Baraka da un ultimátum a la Diputación de Alicante por el proyecto del centro Thyssen en el antiguo Ideal

La empresa, que adquirió hace un año el inmueble que acogió el cine con el objetivo de construir un hotel, exige a la institución provincial que dé una respuesta antes del 15 de febrero sobre una iniciativa que tendría una inversión privada de 25 millones en total y gestión pública en régimen de arrendamiento

Imagen interior del antiguo cine Ideal, que adquirió recientemente Baraka con el objetivo inicial de construir un hotel

Imagen interior del antiguo cine Ideal, que adquirió recientemente Baraka con el objetivo inicial de construir un hotel / Alex Dominguez

C. Pascual

C. Pascual

El grupo Baraka, la empresa que adquirió el antiguo cine Ideal con el objetivo inicial de construir un hotel, refuerza su presión sobre la Diputación de Alicante. Tres meses después de que se desvelase que el grupo empresarial trabajaba en un proyecto para que el inmueble pudiera acoger el Centro de Innovación Cultural “Carmen Thyssen“, un espacio de tecnología avanzada que contaría con 50 obras propias de reconocidos autores y recibiría exposiciones temporales de cuadros de la baronesa, llega el ultimátum.

"Habiendo transcurrido varios meses desde la propuesta de Centro de Innovación Cultural Carmen Thyssen y respondiendo a todas las aclaraciones solicitadas, la empresa espera que no más tarde del 15 de febrero nos manifiesten de forma expresa su decisión al respecto, ya que consideramos que las obras de acondicionamiento del edificio deben de empezar de forma inmediata para el uso cultural que se ha propuesto, coincidiendo con la peatonalizacion del entorno y así crear un espacio lúdico y agradable para los alicantinos", señalan desde la empresa murciana. Desde la institución provincial, por su parte, se limitan a responder que "no hay novedades". La iniciativa debe contar con el respaldo de la Diputación, ya que sería la encargada de la gestión en régimen de arrendamiento durante veinte años para el "disfrute de alicantinos y turistas, poniendo especial atención en los jóvenes pintores de la provincia", según la empresa promotora.

A finales del pasado mes de octubre, se puso sobre la mesa un posible uso cultural para un inmueble donde se había proyectado un hotel. La baronesa Carmen Cervera, por su parte, firmó el pasado año un acuerdo con los propietarios del edificio por el que se comprometería a prestar "servicios de asesoramiento en materia de arte y de innovación cultural", participando además en actividades que se celebrasen en el centro cultural, que autoriza que lleve su nombre.

Baraka explicaba cuando desveló su proyecto que, en total, contaría con una inversión 25 millones, donde se incluiría el coste de la compra del edificio -que se ejecutó a principios de 2022-, la rehabilitación -que ya se solicitó a Urbanismo para albergar un hotel de cuatro estrellas- y la puesta en marcha del centro cultural, que contaría con la última tecnología expositiva. "Suponemos que no habría problemas urbanísticos porque tanto el Ayuntamiento como la Generalitat siempre han querido dar un uso cultural al inmueble", aseguraban hace unos meses desde la empresa de Trinitario Casanova.

A principios del pasado año se confirmó que el grupo inmobiliario Baraka, propiedad del empresario Trinitario Casanova, se había hecho con el edificio del antiguo cine Ideal de Alicante. No trascendió en su momento el montante final de la compra a la sociedad "Herederos de Josefina Mingot", con la que dos años atrás se acordó el pago de entre 4 y 6 millones de euros, pero la operación final de rehabilitación del inmueble para convertirlo en hotel se presupuestó en unos 18 millones de euros, según fuentes del grupo. Baraka firmó un acuerdo para que la gestión estuviera a cargo de NH en la categoría "collection".

Posteriormente se supo, durante el intento de la Generalitat de recurrir al derecho de retracto para hacerse con el edificio ubicado en la avenida de la Constitución, que la escritura de compraventa de enero de 2022 acreditaba que la transmisión se había realizado por 4.000.000 de euros, más el IVA , el que supuso un importe total de 4.840.000 euros.

Y es que medio año después de ese acuerdo privado, el pasado mes de julio, la Generalitat determinó la "inviabilidad" de adquirir el antiguo edificio al considerar que la tasación, entre 1,8 y 2,5 millones, distaba mucho del precio que cerró el grupo Baraka con los propietarios. La decisión se tomó durante una reunión de la Junta de Valoración de Bienes del Patrimonio Cultural Valenciano de la Generalitat, tras analizar la documentación sobre la posibilidad de ejercer el derecho de retracto para la adquisición del antiguo edificio.