide con Ortí en que "estamos en el camino de una onda epidémica que esperamos que llegue el mes próximo", predicciones que pueden cambiar en función de la climatología y de los millones de interacciones en eventos multitudinarios.
Epidemiólogo
Por su parte, José Tuells, profesor de la Universidad de Alicante, director de la Cátedra Balmis de Vacunología y epidemiólogo, señala que ahora mismo la gripe está al alza y el covid no tanto, y que se desconoce cuál va a prevalecer ni cómo se comportarán ambos virus. De todos modos, abunda en que "hay que estar preparados. Dependerá del clima, de cuándo va a empezar el frío. Son virus respiratorios que se extienden con el frío de persona a persona pero con tiempo primaveral es difícil hacer pronósticos".
"Hay que estar preparados. Dependerá del clima, de cuándo va a empezar el frío. Son virus respiratorios que se extienden con el frío de persona a persona"
El epidemiólogo considera que hay que vacunar a los más vulnerables, tanto de gripe como de la cuarta dosis del covid pero no cree que haya que extender la inmunización a los jóvenes hasta que no se vea qué está pasando.
Sobre la gripe recordó que los picos suelen ser en la segunda quincena de enero y la primera de febrero, y que los datos de Australia revelan que ha subido pero tampoco de forma espectacular.
