Hay personas que desean con ansia la jubilación y otras todo lo contrario. Y menos cuando llega de forma forzosa. El subinspector José Vicente Sánchez Cano es de las segundas. A sus 48 años ha tenido que jubilarse a causa de las secuelas que le dejó un accidente de tráfico sufrido en diciembre de 2020, cuando se dirigía a su puesto de trabajo en la Comisaría Provincial de Alicante. Su deseo era seguir al pie del cañón en el Grupo de Delincuencia Económica de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante, pero no ha sido posible y deja de ser miembro activo de la Policía Nacional, donde llevaba trabajando desde hacía 24 años, la mitad de su vida.

Sorpresa

José Vicente Sánchez Cano ha acudido este martes a la Comisaría Provincial de Alicante para realizar unos papeleos y al salir se ha llevado una sorpresa inesperada que inevitablemente le ha emocionado. Su compañeros de la Brigada Provincial de Policía Judicial, así como varios mandos de la Comisaría Provincial, le esperaban en la calle Isabel la Católica y han comenzado a aplaudirle durante unos minutos mientras hacían sonar al mismo tiempo las sirenas de los vehículos camuflados, con los que suelen trabajar estos investigadores de la Policía Nacional.

El jefe provincial de Operaciones de la Policía Nacional de Alicante, el comisario Matías Hernández, y el comisario jefe de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana, Ángel Neira, han sido los primeros en dar un abrazo de despedida a José Vicente Sánchez Cano, quien ha sido saludando a continuación al resto de compañeros que se han sumado a este sencillo homenaje.

El sentido aplauso que le han dado ha emocionado a José Vicente, quien se sentía con fuerzas y ánimos para continuar con su labor investigadora en la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante, donde estaba destinado desde 2006.