El Sepulcro vuelve a sus orígenes en la Semana Santa de Alicante

La Hermandad volverá a portar el estandarte original tras encontrarlo por casualidad entre varios elementos guardados | El paso baja a ruedas por la Rambla con "la sensación de que levita"

Varios hermanos trasladan la imagen del Sepulcro.

Varios hermanos trasladan la imagen del Sepulcro. / David Revenga

Alberto Losa

Alberto Losa

La imagen del Santísimo Cristo Yacente, "El Sepulcro", volverá a salir por las calles de Alicante en el Viernes Santo, aunque este año lo hará precedido por su estandarte original, tras aparecer este entre varias pertenencias que tenía almacenadas la hermandad.

"Apareció guardado el estandarte original del año 1943. Este año, en lugar de sacar el que tenemos, vamos a sacar el del año 1943. Somos muy de tradición y todo lo que estaba guardado hay que sacarlo a la calle", explica Esmeralda Giner, su hermana mayor, quien apunta que no es la única reliquia que queda por aparecer: "Muchas cosas las sabemos porque nos las han contado, las primeras actas no las encontramos".

La Hermandad del Sepulcro se refundó después de la guerra civil, en el año 1943, y es filial de Nuestro Padre Jesús: "Tenemos dos hermandades que sacar a la calle, somos las mismas personas y funcionamos igual. La diferencia en la vestimenta es que llevamos capa y capirote blanco", apunta Giner.

A ruedas

Un paso que además saldrá con su imagen renovada hace apenas cuatro años, aunque la salida en la pandemia el pasado año le ha afectado: "El Sepulcro nunca se había tocado. Conforme nació en el 43 solo habíamos cambiado el chasis porque se rompió. La talla se restauró prepandemia y la pandemia le ha hecho estragos, porque está muy a mano que es lo que se necesita, pero el hidrogel afecta", lamenta la hermana mayor.

A diferencia de la mayoría de imágenes alicantinas, El Sepulcro sale a ruedas para que mantenga su actual forma de procesionar, como explica la hermana mayor: "No nos planteamos sacarlo a hombros porque de la forma tan elegante en la que baja la Rambla parece que el Cristo levita. Si fuese a varal, por muy bien que andaran, nunca iría así de bonito. Es tan bonito verlo bajar con su marcha propia que no nos lo planteamos".

Encuentro con Desolata

La salida del Sepulcro es uno de los momentos más destacados, apuntan desde la Hermandad, porque está todo oscuro y solo iluminado por un cañón de luz. Incluso la propia Catedral se queda a lóbrega para el momento del inicio de la procesión.

Una salida que permite hacer catequesis en la calle, como explica Giner: "Los que sacamos la religiosidad a la calle somos las hermandades de la Semana Santa. Los patronos sí salen en su momento puntual, pero la pasión completa sale a la calle por las hermandades".

Desde hace unos años, además, la entrada en "casa", como denominan a la Concatedral, implica el encuentro con Mater Desolata de San José de Carolinas: "Cuando nosotros llegamos están ellos con los faroles esperando. En Alicante estamos todos cerca, y cuando entramos por la puerta y vemos a sus cofrades con los faroles levantados para nosotros es muy bonito", subraya la hermana mayor del Sepulcro.