El máster en propiedad intelectual de la Universidad de Alicante atrae a alumnos de más de 30 países

Llegan de todos los continentes hasta Alicante para estudiar el máster más antiguo de España de propiedad intelectual y de los más veteranos de Europa. Su fama mundial se refleja en la procedencia tanto de los alumnos (de más de 30 nacionalidades diferentes), como de sus más de 200 profesores que trabajan en instituciones de la talla de la Oficina Europea de Patentes (EPO por sus siglas en inglés), la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), o la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), entre muchas otras.

El Magister Lvcentinvs (ML/LLM), Máster en Propiedad Intelectual e Innovación Digital de la Universidad de Alicante (UA) ha cumplido treinta años atesorando un prestigio por el cual hay profesionales que incluso solicitan una plaza con dos años de antelación para especializarse en un ámbito que está viviendo una auténtica revolución debido al auge de la inteligencia artificial (IA). 

« La IA, o lo que son las tecnologías de Blockchain, el internet de las cosas, todo lo que ha ido surgiendo en los últimos años, ha hecho que aumente el interés por cursar este máster», afirma Pilar Montero, directora de este título académico de posgrado y profesora Titular de Derecho Mercantil de la UA.

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Y esto ocurre en un sector que, precisamente, experimenta el desafío de aplicar la propiedad intelectual tradicional en el mundo digital «porque igual que sucede en otros ámbitos, aquí tenemos que adaptar unas estructuras pensadas para un mundo analógico», explica su directora. 

Como ejemplos, sus especialistas tienen el reto de discernir lo que se puede patentar o no en el mundo de la inteligencia artificial, de aclarar de quién es lo que la inteligencia artificial crea o de saber cómo se puede defender una marca en un mundo global donde no hay fronteras, o de cómo proteger un diseño específico en pleno auge de las impresoras digitales...

Con todo ello, lo que se ha propuesto el Magister Lucentinus es que todos los alumnos que salgan del máster «sepan o conozcan todas las herramientas que necesitan los empresarios, los innovadores y los actores del mercado para proteger y rentabilizar sus inversiones», añade Montero.

Con este aprendizaje que dura un curso y que incluye la opción de hacer prácticas de forma posterior, titulados de diversas ramas, desde las ciencias sociales, jurídicas, traducción e interpretación, ingenierías, titulados en Administración y Dirección de Empresas, en relaciones internacionales, en derecho o en marketing, obtienen unos conocimientos que les permiten trabajar en todos los ámbitos relacionados con la propiedad intelectual. Entre sus salidas: desde las oficinas que se ocupan de este cometido en los distintos países, así como empresas farmacéuticas, tecnólogicas, las asociaciones de propiedad intelectual, agencias, consultoras, empresas de telecomunicaciones, despachos de abogados, agencias de publicidad o comunicación, entre otras muchas. 

«Al final la propiedad intelectual es un ámbito estratégico para todas las empresas y ayuda mucho el poder tener una persona o un departamento, según la capacidad de las mismas, que les pueda orientar porque ya sabemos que las empresas que son intensivas en propiedad intelectual tienen un rendimiento del doble o del triple que cualquiera que no lo es», apunta su directora.

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Exclusividad

Uno de los ingredientes de la relevancia que ha alcanzado esta formación es la exclusividad del máster. Sus coordinadores analizan los curriculum para seleccionar a su alumnado y conformar un pequeño grupo de 30 plazas que les permite mantener el prestigio. «Dentro de ese compromiso con la excelencia, el contenido se renueva cada año para incorporar todas las novedades legislativas», precisa Montero.

A este factor se suma la sinergia institucional que han conseguido establecer estos estudios impulsados por el departamento de Derecho Mercantil de la Universidad de Alicante, especialmente, con la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), organismo competente para el registro de marcas y diseños en el ámbito de la Unión Europea, que tiene sede en la capital de la provincia. 

Una prueba de ello fue la clausura del máster celebrada el pasado mes en el auditorio de las oficinas de Agua Amarga, con motivo de su 30 aniversario, una cita que reunió al director ejecutivo de la EUIPO, João Negrão, al Presidente de la Oficina Europea de Patentes, António Campinos, la rectora de la UA, Amparo Navarro, a la Presidenta de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia, Cani Fernández, a la directora de la Oficina Española de Patentes y Marcas, Elisa Rodríguez; a la subdirectora de Propiedad Intelectual del Ministerio de Cultura, Laura Chaguaceda; el jefe de la Unidad de Indicaciones Geográficas de la Dirección General de Agricultura de la CE, João Onofre.

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