Antifraude archiva la denuncia por la polémica oposición a la Policía Local de Alicante

La Agencia Valenciana Antifraude (AVAF) ha archivado la denuncia por presuntas filtraciones durante el proceso de las oposiciones para cubrir 82 plazas de la Policía Local del Ayuntamiento de Alicante, desarrolladas durante la primavera de 2022.

Según la resolución del archivo firmado por el director de la AVAF, Joan Antoni Llinares, al que ha tenido acceso la agencia EFE, las plazas sometidas a cuestión son 62 de turno libre ordinario y 20 de movilidad, en torno a las cuales se denunció que varios de los aspirantes habían sido informados sobre las pruebas a realizar, así como que dos tercios de los seleccionados tenían relaciones personales o afectivas con miembros del tribunal, mandos policiales y cargos políticos y sindicales de la corporación municipal alicantina.

La Agencia de Prevención y Lucha contra el Fraude y la Corrupción de la Comunitat Valenciana (AVAF) se dirigió al Ayuntamiento para solicitar diversa documentación, entre ella copia de los expedientes administrativos sobre el proceso de selección de las plazas, y ese material ha sido remitido en noviembre por el comisario jefe de la Policía Local.

No conocían el psicotécnico

Entre esa documentación se establece que nadie del tribunal conocía el test psicotécnico que se iba a realizar, salvo la secretaria, mientras que sobre el examen se aclara que varios integrantes del tribunal elaboraron parte de las 50 preguntas que finalmente se plantearon a los candidatos (a razón de 10, 15, 15 y 10 cada miembro examinador) pero que nadie conocía las 50 que se plantearon en el test en su conjunto, a excepción de la referida secretaria.

Las preguntas se imprimieron en el servicio de reprografía del Ayuntamiento dos días antes de la oposición, en presencia de la secretaria y del presidente del tribunal, y también se acredita que los ejercicios se corrigieron de forma anónima mediante "hojas de lectura óptica" en la Universidad de Alicante.

Sobre el ejercicio práctico y en valenciano, la documentación remitida a Antifraude también da fe de la limpieza del procedimiento ante todo lo cual la Dirección de Análisis e Investigación de la Agencia concluye que "no se acredita la verosimilitud" de la denuncia y, por lo tanto, "procede el archivo del expediente, sin perjuicio de la posibilidad de su reapertura si se aportaran nuevos datos o indicios que lo hicieran necesario".

"No se observan indicios de actuaciones por parte del tribunal de selección que lleven a la conclusión de la existencia de una posible filtración de algunas de las preguntas en el ejercicio tipo test realizado, ni irregularidades en la tramitación susceptibles de motivar el inicio de una investigación", según la resolución de la AVAF. 

Los garantes del proceso

Según publicó INFORMACIÓN el pasado abril, dos personas fueron las "garantes" del examen tipo test, una prueba clave de cualquier proceso selectivo en la Administración, en las oposiciones a la Policía Local de Alicante, que ya están siendo investigadas por la Agencia Valenciana Antifraude por supuestas irregularidades ante un presunto enchufismo, y también están en manos de la Policía Nacional y el juzgado por el filtrado de un listado que pone en jaque el proceso.

Esos "garantes" son el jefe de la Policía Local y presidente del tribunal, José María Conesa, y la secretaria del tribunal y responsable a su vez del área de Movilidad del Ayuntamiento, Remedios Molina, que estuvieron presentes en la impresión del examen tipo test, que se produjo dos días antes de realizarse la prueba, según la versión oficial recogida en un informe que lleva días en Alcaldía y que todavía, tras el transcurso de la mañana de este lunes, no ha sido todavía remitido a los grupos municipales, pese a que la primera reunión de la comisión que investigará las posibles irregularidades en el proceso se convocó el pasado viernes para este próximo miércoles.

La secretaría, además, fue la encargada de dar forma al examen tipo test tras recibir las propuestas de las preguntas del resto de miembros del tribunal, con treinta de las cincuenta preguntas realizadas supuestamente por el jefe de la Policía y por el vocal que éste puso a dedo en el proceso selectivo. Las otras veinte cuestiones se las repartieron, según la versión oficial, entre la propia secretaria de la oposición (diez cuestiones) y entre los dos vocales puestos por el Instituto Valenciano de Seguridad Pública y Emergencias (Ivaspe).