Alicante se seca: el Gobierno podría decretar la emergencia en abril

La provincia registra un 40% menos de precipitaciones entre octubre y marzo que en la media del periodo de 1991 a 2020

Una hormiga busca alimento en la tierra cuarteada por la sequía.

Una hormiga busca alimento en la tierra cuarteada por la sequía. / Áxel Álvarez

Pérez Gil

Pérez Gil

La falta de lluvias en la provincia de Alicante comienza a vislumbrar un panorama de sequía cuando comienza el periodo más árido del año. Una vez transcurrida la mitad del año hidrológico 2022-2023, que comenzó el pasado 1 de octubre de 2022, el carácter pluviométrico de los últimos seis meses está siendo muy seco, con un déficit medio de precipitación en la Comunidad Valenciana del 35%, en la provincia de Alicante del 40% y en Alicante capital del 60%. Un registro que alcanza el mismo porcentaje negativo que la media del periodo incluido entre los años 1991 y 2020.

Según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Comunidad Valenciana, el 96% del territorio de Alicante, València y Castellón presenta déficit pluviométrico en el actual año hidrológico. Hay comarcas alicantinas cuyo déficit es superior al 50%, lo que quiere decir que no ha llovido ni la mitad de lo que suele ser normal entre octubre y marzo.

Porcentaje de lluvias en la Comunidad Valenciana de octubre de 2022 a marzo de 2023.

Porcentaje de lluvias en la Comunidad Valenciana de octubre de 2022 a marzo de 2023. / AEMET

Donde más ha llovido ha sido en el norte y en la zona de montaña, incluso en este mes marzo, pero nada que ver con la excepcionalidad del año pasado, que tuvimos un mes de marzo de anomalía positiva pluviométrica muy importante, con cantidades que en muchos casos llegaron a los dos tercios de la media pluviométrica anual en un solo mes.

Ante este panorama poco halagüeño el Catedrático de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Alicante y director del Laboratorio de Climatología, Jorge Olcina, prevé que el Gobierno de España emita en las próximas semanas un nuevo decreto de emergencia por sequía tanto en la cuenca del Júcar como en la del Segura. "Las reservas hídricas de la lluviosa primavera de 2022 se están agotando en nuestra provincia y, si no hay precipitaciones abundantes en abril y mayo de 2023, y por desgracia las previsiones apuntan a que nos espera una primavera más seca que húmeda, será necesario adoptar medidas extraordinarias para suplir la falta de agua", ha indicado el experto.

La escasez de precipitaciones en la provincia de Alicante también seca la masa forestal.

La escasez de precipitaciones en la provincia de Alicante también seca la masa forestal. / Áxel Álvarez

Las abundantes lluvias de la primavera pasada batieron récord de precipitaciones en las comarcas alicantinas, lo que permitió que las cuencas del Júcar y del Segura se nutrieran de unas reservas que ya están comenzando a dar síntomas de agotamiento. "Por eso si en unas semanas si sigue sin llover se tendrá que promulgar un Real Decreto-Ley de Medidas Urgentes de Apoyo al Sector Agrario por Causa de la Sequía", reitera Olcina.

Efectos del cambio climático

En principio marzo se despide sin lluvias y, por encima de todo, con temperaturas altas, más propias de los primeros días de junio que de esta época del año. "Aunque los modelos numéricos van plegando, hay un cambio de patrón con la llegada del mes de abril y, aunque estamos a largo plazo y la dispersión es muy alta, no se descarta que lleguen lluvias más generalizadas a lo largo del próximo mes", indica el meteorólogo Lluís Francés, que advierte que "de momento esperamos que en esta primavera llueva lo normal para esta zona".

Los cultivos de secano de la provincia de Alicante comienzan a sufrir estrés hídrico.

Los cultivos de secano de la provincia de Alicante comienzan a sufrir estrés hídrico. / Áxel Álvarez

"Tenemos que ser conscientes que nos encontramos en una área climática influenciada tanto por climas desérticos como por climas húmedos y, asimismo, estamos expuestos a efectos cada vez más extremos y frecuentes en nuestra provincia, como las olas de calor o las lluvias torrenciales", añade el experto aludiendo al lema elegido por la Organización Meteorológica Mundial para este año: “El futuro del Tiempo, el Clima y el Agua a través de las generaciones”. Un lema que le toca muy de cerca a la provincia de Alicante dada su sensibilidad climática. Por eso Francés aboga por "una mayor concienciación social y más educación sobre el cambio climático en todos los estratos sociales".

En el resto de España

El problema de la escasez de lluvias no se da solo en la zona de Levante ni el sur de la Península Ibérica. El valor medio nacional de las precipitaciones acumuladas desde el pasado 1 de octubre de 2022 hasta el 21 de marzo de 2023 se cifra en 329 litros por metro cuadrado, lo que representa alrededor de un 14% menos que el valor normal correspondiente a dicho periodo y que se sitúa en 383 litros por metro cuadrado.

Las cantidades acumuladas se encuentran por debajo de sus valores normales en la franja cantábrica salvo en Galicia, en gran parte de la mitad este de la Península Ibérica junto con el tercio sur y en el archipiélago de Canarias con la excepción de la mitad sur de la isla de Tenerife y del noroeste de Gran Canaria. Por otra parte, las precipitaciones superan los valores normales para el periodo 1991-2020 en muchas zonas del interior y tercio oeste de la Península (con la excepción de Andalucía), en el norte de Huesca, en la mayor parte de la isla de Mallorca, en la isla de Menorca y en la mitad sur de la isla de Tenerife.