Las diferencias políticas pueden dar al traste con el relanzamiento del futuro Conservatorio de Alicante, para el que la Conselleria de Educación ha anunciado la dotación de 10 millones de euros para ubicar el edificio en terrenos del Tossal, frente a lo que el Ayuntamiento contrapone otra parcela en Playa San Juan para conformar lo que el edil de Urbanismo denomina un “campus de Música y Danza” en un entorno plenamente educativo, con espacio para otros dos centros, un colegio y un instituto.
Este reciente anuncio se ha lanzado a la ciudadanía antes de hacérselo saber a los responsables de la conselleria, por lo que la reunión previamente concertada este viernes entre Adrián Santos, edil de Urbanismo perteneciente a Ciudadanos, y el director general de Infraestructuras de Educación, Víctor García, de Compromís, se aventura de inicio a cara de perro.
Globo sonda
De hecho, la primera reacción por parte de la conselleria al cambio de parcela propuesto por el Ayuntamiento ha sido la de que no se pueden pronunciar “ante un globo sonda” y que no quieren crear “más incertidumbre en la comunidad educativa" del Conservatorio de Música.
Dicen desconocer las características del terreno ofrecido, su catalogación y reserva educativa, y que solo tras el encuentro previsto este viernes con el edil de Urbanismo de Alicante, y tras trasladar su postura a la comunidad educativa, harán saber su postura al respecto.
Tensión
Las relaciones están tensas porque previamente, desde Ciudadanos, preguntaron en Cortes a la consellera Raquel Tamarit, de Compromís, si considera que el alumnado del Conservatorio de Alicante estudia en instalaciones dignas y seguras.
Y la responsable educativa arremetió contra el PP por “décadas de promesas incumplidas” con el nuevo edificio, animando al bipartito a que concediera licencia en el Tossal para desbloquearlo y culpando al alcalde, Luis Barcala, de entorpecer todas las inversiones de Educación en Alicante, amén de afear a Santos que calificara de mamotreto el proyecto.
Intenciones
El aludido concejal asegura que su intención no es la de torpedear ningún proyecto, que lo que pretenden con la nueva parcela es agilizarlo porque la licencia en el Tossal, espacio protegido, no es posible dentro de la legalidad, y que entiende que tras haber aprobado el cambio de parcela la comunidad educativa, la conselleria lo aceptará porque las relaciones con el director general de Infraestructuras, Víctor García, han sido muy fluidas hasta el momento.
Los padres han aceptado la parcela ofrecida por el Ayuntamiento pero también se apresuran a urgir la licencia en este caso para que se demuestre que realmente actúan por los ciudadanos y no por interés político.
El retraso del edificio lleva cola, tras dos décadas de abandono, y hoy por hoy las posturas de quienes deben llevarlo a cabo no pueden estar más enfrentadas.
