El bipartito de Alicante sigue firme en un reto que parece imposible en la ciudad de Alicante vistos los precedentes de los recientes gobiernos plurales: aprobar el próximo Presupuesto municipal antes de finalizar este año.

"El objetivo para la aprobación inicial sigue siendo el 31 de diciembre, para que un mes después entre en vigor", señaló el portavoz del gobierno municipal, Antonio Manresa, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno de este miércoles. El edil añadió que el ejecutivo de PP y Ciudadanos, en minoría en el Pleno, mantendrá "reuniones oportunas" con la oposición, "otra cosa es que se llegue o no a acuerdos".

El compromiso público del bipartito llega en la semana en la que la Generalitat ha aprobado en Pleno el Presupuesto de 2023, que ahora inicia la tramitación parlamentaria, al igual que sucedió a principios de octubre con el Presupuesto General del Estado para el próximo año.

De cumplirse los tiempos comprometidos por el gobierno local sería algo no visto en el Ayuntamiento de Alicante desde que está dirigido por gobiernos de coalición. Desde el año 2015, cuando aún gobernaba Sonia Castedo, el Ayuntamiento de Alicante no aprueba en tiempo y forma el presupuesto municipal. Este 2022 tampoco ha sido el año para volver a la senda correcta.

Aprobar el Presupuesto de 2023 en tiempo y forma sería un doble logro, porque se cumplirían los plazos, pero además se conseguiría en un curso electoral, en el que suele ser más complejo conseguir apoyos para aquellos ejecutivos, como el bipartito, que gobiernan en minoría.

El Pleno de la ciudad sacó adelante las cuentas municipales para este ejercicio a finales de marzo, con los votos a favor de los socios del gobierno municipal (PP y Ciudadanos), la abstención clave de Vox y el rechazo de los grupos progresistas (PSOE, Unidas Podemos y Compromís). De los últimos siete años, se trata del tercer presupuesto que más pronto se aprueba, aunque fuera de la fecha correcta.

La tramitación se completó, contando la aprobación definitiva, el 28 de abril en 2016 y el 12 de mayo en 2017 (ambos años con el tripartito), el 29 de marzo en 2018 (con el PSOE en solitario), el 16 de abril en 2019 (con el PP en solitario), el 23 de mayo en 2020 (año del estallido del covid), el 25 de marzo en 2021 y el 30 de marzo este 2022.

Las cuentas de 2015 se validaron definitivamente antes de finalizar 2014, por lo que entraron en vigor en tiempo y forma. Alicante también ha ido este año por detrás de València y Elche. En la capital del Turia se aprobaron las cuentas antes de terminar 2021, por lo que empezaron este 2022 con el presupuesto ya en marcha, mientras que en la ciudad de las palmeras el trámite finalizó el 31 de enero, hace justo dos meses. En la vecina localidad trabajan en cuadrar las cuentas, con los contratiempos que están generando las subidas de la energía. Con todo, el compromiso es llegar a la aprobación antes de terminar este año.

El gobierno municipal, pese al retraso, consiguió sacar adelante este 2022 las mayores cuentas de la historia de la ciudad, las más expansivas, superando los 313 millones de euros, lo que significaba un aumento del 14,4% respecto a las del pasado 2021.

El millonario aumento en las cuentas para este año se basaba, fundamentalmente, en un crédito "blando" de 20 millones para asegurarse la ejecución de inversiones en la ciudad y en los fondos (transferencias) de la Generalitat para la ejecución del Plan Edificant (construcción de dos nuevos colegios y mejoras en otros tres centros) y para garantizar la estabilidad de la plantilla de Acción Social a través del Contrato Programa. El documento aprobado en el Pleno incluía aumentos en la práctica totalidad de las áreas, con datos significativos en Servicios Sociales (12% más, hasta los 13,1 millones), además de en Infraestructuras (29% más, hasta 41 millones), Limpieza (14% más, hasta 54 millones) y Transportes (12% más, hasta 31,7 millones), por las nuevas contratas de limpieza de colegios, limpieza viaria (a la que se destinará 45 millones) y transporte urbano (más de 20 millones al año).

También se incrementaban las partidas en Educación, por el Plan Edificant, de 2,4 a 9,2 millones. Por otro lado, crecían de igual forma las partidas para el fomento del empleo, sobre todo entre los jóvenes, con proyectos que alcanzan los 2,4 millones. Para Turismo también había más presupuesto, hasta los 4,9 millones de euros (un 8% más que el pasado año), que se preveía destinar, según el gobierno, a más apoyo a los sectores y a la promoción turística, además de para la externalización de la gestión del Castillo de Santa Bárbara.

Para sacar adelante el Presupuesto, el ejecutivo de Barcala se plegó ante las reclamaciones de la formación ultra. Los dos socios del gobierno local aprobaron 19 de las 21 enmiendas presentadas por Vox, rechazando solo la propuesta de supresión de las subvenciones a los grupos municipales políticos (45.000 euros, que se reparten proporcionalmente al número de concejales, con casi 14.000 euros para el PP y 7.800 euros para Ciudadanos) y a una petición menor: la creación de la partida “tratamiento antideslizante aceras” con un simbólico euro. Esas fueron las únicas propuestas de Vox que contaron con el "no" del gobierno.

En cambio, el bipartito aceptó el resto de propuestas de Vox, donde se incluyen las exigencias "ideológicas", como recortes o supresión de partidas de áreas sociales como Inmigración, Cooperación o Igualdad (LGTBI), todas en manos de Ciudadanos, además de reducir el presupuesto de "actividades de promoción cultural y celebración del 9 d'Octubre" en favor de la "Celebración del 4 de diciembre como Día de la Reconquista de Alicante", entre otras exigencias.

Propuesta plenaria de Unidas Podemos

La coalición de Unidas Podemos ha anunciado este miércoles su intención de llevar al próximo pleno una propuesta para "agilizar la elaboración del presupuesto municipal de 2023, contando con entidades sociales, Juntas de Distrito y participación ciudadana, y favoreciendo la ejecución de las políticas sociales que hacen falta en la ciudad".

El grupo planteará una moción para la creación de una comisión específica que aborde la cuestión presupuestaria. "Parece que nos encontramos ante un nuevo incumplimiento de los plazos y que el gobierno de Barcala es incapaz de planificar con tiempo suficiente como para que se puedan implantar las medidas necesarias desde el gobierno municipal, como sí está haciendo el gobierno del Botànic que una vez más aprobará sus cuentas en tiempo y con la mirada fuertemente puesta en las reivindicaciones de Alicante", ha señalado el portavoz municipal, Xavier López, quien considera que “la participación ciudadana es imprescindible para una mayor transparencia y colaboración en la redistribución de los recursos públicos".