De Edimburgo a Alicante: una iniciativa para conseguir sacos de dormir para personas sin hogar
Jill Sutherland, una mujer escocesa que lleva viviendo 20 años en la ciudad, ha sacado un crowdfunding para ayudar a la población que vive en la calle
Una campaña solidaria para personas sin hogar, es la iniciativa que ha sacado Jill Sutherland, una mujer escocesa, que ha declarado "su amor por Alicante y España" y desde hace veinte años vive en la ciudad que la enamoró.
Desde Edimburgo, y tras un episodio en Benidorm con un hombre sin hogar, se inspiró para iniciar una iniciativa para ayudar a las personas de la calle en Alicante después de ver las duras realidades de la vida sin un lugar donde quedarse a dormir sin miedo a la meteorológica y otros motivos.
El inicio
"Una noche reciente, vi a un hombre que estaba sentado en el suelo frío y sucio sin manta, sin abrigo y ni siquiera un par de calcetines. Su desesperación era desgarradora y permaneció en mi mente mucho después de ese momento. Terminé mi salida, le compré calcetines y un jersey, le di algo de dinero y comida. Pero su situación desesperada siguió rondando en mi cabeza", cuenta la mujer que inició esta campaña.
Aunque Jill ya ha realizado este tipo de iniciativas en su lugar natal, al ver esta situación se puso manos a la obra para lanzar un crowdfunding para proporcionar sacos de dormir a quienes los necesitan en Alicante. Su objetivo, como ella comenta, "es llevar calor, dignidad y esperanza a las personas que enfrentan circunstancias difíciles", ha señalado Sutherland.
Un saco de dormir lleno de esperanza
Jill, gracias a este movimiento solidario en la red Gofundme, ha recaudado, en tan solo una semana, 262 euros con donaciones que van desde los 10 a los 50 euros. Este dinero irá íntegramente para comprar sacos de dormir que puedan usar gente que no tiene un techo donde refugiarse. "Al ver a tantas personas durmiendo en las calles de Alicante, decidí una mañana tomar medidas para ayudar, ya que descubrí que hay unas 240 personas sin hogar", incide la originaria de Edimburgo.
Al principio estuvo mirando unos sacos de dormir reflectantes, pero, como ella cuenta, "rápidamente me di cuenta de que las personas que duermen en las calles merecen y necesitan más: algo duradero, cómodo y cálido". "Decidí invertir en sacos de dormir de alta calidad para cuatro estaciones que están diseñados para soportar temperaturas más frías y proporcionarán el calor y la protección a largo plazo que estas personas necesitan", relata Jill.
Por ahora, Jill ha conseguido comprar 10 sacos de dormir y en unos 10 días los distribuirá personalmente por las calles de la ciudad. "Por ahora estoy pensando de hacerlo mi misma, pero si hay una asociación que puede ayudarme genial", indica la mujer que espera que esta iniciativa se extienda a más zonas.
El objetivo de Jill
Para Jill, esto es solo el principio, ya que aspira a poder seguir ayudando con más sacos de dormir y a todas las personas que le sea posible con esta campaña. "Tengo el sueño de que algún día este proyecto se expanda para incluir instalaciones móviles de duchas y ropa limpia, ofreciendo a las personas sin hogar no solo calor, sino también dignidad", cuenta la residente en Alicante.
Por último, Jill insiste en "centrarse en estos primeros pequeños pasos para tener un impacto inmediato; cada acción cuenta si trabajamos juntos para llevar calor y esperanza a quienes más lo necesitan".
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