Maleza, latas de cerveza y dificultad para acceder. La situación del Castillo de San Fernando dista mucho de ser la de un lugar idílico para el turismo. Para llegar a lo alto de la fortaleza hay que subir una empinada rampa, que da lugar a una fortaleza conquistada por los matorrales ante el abandono del Ayuntamiento de Alicante.

Con un solo vistazo basta para comprobar cómo la zona, de la que una restauración arquitectónica sacó a la luz el sistema de defensa en la Guerra de Independencia, se encuentra sin ningún mantenimiento a pesar de ser un Bien de Interés Cultural (BIC) y de ser parte de la Concejalía de Turismo.

Esta misma semana, la Sindicatura de Comptes dio un tirón de orejas al Ayuntamiento de Alicante por la manera de gestionar los presupuestos. Entre otras recomendaciones, proponían elaborar un "plan de inversiones realista, de acuerdo con la capacidad de ejecución del Ayuntamiento". Además, según añadían, "es necesario estimar el coste y la financiación del mantenimiento de las inversiones".

Inversiones sin mantenimiento

Según el órgano fiscalizador autonómico, "Intervención no debe participar en la gestión económica de la entidad, para que así exista una adecuada segregación de funciones" y resultaría "conveniente que en las actas del Pleno de la entidad se haga referencia a los informes de la Intervención sobre el cumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria". Es decir, el Consell exige al Ayuntamiento que las inversiones vayan acompañadas de partidas para su posterior conservación, limpieza y actuaciones.

Las escaleras que dan acceso al baluarte, llenas de matorrales. PILAR CORTÉS

Una situación que también reivindica el PSOE alicantino. Trini Amorós señala que la situación del Castillo de San Fernando "es un ejemplo de lo que denuncia la Sindicatura de Comptes" ya que "no puedes hacer una inversión sin tener en cuenta su mantenimiento". La responsable de Patrimonio de los socialistas señala que ella apoya que se invierta más en el patrimonio artístico de la ciudad de Alicante, pero que al ser "inversiones millonarias" no se puede "dejar que a los dos meses parezca que no se ha hecho nada".

BIC sin cuidar

La oposición señala que la maleza "impide ver la obra que han hecho los técnicos del Ayuntamiento" y lamentan que es "un dinero que se invierte y se tira a la basura". Lo que se supone que es un elemento de atracción turística no lo parece, pese a que Mari Carmen Sánchez, vicealcaldesa y portavoz de Ciudadanos, decía en una entrevista a este medio hace unos meses que "antes era un secarral en el que más o menos daba miedo entrar".

Preguntado por este diario, el Ayuntamiento no ha concretado cuándo fue la última actuación que se realizó en el Castillo de San Fernando así como si el BIC tiene un mantenimiento regular y adecuado.

Las escaleras y los bancos están llenos de matojos y hay excrementos de perro nada más entrar. Amorós critica que, aunque el tema es sobre patrimonio, "no se puede hacer una inversión sin guardar una partida para el mantenimiento y los servicios que necesita la infraestructura". Los socialistas exigen una inversión en el patrimonio pero que vaya acompañada de inversiones para que cumpla con tres requisitos: que esté en condiciones, que sea un atractivo para el turismo cultural y de calidad y que se utilice como un espacio cultural.