Emprender desde la dificultad: "Se puede"

"Hay personas que nos hemos pasado la vida emprendiendo a partir de nuevas ideas y proyectos y aunque no tenga que ver con crear un negocio". Filóloga y diputada, Laura Soler ha demostrado en su día a día y desde su discapacidad física, que el éxito en emprender radica la capacidad de ser único y ofrecerlo a los demás, como explica ella misma.

Así se ha conducido y así lo transmitía este viernes en la sede de la Universidad de Alicante con motivo de la inauguración de una nueva "Aula de científicas de Letras", bajo la dirección de la profesora Inmaculada Fernández.

Autoestima

"Frente a la tendencia a pensar que la ciencia solo se hace desde la medicina o la química, las que se conocen como personas de bata blanca, queremos reivindicamos que desde la perspectiva de lo que hacemos desde las artes, las letras, la filología, la historia la geografía, el derecho o la perspectiva de género también es ciencia", subraya la directora del Aula.

Queremos reivindicar la ciencia que hacemos desde las artes

Inmaculada Fernández

— Directora Aula de científicas de Letras, UA

Y ha decidido estrenar estos debates mensuales con dos filólogas expertas en discapacidad y en aumentar la autoestima desde la fórmula del coaching.

Ambas plantean fórmulas para potenciar el trabajo de la mujeres emprendedoras, asegurando el empoderamiento de sus capacidades.

"El emprendimiento desde la diversidad y la discapacidad es un campo por descubrir" expone Soler. En un mundo tan cambiante como el actual, con profesiones que parecían eternas hace diez años y que dentro de otros diez ni existirán, Laura Soler reflexiona sobre la cantidad de actividades en las que se ha embarcado “a pesar de no estudiar sobre la discapacidad ni la diversidad”.

Es lo que demuestra, explica, que adaptarse al entorno y las circunstancias, como es su caso, “te lleva a mostrar tu lado más fuerte para salir adelante”.

Reinventarse

Tener ideas claras, aprender a ser flexible, y adaptarse a lo que está demandando el mercado son claves fundamentales que apunta esta filóloga para ser emprendedor en nuestras vidas, además de saber moverse, reinventarse y tener contactos, añade.

“Menos jugarme el dinero, he hecho de todo” abunda recordando que ha estudiado una carrera que poco tiene que ver con su actual dedicación política en las Cortes Valencianas, cuando empezaron a preguntar qué hacía una diputada en silla de ruedas haciendo tesis de telenovelas.

Adaptarse a las circunstancias te lleva a mostrar tu lado más fuerte para salir adelante

Laura Soler

— Filóloga y diputada

“Cuando eres tú mismo y ofreces lo que puedes aportar como seña de identidad, te permite abrirte camino como me ha pasado a mí desde la discapacidad”.

Esperanza

Y tomando como hilo conductor la canción de Diego Torres, “Saber que se puede”, Laura Soler y Ana González apuntan hacia la esperanza en el desarrollo laboral y personal “porque en cuestión de emprendimiento deben ir de la mano y lograr un equilibrio”.

La primera destaca que incluso es más difícil para las mujeres, y más si se añade discapacidad y diversidad, “aunque sino tampoco sería tan divertido” concluye, por completo empoderada.

La profesora de Filología Inglesa y emprendedora, ex directora de la Escuela de Arte y Diseño EASDA, Ana González, se las ha visto a su vez con un hijo que nació con parálisis emiplégica y que, cumplidos ya los 27, le ha convertido en una “mamá terapéutica”, hasta el punto de que ha dejado la enseñanza para crear su propio proyecto emprendedor de mamás coaching.

Al igual que Soler, apunta la necesidad de crearse una hoja de ruta propia “porque cuando sabes que puedes, te vuelves imparable porque haces lo imposible, pero también es querer que se pueda, porque hay que currárselo”, explica.

Como emprendedora, madre y profesional concreta que para dar el primer paso hay que quitarse los miedos.

“El cerebro rectiliano nos mantiene en la zona de confort y debemos atender si la incomodidad que causa el miedo es real o más bien el síndrome de la impostora”. Es decir que cuando uno está cansado el mensaje que emite su cerebro es negativo, de no poder, y que hay que parar un momento a pensar si realmente faltan habilidades y hay que pedir ayuda para no tirarse a la piscina si agua, o atacar el problema poniendo ganas.

No podemos hacer ciencia sin saber de letras

Ana González

— Profesora emprendedora, especialidad Filología Inglesa

“Esto es neurociencia y está muy relacionado con las letras -afirma- porque no puedes hacer ciencia sin saber de letras. Primero hay que aprender a leer y comprender el problema”, concreta.

Como Laura Soler, transmite su propia experiencia ya que siendo de letras ha luchado contra miedos y creencias y hace cursos de automatización y de inteligencia artificial. “Todos tenemos una parte racional y creativa, de ciencias y de letras, que habría que hermanar. Las personas con dificultades no es que seamos especiales, nos hemos pintado la cara color de esperanza y de limones hemos hecho limonada”, concluye.

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