Los turistas de Reino Unido y Francia, los que más gastan en la Comunidad

El turismo celebra las cifras del 2022, que mejoran las del último año antes de la pandemia, y augura un resultado mayor en la presente temporada

El paseo del Postiguet, lleno de turistas el pasado verano.

El paseo del Postiguet, lleno de turistas el pasado verano. / Alex Domínguez

Alejandro J. Fuentes

Alejandro J. Fuentes

Los turistas extranjeros dejaron en la Comunidad Valenciana más de 6.000 millones de euros durante el pasado 2022, unos registros que constatan la recuperación del sector tras los efectos de la pandemia y que superaron a los marcados en 2019, el último año de «normalidad» antes del estallido del coronavirus. Un estudio experimental del Instituto Nacional de Estadística revela que los visitantes procedentes de otros países realizaron gastos o retiradas de efectivo con sus tarjetas de crédito por un importe total de 6.750.185.386 euros.

Un dato que aún sería superior incluyendo las transacciones en efectivo y el dinero «de bolsillo» que los turistas traen ya cambiado de sus países de origen; y que en el caso de la provincia Hosbec estima que supondría más del 55% total, que es el porcentaje de la producción turística que corresponde a Alicante dentro de la Comunidad Valenciana.

Dentro del mapa nacional, la autonomía se situó como la cuarta con mayores ingresos absolutos del año, solo por detrás de Cataluña, Andalucía y las Islas Baleares, sin embargo, los datos de la Comunidad fueron significativamente mejores que los de las demás regiones españolas, ya que fue la única que mejoró los datos registrados en la última temporada prepandemia.

En cuanto a los países de procedencia de los turistas que más gasto generaron en su visita a la Comunidad el Reino Unido se afianza en la primera posición como principal emisor de visitantes hacia el territorio valenciano, con una inversión superior a los 1.200 millones.

La estadística, que contempla todos los gastos llevados a cabo mediante tarjeta de débito o crédito -hoteles, restaurantes, compras...- así como las retiradas de efectivo sitúa a Francia como el segundo país que mayores ingresos generó para el turismo de la Comunidad durante el pasado año: los visitantes del país vecino dejaron 853 millones de euros en la autonomía. El «podio» lo cierran los Países Bajos, que se establecen en la tercera posición desde 2018, el primer año con registros de esta estadística experimental. Los turistas neerlandeses aportaron en 2022 más de 680 millones de euros a los negocios turísticos de la Comunidad.

Sin embargo, pese a ser los países de origen con mayor peso en la economía del sector, lo son por el alto volumen de visitantes que escogen la autonomía valenciana para disfrutar sus vacaciones, no por ser los que más dinero invierten. En cuanto al gasto individual por turista, hay que bajar hasta el puesto número 15 de la lista para encontrar a alguno de los tres países que lideran la clasificación total.

Gasto turístico en la Comunidad según el país de procedencia.

Gasto turístico en la Comunidad según el país de procedencia. / ADRIÁN ESTÉVEZ

En este apartado de la estadística, los turistas de los Emiratos Árabes Unidos son los que más gasto medio realizan: 1.328 euros por persona, seguidos por los chinos, con 1.108 euros,y los suizos, que dejan de media 1.086 euros en el sector. En cuanto a los visitantes de la UE, los alemanes son los que más gastan durante sus vacaciones: 818 euros de media.

«Año atípico»

Por su parte, el sector celebra la estadística como un indicativo de la recuperación turística pero advierte de que el 2022 fue un año «atípico» con muchos condicionantes negativos y confía en que las cifras de la presente temporada sean todavía mejores que las del pasado anterior.

El presidente de la patronal hotelera Hosbec, Fede Fuster, recuerda que a principios del año pasado «la ola de ómicron demoró la llegada de muchas conexiones internacionales como las de Reino Unido, que es el principal mercado emisor», por lo que considera que «empezamos a funcionar bien a partir de mayo o junio» aunque reconoce que la temporada estival y la de los meses de invierno «fueron muy buenos, bastante mejor de lo que todo el mundo esperaba».

En cuanto al último trimestre del año, Fuster celebra que la alta demanda permitió aumentar en cierta medida los precios para hacer frente a los costes disparados por las consecuencias de la guerra entre Rusia y Ucrania y transmitir al precio de venta estos gastos imprevistos.

El presidente de la patronal considera además un dato a destacar la segunda posición consolidada por el turismo procedente de Francia, «un mercado que ha subido mucho en los últimos años en el que estamos creciendo muy bien», por lo que apuesta por continuar en el mismo rumbo de trabajo.

Turistas toman el sol en Alicante el pasado verano.

Turistas toman el sol en Alicante el pasado verano. / ALEX DOMINGUEZ

En este sentido, considera que los «retos» para la presente temporada deben ir encaminados en esa misma línea: «recuperar los nueve puntos en cuanto a conexiones aéreas que a día de hoy nos estamos dejando con Reino Unido», un objetivo que Fuster considera «viable» ya que a partir del mes de junio «los turoperadores ponen nuevos aviones más grandes y sostenibles en su flota, de la que gran parte tiene como destino principal la provincia de Alicante».

Además, el presidente de Hosbec también pone el foco en seguir potenciando el público procedente de Benelux -acrónimo que se utiliza para referirse a Bélgica, los Países Bajos y Luxemburgo- que «aunque son países pequeños que no están muy poblados tenemos buena conexión con ello y cuentan con un invierno muy duro, por lo que tradicionalmente han venido mucho y eso se va notando».

En cuanto a sus previsiones para la presente temporada, Fuster apuesta porque el mercado internacional va a destacar: «es un público que hace reservas con mucha antelación porque necesitan el vuelo, optan por estancias medias y largas que ya las tenemos concretadas». El verano, según indica, «está bastante bien vendido para todo lo que es el mercado extranjero» y, por lo que respecta al público nacional, que tradicionalmente es más propenso a las reservas de última hora, el empresario hotelero pone el ejemplo de la Semana Santa para trasladar tranquilidad al sector: «Estábamos en un 70 y poco por ciento antes del jueves santo y hemos cerrado por encima del 90, por lo que en tres o cuatro días se ha vendido casi todo. Cada vez funcionamos más así» ha concluido Fuster.