Una celebración de un edificio sin terminar. El Carolinas Mercat Fest se celebró este sábado en el mercado del barrio tras la apertura de la calle San Mateo. El objetivo de la fiesta era "apoyar al pequeño comercio dinamizándolo para fomentar las ventas en los mercados municipales", según aseguró la concejala Lidia López. Sin embargo, los comerciantes aseguran que las ventas se han visto perjudicadas a causa del retraso de seis meses en las obras, que deberían de haber acabado en mayo de este año y que aún siguen en marcha tanto en algunos pasillos del centro de abastos, obligando al cierre de algunos puestos, como en la propia fachada del edificio.

Tras el Carolinas Mercat Fest, este lunes algunos puestos estaban cerrados por las obras. Jose Navarro

Unas pérdidas que el Ayuntamiento no va a compensar salvo por los días concretos en los que los puestos tuvieron que cerrar al considerar que el Mercado de Carolinas como tal no ha tenido que cerrar en ningún momento. Los comerciantes, en cambio, consideran que esa compensación es insuficiente: "Cerca del 50% de la venta ha sido un desastre durante estos meses, ha sido tremendo", asegura Elías Savall, que tiene un puesto de congelados. Savall añade que la compensación por los días no resuelve nada: "Con ese dinero no pago ni la luz", apunta.

Sin avisos a comerciantes

El cierre de algunas puertas conforme la evolución de las obras ha sido también una constante, un hecho que ha confundido tanto a clientes como a comerciantes. "Llegábamos un día y la puerta estaba cerrada sin que nos hubieran dado un aviso y sin que hubiera ningún cartel. Si ha sido confuso para nosotros, más aún para los clientes", comenta una comerciante que prefiere que no publiquemos su nombre.

"La duración de las obras nos ha afectado. La empresa encargada ha hecho las cosas fatal", comenta María Roig, que regenta una panadería. "El techo lo han cambiado y desde entonces hay goteras, a mí en concreto no me ha afectado pero a los compañeros sí", asegura. Y es que la cubierta del edificio no solo se encuentra inacabada, sino que a algunos puestos les afecta directamente al estar los desperfectos sobre ellos.

Afectados por las obras

En la carnicería de Daniel Gosálbez, uno de los primeros puestos del mercado si se entra por la puerta principal, se exhibe el premio Cabasset al mejor mercado del año. Gosálbez, sin embargo, considera que aunque las obras pueden mejorar la actividad del barrio, han perjudicado a los comerciantes: "La actividad comercial del mercado se ha visto afectada porque empezaron en noviembre del año pasado y a estas alturas aún no han acabado. Queda poco por hacer, pero queda. Sí creo que los cambios van a ser para mejor y que la actividad del barrio va a aumentar".

Los desperfectos en la nueva cubierta generan goteras a los comerciantes. Jose Navarro

Chesco Rubio, que también tiene una carnicería, coincide con Gosálbez: "Va a ser para mejor. Es cierto que han durado más meses de lo que debían pero en el resultado se ve que va a ser mejor", considera. Algunos comerciantes incluso consideran que la inauguración fue buena, como Josefina Madrid, que ha abierto su charcutería durante las obras: "El otro día fue bonito con la inauguración, la gente se volcó mucho. Hay que venir a comprar a los mercados". Madrid no ha tenido su puesto abierto durante gran parte de estos meses, aunque entiende que puede haber perjudicado a sus compañeros: "Imagino que han afectado". Savall, por su parte, incide en que los comercios del Mercado de Carolinas han "tenido que cerrar días" ya que "las obras tenían que haberse acabado hace seis meses ya".