El Gobierno prepara el decreto de sequía con el suministro garantizado en Alicante salvo para los cultivos de secano

Aemet advierte sobre la falta de lluvias intensas hasta octubre -El Ejecutivo concederá incentivos fiscales y laborales a los damnificados mientras solicita ayudas directas a la UE

La reunión de la mesa de la sequía convocada en Madrid se ha prolongado durante más de cinco horas.

La reunión de la mesa de la sequía convocada en Madrid se ha prolongado durante más de cinco horas.

Pérez Gil

Pérez Gil

La mesa de la sequía convocada para este miércoles 19 de abril en Madrid por el subsecretario de Agricultura, Pesca y Alimentación, Ernesto Abati García-Manso, ha acordado elaborar un decreto para paliar los graves efectos que la falta de lluvias está generando en toda España. La medida deberá entrar en vigor en mayo y contempla incentivos fiscales y laborales así como ayudas directas que el Gobierno de España solicitará a la Unión Europea.

Tanto la representación de la Comunidad Valenciana como la del resto de Autonomías y organizaciones profesionales presentes en la reunión han reclamado que en las medidas coyunturales, a recoger en el próximo decreto de sequia, figuren bonificaciones fiscales y en las cuotas de la Seguridad Social así como ayudas directas y fondos compensatorios de Bruselas al tratarse de un problema que afecta a más países socios de la UE.

Pero también han reclamado al Gobierno central, de forma adicional, soluciones estructurales ya que las previsiones apuntan a que los episodios de sequia se van a acrecentar en los próximos años y, por tanto, la solución pasa por acelerar la ejecución de las inversiones estatales para ejecutar infraestructuras hídricas y fomentar el ahorro, la depuración y la reutilización de las aguas, tal y como está previsto en los planes de cuenca recientemente aprobados.

Agua para el verano

En lo que se refiere a la provincia de Alicante, en concreto, y a la Comunidad Valenciana, en general, se garantiza para el próximo verano el abastecimiento urbano y de usos recreativos y turísticos así como en las plantaciones agrícolas de regadío. Únicamente los cultivos tradicionales de secano -almendro, vid, cereal y olivar- sufrirán inexorablemente las consecuencias de una situación de estrés hídrico que se mantendrá hasta octubre, con la consiguiente pérdida de cosechas y cultivos.

Así lo han señalado durante la reunión los técnicos de la Agencia Estatal de Meteorología, que no prevén lluvias intensas en España capaces de llenar los embalses hasta los meses de septiembre y octubre.

A la reunión han asistido en representación de la Comunidad Valenciana la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Isaura Navarro;  el secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, Roger Llanes, y Paco Candela, secretario autonómico de Emergencia Climática y Transición Ecológica, quien ha reiterado que no hay motivos para la alarma en la Comunidad Valenciana.

"Afortunadamente, gracias a las abundantes lluvias de la primavera del año pasado, somos una de las Autonomías que en mejor situación hídrica nos encontramos para afrontar esta sequía, tanto en la cuenca del Tajo-Segura como en la del Júcar-Vinalopó". Así lo ha manifestado Paco Candela recordando que las tres plantas desaladoras de la provincia de Alicante -Mutxamel, Alicante y Torrevieja- se encuentran actualmente al 50% de la producción total que podrían alcanzar en su conjunto si fuera necesario.

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Francisco Candela, secretario autonómico de Emergencia Climática y Transición Ecológica, y la consellera de Agricultura y Transición Ecológica, Isaura Navarro, en la mesa de la sequía.

Respecto al trasvase Tajo-Segura no hay ninguna previsión de reducir las transferencias de 27 hectómetros cúbicos mensuales. De hecho, el pasado jueves la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura dio luz verde a realizar en este mes de abril un nuevo trasvase de 27 hectómetros cúbicos desde los embalses de Entrepeñas-Buendía.

Tras analizar la situación de esta cuenca a comienzos del presente mes, los datos indicaban que la situación es de normalidad hidrológica (nivel 2), por lo que se ha autorizado automáticamente un trasvase de 27 hm3 para abril. Y todo apunta a que también en mayo se aprobará un envío similar. Un contexto que los representantes del Consell han aprovechado para dar un toque de atención a la Comunidad de Madrid instándole a mejorar el funcionamiento de su red de estaciones depuradoras de aguas residuales.

La consellera Isaura Navarro también ha expuesto en su intervención la necesidad de activar definitivamente el trasvase Júcar-Vinalopó para garantizar, de forma duradera y estable, la llegada de caudales a las comarcas del Alto y Medio Vinalopó, l'Alacantí y la Marina Baixa. Sobre esta cuestión la delegación valenciana ha instado al Gobierno de España a concretar el ajuste presupuestario pendiente para que el agua empiece a circular en beneficio de 1.500.000 habitantes y 65.000 hectáreas de regadío. Una petición que Ángel Urbina, recientemente elegido presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, l'Alacantí y el Consorcio de Aguas de la Marina Baixa, ha reclamado en varias ocasiones.

Hay cuencas hidrográficas como las del Guadalquivir y Guadiana en Andalucía y del Ebro en Cataluña donde la situación empieza a ser muy preocupante. Sus respectivos gobiernos autonómicos -que tienen la competencia exclusiva en materia de abastecimiento hídrico- comienzan a aplicar restricciones en el suministro urbano.

Trasvase Júcar-Vinalopó

En la provincia de Alicante la comarca de la Vega Baja se encuentra ya en estado de prealerta por la sequía. También la Junta General de Usuarios del Vinalopó, l'Alacantí y el Consorcio de la Marina Baixa va a solicitar formalmente 8 hectómetros cúbicos del trasvase del Júcar para suplir el estrés hídrico que están sufriendo los cultivos.

Pero de momento el Consejo de Ministros no prevé poner en marcha los pozos de sequía y los riegos de socorro en las comarcas alicantinas.

El sentir general de los representantes de las organizaciones agrarias es de falta de urgencia y concreción en las medidas gubernamentales para enfrentarse a un problema que será "dramático" si no llueve en dos semanas.

En este contexto el presidente de ASAJA, Pedro Barato, ha señalado al finalizar el foro que el actual panorama "no está para diagnósticos sino para que se apruebe un real decreto con medidas concretas, claras y urgentes".

Ahorro hídrico y consumo racional

La situación más sensible por la falta de lluvias en la provincia de Alicante se halla en la comarca de la Vega Baja al encontrarse en estado de prealerta. También la Junta General de Usuarios del Vinalopó, l’Alacantí y el Consorcio de la Marina Baixa va a solicitar 8 hectómetros cúbicos del trasvase del Júcar para suplir el estrés hídrico que están sufriendo los cultivos. Pero de momento no es necesario poner en marcha los pozos de sequía ni los riegos de socorro en las comarcas alicantinas. Ni los municipios, ni los servicios turísticos relacionados con el agua ni la agricultura de regadío corren riesgo por la falta de suministro durante el próximo verano. En cualquier caso, desde el Gobierno valenciano se insiste en lanzar un mensaje de responsabilidad y concienciación para fomentar el ahorro hídrico y el consumo racional hasta que lleguen las lluvias.

Una masa de aire sahariano para cerrar abril

La situación de sequía podría verse agravada la próxima semana si se cumplen los pronósticos que indican que la Península Ibérica y los archipiélagos se verán afectados por una «bomba de calor», una masa de aire muy cálido que se desplaza desde el noroeste de las Azores impulsada por una vasta área de bajas presiones. Si se mantienen estas condiciones, las temperaturas podrían alcanzar a partir del jueves o viernes valores propios de la canícula, con casi 40 grados centígrados en el valle del Guadalquivir y más de 35 grados en otras capitales del centro y sur, incluso en el litoral cantábrico podrían superar los 30 grados.

Este fenómeno sería algo excepcional para la época y podría romper récords absolutos de temperatura para el mes de abril. En algunos observatorios meteorológicos de la red principal de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ya se han registrado valores elevados, como los 37,4 grados centígrados en el observatorio de Murcia en el año 2011.

Pero hay que contar con variables que podrían frenar las temperaturas caniculares, como el viento, el polvo en suspensión y la nubosidad media-alta. Además, conforme aumentan los plazos, también lo hace la incertidumbre, y más en esta época del año. Por lo tanto, todavía hay motivos para que la cresta anticiclónica no sea tan robusta como se espera y que haya descuelgues de aire frío que afecten a la Península Ibérica.

En caso contrario el calor intenso podría agravar la situación de sequía y tener consecuencias nefastas para los montes y los cultivos, los embalses y aumentar el riesgo de incendios forestales.

Sin embargo el catedrático de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Alicante y director del Laboratorio de Climatología, Jorge Olcina, advierte de que se trata de previsiones a diez días vista y, por lo tanto, «hay que ir confirmarlas con más prudencia porque es todavía muy temprano para afirmar algo así». De hecho, las predicciones meteorológicas hay que matizarlas cada 24 o 48 horas y más en el actual contexto con un tiempo tan cambiante.

Lo cierto es que para finales de la semana que viene, si se cumplen los parámetros, se espera la irrupción en la Península Ibérica de una masa de aire sahariano de la que no se librará tampoco la provincia de Alicante. «Pero no será tan activa como cuando llega en los meses de junio, julio o agosto y, en ningún caso, será una bomba de calor», subraya el experto.

Serán jornadas calurosas de temperaturas altas con las que se cerrará un mes de abril en el que también se han registrado algunas heladas en puntos del interior. Concretamente de hasta -3,6 grados centígrados el pasado 3 de abril en la rambla de la Sarga, en el término municipal de Xixona.