La nueva ordenanza de Vía Pública enfrenta a hosteleros y vecinos de Alicante
Las medidas acordadas entre el equipo de gobierno del PP y Compromís suponen reducir media hora los veladores los fines de semana de verano y elimina la posibilidad de instalar terrazas en aparcamientos en zonas tensionadas por el ruido

Alex Domínguez
Un acuerdo dificil de cerrar. Y unas conclusiones que no han dejado indiferentes ni a hosteleros ni a vecinos. La nueva ordenanza de Vía Pública de Alicante, acordada entre el equipo de gobierno del PP y Compromís, enfrenta a hosteleros y vecinos debido a las medidas acordadas, que incluyen la reducción de media hora en el horario de los veladores durante los fines de semana de verano y la prohibición de instalar terrazas en aparcamientos en zonas con problemas de ruido.
Estas medidas, que serán votadas en el Pleno municipal el próximo jueves, buscan equilibrar el descanso vecinal y la actividad económica de los negocios de hostelería, pero han generado una fuerte polémica entre los afectados. Como adelantó este diario, este acuerdo recoge que las terrazas deban recogerse a la 01:30 los viernes y sábados de verano, media hora antes de lo propuesto inicialmente por el PP. Con este pacto, se permitirá que los veladores estén en la calle hasta las 01:30 horas los fines de semana y hasta las 01:00 horas entre semana durante el verano. En invierno, las terrazas deberán recogerse a medianoche entre semana y a la 01:00 los fines de semana.
La nueva normativa ha generado un fuerte rechazo entre los hosteleros. Gabriela Córdoba, presidenta de la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA), expresó su descontento con las medidas acordadas. "Nos negamos a que esto salga adelante. Estamos en una ciudad que vive del turismo y la hostelería, y no puede ser que aprueben ordenanzas que van en contra de esto. Nos han quitado tiempo fundamental para nuestros negocios, especialmente en verano cuando la gente cena más tarde", aseguró Córdoba.
Gabriela Córdoba explicó que la reducción horaria afecta significativamente a los restaurantes, especialmente durante los meses de verano. "En Alicante, la gente no sale a cenar a las ocho de la tarde, especialmente en julio y agosto, cuando los turistas están de vacaciones y quieren una experiencia más relajada. Necesitamos ese tiempo adicional para poder operar correctamente y atender a nuestros clientes. Muchos restaurantes con terrazas pueden doblar mesas y trabajar más, y ahora nos están quitando esa oportunidad", apuntó Córdoba.
Por su parte, Irene Sanz, vicepresidenta de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Alicante (Apeha), añadió que "no estamos de acuerdo con las restricciones". Para Sanz la problemática reside en que "vivimos en una ciudad turística, y no se puede limitar tanto el horario. Aquí hace calor y la gente sale más tarde. Quitar media hora es un golpe duro para nuestros negocios, entendemos que los vecinos necesitan descansar, pero estas medidas son excesivas", indicó Sanz.
La vicepresidenta de Apeha subrayó la importancia conservar los horarios nocturnos actuales para la hostelería en Alicante. "La gente aquí disfruta de las terrazas por la noche, cuando el clima es más agradable. Quitar esa media hora es quitar una parte esencial de nuestro negocio. Ya estaba bastante limitado, y ahora es aún más difícil. Respetamos el derecho de los vecinos a descansar, pero creemos que se podría encontrar un punto medio más equilibrado", destacó Sanz.
Además, Javier Galdeano, presidente de Alroa, criticó que desde el Ayuntamiento de Alicante se han tomado estas decisiones sin tener en cuenta al sector. "Tomar este tipo de decisiones sin contar con el sector no es una buena idea. No es solo una cuestión de no consultarlo, sino que lo han hecho sin un estudio económico que evalúe cómo afecta a los puestos de trabajo y a los ingresos. Es descabellado", explicó Galdeano.
Alfonso Escandell, portavoz de la Asociación de Comerciantes del Casco Antiguo, se mostró preocupado por la situación a la que la nueva ordenanza pueda llevar a los negocios de hostelería en la ciudad. "Todo lo que sea restringir horarios no es bueno. Cada media hora de trabajo cuenta. Veremos qué pasa, pero todo esto nos afecta negativamente, los clientes buscan disfrutar de la vida nocturna, y estas restricciones pueden ahuyentarlos", afirmó Escandell.
Vecinos afectados
Por otro lado, los vecinos ven la ordenanza como un paso positivo hacia la reducción del ruido. Joaquín Gangoso, presidente de la Asociación Laderas del Benacantil, comentó que esta nueva Ordenanza de Vía Pública es "una buena noticia. Llevamos años pidiendo medidas para reducir el ruido y nos parece un avance, aunque aún queda mucho por hacer. Los vecinos necesitamos descansar y esta ordenanza es un paso en la dirección correcta", afirmó Gangoso.
Gangoso expresó el sentir general de los vecinos, quienes han soportado el ruido nocturno durante años. "Hace más de un año, antes de las elecciones, ya estaba aprobada una nueva ordenanza, pero nada ha cambiado. Nos sentimos atrapados en un ciclo interminable de promesas incumplidas. Cada avance es bienvenido, pero necesitamos ver resultados concretos. El ruido nocturno es insoportable y afecta nuestra calidad de vida", explicó Gangoso.
Asimsimo, Conchi Galea, presidenta de la Asociación de Vecinos del Raval Roig, considera que esta las novedades de esta ordenanza son una buena noticia para el barrio. "Vivimos en un barrio que se ha convertido en una zona muy turística y para nosotros es una buena noticia que haya una mayor regulación. Que cierren las terrazas antes es una medida que esperamos que nos ayude con los problemas de convivencia y nos parece una buena idea aunque siempre puede mejorarse", destacó Galea.
Sin embargo, José Baeza, vecino del Centro Tradicional, compartió su escepticismo respecto a la puesta en marcha de esta nueva normativa. "Habrá que ver en qué se concreta. Somos recelosos porque se hacen muchos anuncios, pero se concreta poco. La ordenanza del ruido sigue sin actualizarse desde hace décadas. La música suena bien, pero hasta que no veamos resultados, no podemos confiar plenamente", indicó Baeza.
Baeza explicó que los vecinos han perdido la fe en las promesas políticas. "Hemos escuchado muchos anuncios y visto pocos resultados. La ordenanza de ocupación de vía pública siempre se ha vinculado a la del ruido, y esta última sigue desactualizada. Tenemos una normativa de 1991 que no aborda los problemas actuales. Sin una actualización, no podemos confiar en que las cosas mejoren realmente", apuntó.
- Educación contempla el confinamiento de alumnos en colegios e institutos ante una dana imprevista
- Este es el barrio de Alicante por el que podrán circular los tuctucs
- Multas de hasta 500 euros para los patinetes eléctricos en Alicante: el requisito que habrá que cumplir a partir del 2 de enero
- Los jesuitas apartan a un sacerdote acusado de abusos a un menor en Alicante
- Luz verde para las oposiciones a maestro en plena vuelta al cole
- Yoshua Bengio (uno de los padres de la inteligencia artificial): “Si la IA no se usa adecuadamente, las armas podrían emplearse de manera catastrófica"
- De la manifestación a la esterilla: los mayores de Alicante vuelven a los talleres, pero no bajan la voz
- Un juzgado condena al Ayuntamiento de Alicante por pagar con retraso las obras de reurbanización en Gadea

