Las ciudades turísticas del PP anteponen apoyar al alcalde de Elche a que sus taxistas trabajen en el aeropuerto

Después de que el alcalde de Elche, Pablo Ruz, haya rechazado que los taxis de otras ciudades puedan recoger turistas del Aeropuerto Miguel Hernández, ayuntamientos del PP optan por ponerse de perfil y anteponen la lealtad al partido a defender las reclamaciones de sus propios taxistas. Alicante, Benidorm y Torrevieja evitan criticar la postura del gobierno ilicitano, mientras Santa Pola guarda silencio.

En Alicante, donde los conductores señalan a sus compañeros ilicitanos por haber "permitido" la entrada de Uber y Cabify al aeropuerto al negarse a que lo hagan los taxistas de otros municipios, al Ayuntamiento le pesan los colores. "Es término municipal de Elche, así que lo respetamos", ha indicado este martes la concejala de Turismo y portavoz del gobierno local, Ana Poquet. Por su parte, el vicealcalde Manuel Villar ha señalado que "lo primero es prestar un servicio idóneo a los usuarios" y que, posteriormente, se podrán estudiar otras soluciones, sin concretar cuál cree que sería la más conveniente.

Elche rechaza taxis de fuera en el aeropuerto y el Consell convoca una cumbre por las colas

Un asunto que, según ha reconocido el propio Villar, podría abordarse en el futuro en la cumbre bilateral Alicante - Elche que los alcaldes Luis Barcala y Pablo Ruz han impulsado este mandato. A preguntas de los periodistas, Villar ha tenido que hacer gala de un buen juego de cintura para conseguir mantener la lealtad institucional a su partido al mismo tiempo que trataba de no posicionarse en contra de los taxistas de su ciudad. Preguntado sobre si cree que los conductores alicantinos están siendo perjudicados, el vicealcalde se ha mostrado tajante: "No voy a contestar, buscáis meter cizaña". Eso sí, ha puesto en valor otros servicios de transporte público que el Ayuntamiento considera importantes para el aeropuerto, como el autobús público y la futura conexión ferroviaria, históricamente demandada.

En la misma línea se ha pronunciado el concejal de Transportes de Torrevieja, otro de los municipios afectados. "Cada uno defiende a su sector, entiendo la postura de Elche", ha señalado Antonio Vidal, aunque el edil reconoce que el Ayuntamiento ilicitano "tiene estipulado el aeropuerto como suyo" y que el debate sobre la posibilidad de que trabajen en él taxistas de otros municipios es "la eterna lucha".

Sobre la propuesta de la Generalitat de establecer una zona de prestación conjunta, que Elche rechaza, Vidal cree que "está muy bien pensado, pero mal dimensionado", ya que, en la práctica, "podría ser un arma de doble filo y hacer que los taxistas de otras ciudades vayan a 'pescar' al aeropuerto, cambiando las colas de turistas por colas de taxis". El edil de Transportes torrevejense sostiene que "se tiene que llegar a un acuerdo, que es difícil porque nadie quiere que le quiten clientes, pero hay que encontrar una solución que sea de sentido común".

Tampoco a Benidorm le parece buena idea que sus taxis puedan operar con mayor facilidad en el aeropuerto. Francis Muñoz, concejal de Movilidad, cree que no se debe "desvirtuar" la finalidad real del sector, que es "dar servicio a la ciudad". El edil popular recuerda que hay momentos del verano en los que "los 232 vehículos de Benidorm se encuentran al 100% de su capacidad" por lo que "un viaje al aeropuerto nos supone perder un coche cerca de dos horas". Una situación, según Muñoz, "que terminaría siendo negativa tanto para Elche como para Benidorm", así que el concejal se inclina por fomentar otros transportes, como los transfer de los hoteles o los autobuses: "Todo lo que sea sacar taxis de Benidorm perjudica a la ciudad", señala.

En Santa Pola, el otro municipios entre los principales afectados por el problema, prefieren guardar silencio. A preguntas de este diario, el Ayuntamiento ha señalado que, por el momento, carece de opinión al respecto, puesto que no cuenta con toda la información necesaria y opta por no manifestarse.

Para solucionar este conflicto, a finales de esta misma semana está previsto un encuentro a tres bandas entre la Dirección General de Transportes, Aena y el Ayuntamiento de Elche, en el que se pretende analizar estadísticamente cómo ha sido el verano. De cara al próximo año, la voluntad de Manuel Ríos, responsable autonómico de Transportes, es convocar una gran mesa de negociación, en la que tendrán participación todas las partes, para empezar a trabajar en soluciones con el horizonte fijado en la temporada alta de 2025.