Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

5 millones de euros tienen la culpa de que la UA no pueda pagar las nóminas

La conselleria destaca que en siete años ha aumentado mas del 20% el dinero para personal y que hay un diálogo “constante” para “solucionar” el desfase en los presupuestos de 2023. Las universidades insisten en que la pelota está en el tejado del Consell

La UA, como el resto de campus, ha adoptado medidas de ahorro energético Alex Dominguez

Son alrededor de 5 millones de euros los que impiden que la Universidad de Alicante disponga de los fondos necesarios para poder hacer frente desde el año próximo al pago de las nóminas de profesores, investigadores y personal de administración y servicios.

Mientras desde la Conselleria de Universidades insisten en que se ha abierto una negociación al respeto y que el “dialogo” es “constante con las universidades para tratar de hallar una “solución” al desfase en los presupuestos de 2023 reclamado por la totalidad de los campus de la Comunidad como una sola voz, desde los rectorados insisten en esperar en que realmente se solucione y en que la pelota, hoy por hoy, está únicamente en el tejado del Consell, porque es de quien depende que las cantidades presupuestadas para personal incluyan tanto la subida estatal a los funcionarios como los complementos por antigüedad.

Las cifras

El apartado en concreto de “gastos de personal y funcionamiento” que lleva de cabeza a los responsables universitarios, porque no les llega para cubrir las nóminas, asciende en el caso de la UA para 2023 a 146,5 millones de euros.

Con respecto al ejercicio anterior suman 4,5 millones de euros más, puesto que en 2022 el mismo montante ha sido de 142 millones de euros, pero según los cálculos avanzados por la universidad, una subida del 2,5% en este capítulo 1 de personal no llega para cubrir el gasto total que implica cada una de las nóminas a partir de enero.

El aumento que reclaman los rectores es de al menos el 6% para resolver números que son contantes y sonantes, que no tienen vuelta de hoja en función del volumen de profesores y administrativos en cada campus, de ahí que la diferencia en concreto con respecto a la UA sobre el montante consignado por la conselleria en los presupuestos de 2023, ascienda a unos 5 millones de euros y alrededor de 30 millones entre el conjunto de los cinco centros de educación superior de la Comunidad.

Esfuerzo

Pese a la alerta de las universidades desde la conselleria que dirige Josefina Bueno puntualizan que en el curso de las casi dos legislaturas de gobierno autonómico del Botànic el dinero destinado a “gastos de personal y funcionamiento” en concreto para la UA han aumentado más de un 20%, de los 121,8 millones de 2015 a los 146,5 millones consignados en el actual anteproyecto.

“Implica que la asignación del Consell solo para gastos ordinarios de funcionamiento y personal ha aumentado un 20,5%, al margen de otras inversiones”, precisan.

Desde el departamento de Universidades insisten en que la comunicación no se ha interrumpido con los rectores, que no hay imposiciones, y que “los datos presupuestarios evidencian el esfuerzo del Consell con las universidades”. Esfuerzo que hoy por hoy para los responsables de las universidades resulta insuficiente en lo que a la partida de los gastos de personal se refiere, porque siguen sin un horizonte claro como para poder pagar los sueldos desde enero.

El anteproyecto de presupuestos del Consell no alcanza para las nóminas Alex Dominguez

Pero las universidades reclaman además del aumento en gastos de personal, una partida extra que les permita también hacer frente a la estratosférica subida de la luz y el gas, que duplica o triplica las facturas con respecto al año anterior pese a los esfuerzos de ahorro que de por sí están llevando a cabo la totalidad de los campus también.

Extras

En las filas de la oposición, el portavoz del grupo popular en Universidades, Luis Martínez, exige “una solución definitiva a la financiación de las universidades de la Comunidad, que no se plasma en los presupuestos previstos para el año próximo”. Anuncia, por tanto, la presentación de enmiendas “para apoyar a las universidades en su reclamación”.

Frente a la situación de “diálogo constante” que preconiza la conselleria, el PP arremete contra Puig y le culpa de “ignorar a los rectores y no pactar el presupuesto, ya que se quejan constantemente de que no pueden hacer frente a los gatos de mantenimiento por el aumento del coste de la energía, ni a los de personal”.

El Plan de Financiación Plurianual para las universidades es otro hueso comprometido por el propio presidente de la Generalitat para incorporarlo en los presupuestos de 2023, a lo que Martínez añade que “nunca llega”.

Desde Universidades afirman que igualmente se está trabajando con la universidades el plan de financiación y que los equipos económicos de los rectorados ya conocen la propuesta del Consell al respecto, aunque admiten que no se ha cerrado todavía porque falta el proceso de análisis de los distintos indicadores que marcan el reparto de fondos para concretar el acuerdo. “Ningún gobierno ha estado tan pendiente de las universidades”, subrayan desde la conselleria.

Compartir el artículo

stats