Mucho se ha hablado esta semana de las energías renovables tras la destitución de Mireia Mollà como consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, ya que se ha señalado como uno de los motivos sus críticas a sus compañeros del Botànic por no acelerar la implantación de fotovoltaicas. Y es que el aprovechamiento energético es una realidad que va a ir a más, y así se ve en las cifras oficiales en Alicante. 

Según últimos datos de la Concejalía de Hacienda, un total de 144 viviendas de la ciudad de Alicante han sido bonificadas por la instalación de placas solares, una cifra que multiplica por nueve los beneficiarios de justo un año antes, cuando fueron 16 viviendas. En 2020, apenas ocho familias se favorecieron por una reducción impositiva por instalar sistemas de aprovechamiento energético. Es decir, en apenas dos años, las bonificaciones han pasado de beneficiar a 8 hogares a extenderse a 144 en el total de Alicante. 

Según la ordenanza que regula el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), en virtud a lo establecido en el artículo 74.5 del texto refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, se establece una bonificación de hasta el 50% de la cuota íntegra del impuesto para los bienes inmuebles cuyo uso catastral sea predominantemente residencial-vivienda, en los cuales se haya instalado sistemas para el aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía proveniente del sol, para autoconsumo.

El periodo de bonificación para los beneficios se extiende durante los tres periodos impositivos siguientes al de la fecha de la instalación. Los efectos se aplican en el ejercicio siguiente a aquel en el que se haya solicitado siempre que se acredite ante el Ayuntamiento el cumplimiento de los requisitos exigidos para su otorgamiento, según la ordenanza.

El importe máximo de la bonificación será de 300 euros por inmueble y año, sin que en ningún caso la cantidad total bonificada pueda superar el 20% del coste total de la instalación. En el caso de superar ese porcentaje, la cuantía resultante será prorrateada durante el periodo de tres años, con el límite máximo de 300 euros/año, y del 50% de la cuota íntegra. No se bonifica, en cambio, cuando la instalación de los sistemas para el aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía proveniente del sol sea obligatoria según la normativa. La bonificación, en cambio, sí es compatible con las relativas a familias numerosas y con las viviendas de protección oficial. 

Los periodos impositivos empezarán a contar desde el ejercicio siguiente a la finalización de las obras e instalaciones necesarias para incorporar los mencionados sistemas de aprovechamiento. "Este beneficio fiscal es de carácter rogado por lo que tendrá que solicitarse en cualquier momento posterior a la fecha de la instalación y siempre durante el periodo comprendido desde la instalación y los dos años siguientes al de la misma, no teniendo dicha bonificación carácter retroactivo", añade el texto normativo, que sufrió su última actualización en septiembre de 2020, donde entre otros cambios se incluyó la revisión de la bonificación por la instalación de sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía solar, adaptando su contenido a los cambios tecnológicos que este campo ha experimentado en estos últimos años, adaptándola a las circunstancias actuales. Esa última modificación de la ordenanza salió adelante con los votos a favor de los socios del bipartito (PP y Ciudadanos) y Vox, frente al rechazo del PSOE, Unidas Podemos y Compromís.

Con la vista en Elche

Sin embargo, que los beneficiarios se hayan multiplicado por nueve en solo un año en Alicante, entre 2021 y 2022, quedándose en 144 los hogares que han visto reducido el IBI por instalar placas solares, se queda lejos de las cifras que se manejan a apenas unos kilómetros de distancia, en Elche. 

En la localidad ilicitana, el Ayuntamiento constató en el último año el interés de los particulares por el autoconsumo doméstico con 150 peticiones para ver bonificado el IBI por el aprovechamiento de las energías renovables. De las 150 peticiones que llegaron al Ayuntamiento de Elche en 2021, un 55% (77 solicitudes) se aceptaron. El resto no cumplía con los requisitos, entre los que están disponer como mínimo de cuatro kilovatios de potencia para optar a la bonificación del IBI, que significa contar con un kilovatio por 50 metros cuadrados de superficie construida.