"¡Qué calor!", "Me he despertado sudando", "No podía coger el sueño", "Destapado toda la noche",... Si es usted una de esas personas a las que le ha costado dormir esta última semana por el calor, sepa que estamos pasando por una situación anómala. Y es que la costa de Alicante ha vivido -o sería mejor decir ha sufrido- temperaturas mínimas por encima de los 20 grados toda la semana.

El calor que está haciendo por las noches "no es normal", asegura el catedrático de Análisis Geográfico Regional y director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante, Jorge Olcina.

Pero esta situación no hace más que corroborar una tendencia que se viene registrando desde el año 2010 de un incremento notable de noches tropicales al año. En 2022, además, la ciudad de Alicante va a pulverizar un caluroso récord: el de noches tropicales. Olcina asegura que acabaremos el año con, van a leer bien, más de 110 noches tropicales. "Se trata de un dato muy llamativo porque manifiesta la prolongación del calor estival hacia la primavera y el otoño", explica el catedrático.

Una clave que explica este fenómeno, además de la llegada de aire del norte de África, aire sahariano, es el calor acumulado en el agua del mar Mediterráneo, que a estas alturas del año sigue estando por encima de 24ºC. "Esta temperatura es también bastante anómala, pero es una tendencia que también se está registrando en la última década en la temperatura del agua del mar frente a las costas de Alicante", añade Olcina.

Y es que el tránsito del verano al otoño cada vez se diluye más y el calor se hace más prolongado, también por las noches, como estamos viendo. 

En los últimos años estamos registrando noches tropicales, de modo aislado, en octubre e incluso en noviembre. Pero es verdad que esta última semana está siendo "bastante excepcional" por la permanencia durante varios días de temperaturas mínimas superiores a 20ºC en gran parte de la costa de Alicante.

La única "buena noticia" sería que en el interior, afortunadamente, descienden las temperaturas mínimas por debajo de 20 grados, "lo que mejora el confort térmico nocturno". 

Y en lo que muchos estamos pensando ¿seguirá muchos días este calor o empezaremos a notar pronto un cambio? Para los que estén deseando que llegue el fresquito y ponerse el pijama de invierno, el director del Laboratorio de Climatología de la UA aconseja no hacerse ilusiones: "No se ven cambios bruscos en el tiempo en lo que queda del mes de octubre. Al contrario, vamos a seguir con una tendencia de jornadas anticiclónicas y tiempo muy agradable". 

De hecho, los modelos estacionales nos están hablando de un otoño con temperaturas por encima de lo normal, como estamos realmente registrando y de un invierno que no va ser muy frío, al menos en su tramo inicial.

Así que las calurosas noches se empeñan en no abandonarnos.