Multas a motocicletas por aparcar en calles de estacionamiento regulado de Alicante. No es todavía lo habitual en la capital alicantina, donde sigue siendo común ver numerosos vehículos motorizados a dos ruedas aparcados donde la ordenanza municipal lo prohíbe, pero hay conductores que ya están recibiendo, para su total sorpresa por ser un hecho infrecuente en los últimos años, sanciones por dejar su motocicleta estacionada en zona azul o en zona naranja. Esta semana, de hecho, varios son los ciudadanos que al ir a recoger su vehículo se han encontrado con la "receta". No es una cuestión de los controladores, sino de la Policía Local de Alicante.

La Ordenanza reguladora de las limitaciones al uso del estacionamiento de las vías públicas dice muy claro que está prohibido que aparquen, pero aún así lo hacen a diario en todas las calles del centro de Alicante. Alegan que no hay espacio suficiente para las motos, pese a que son un vehículo que contamina menos que los coches. Las plazas exclusivas, añaden, son escasas en unas calles muy cotizadas y, en ocasiones, están ocupadas por contenedores de basura, como sucede en la confluencia de la calle Poeta Vila y Blanco con la avenida Federico Soto.

Puede ser que esa imagen de motos ocupando plazas de zona azul o naranja en el centro de Alicante empiece a cambiar si estas sanciones no son fruto de un "calentón". Entre las infracciones de la norma, vigente desde hace una década, se incluye la prohibición del "estacionamiento de motocicletas, ciclomotores, excepto de tres ruedas y cuatro ruedas, ciclos y bicicletas en las áreas de estacionamiento regulado". Este artículo, el 11.g, es el que figuraba en las sanciones interpuestas esta misma semana, por un importe de 60 euros.

Fuentes de la Jefatura de la Policía Local aseguran que no ha habido ninguna orden concreta a los agentes de empezar a multar a las motos que incumplan la ordenanza, que sancionar es una cuestión que está en manos de los agentes.

Este asunto enfrenta a los conductores de las motos con los que disponen de coches. Los primeros aseguran que en el centro de Alicante no hay espacio suficiente para unos vehículos que deberían disponer de más plazas al contaminar menos, por lo que se ven obligados a dejar las motos en calles de zona azul o naranja, muy habituales en el centro de Alicante. Los segundos, en cambio, defienden que las plazas para coches también son limitadas y que éstas en numerosas ocasiones están ocupadas por motocicletas, que no pasan por el parquímetro para cumplir con el pago exigido.

La realidad es que, por ordenanza, las motos no pueden aparcar en calles de estacionamiento regulado, aunque lo hacen a diario en todas la calles pintadas de azul y de naranja de la ciudad.

Contenedores de basura y vidrio ocupando plazas exclusivas para motos, en una calle próxima a Federico Soto PILAR CORTES

Hace casi cinco años, el Ayuntamiento anunció que iba a modificar la ordenanza municipal que regula las limitaciones al uso del estacionamiento de las vías públicas en Alicante para que los usuarios de vehículos de dos ruedas a motor (motocicletas y ciclomotores) puedan aparcar en los espacios habilitados de la ORA. Ante las evidentes limitaciones de las motos frente a los coches para colocar el tique de pago, el Ayuntamiento tenía previsto habilitar dos fórmulas para que los usuarios de vehículos de ruedas a motor puedan pagar la zona azul o naranja sin inconvenientes.

Esos conductores iban a tener a su alcance el pago a través de la aplicación móvil habilitada para pagar a distancia, sin necesidad de acudir a los parquímetros físicos. Sin embargo, ese intento de modificar la ordenanza no se acabó por ejecutar y hoy las motos siguen teniendo prohibido aparcar en zonas reguladas.

A las quejas de los motociclistas multados y a los conductores de coches que se sienten agraviados, en cuestión de movilidad, también se suman las críticas de los usuarios de bicicletas, que lamentan que el bipartito de Alicante ha retirado los aparcabicis que había en la plaza Nueva y que han desaparecido tras la reciente reurbanización de la zona, tal y como han señalado desde la Plataforma Movilidad Sostenible l'Alacantí. Esta semana, una usuaria ha explicado en redes sociales haber sido multada por dejar su bici atada a una farola, ante la falta de espacios públicos para dejar las bicicletas.