Los vecinos de Fontcalent expresan su preocupación ante los planes de expansión de Cemex

Los residentes muestran su rechazo a la puesta en marcha una nueva fábrica, aunque la mercantil asegura que su petición al Ayuntamiento no es para instalar otra planta, sino para regularizar la ya existente tras un cambio de normativa

La mercantil responsable ha pedido ampliar la superficie de explotación

La mercantil responsable ha pedido ampliar la superficie de explotación

Borja Campoy

Borja Campoy

Los vecinos de Fontcalent han expresado su preocupación por la intención de ampliar las explotaciones mineras en el subsuelo de la partida rural de Alicante, para lo que denuncian que la multinacional mexicana Cemex ha dado un nuevo paso en sus planes de expansión. A través de un comunicado señalan que su malestar por el hecho de que la compañía haya solicitado al Ayuntamiento de Alicante un permiso para poner en marcha una nueva fábrica de aditivos.

Sin embargo, la empresa cementera ha aclarado que el trámite urbanístico no se debe a la creación de una nueva planta, sino a la regularización de la ya existente tras los últimos cambios de normativas, que exigen la obtención de una Declaración de Interés Comunitario (DIC) al situarse la instalación en suelo no urbanizable. De tal forma, las únicas pretensiones de ampliar la actividad que reconoce la compañía se limitan a reanudar la minería en la cantera de la Serreta Llarga.

No obstante, la asociación de vecinos de La Cañada del Fenollar ya ha comenzado a trabajar con sus abogados para redactar alegaciones fundamentadas y con contenido jurídico sólido. Además, se está colaborando con profesionales de la salud pública para documentar el impacto negativo que esta nueva fábrica supondría para los residentes.

"Segundo ataque"

Para frenar el “segundo ataque de la multinacional”, se lanzará una campaña masiva de recogida de firmas en toda la ciudad. Se instalarán carpas de captación de firmas en las principales calles de Alicante, cuyos horarios y ubicaciones serán anunciados en los próximos días. “La multinacional Cemex, condenada en firme por el Tribunal Supremo por tres fraudes fiscales pagara 456 millones de euros, lejos de reducir su impacto y compensar a los vecinos afectados por sus explotaciones mineras y fábricas, sigue avanzando con nuevos proyectos contaminantes.

Además, existen serias dudas sobre la veracidad de los informes presentados por la compañía para obtener la licencia ambiental. El Ayuntamiento de Alicante tendrá la última palabra, y los ciudadanos estarán atentos a su decisión”, se recoge en el comunicado de la asociación vecinal.

Los residentes consideran que estos efectos de esta nueva fábrica no solo afectarían a Foncalent, sino a toda la ciudad de Alicante. “No se trata solo de contaminación del aire, sino también de un grave riesgo para los acuíferos de la zona, las mayores reservas de agua subterránea de Alicante”, añaden. Los vecinos añaden que los informes científicos indican que la fabricación de aditivos para el cemento genera una serie de contaminantes que afectan tanto al medio ambiente como a la salud humana.

Estos aditivos, que incluyen plastificantes, retardadores, acelerantes y otros productos químicos, pueden contener compuestos tóxicos y metales pesados que contribuyen a la contaminación del aire, el agua y el suelo. En las conclusiones de este informe se añade que la fabricación de aditivos para el cemento tiene un impacto significativo en el medio ambiente y la salud humana.

Petición de ampliación

A finales del año pasado los vecinos de Fontcalent ya se pusieron en pie de guerra por la petición de ampliación de Cemex para su explotación minera en la Serra Llarga. Más de 500 residentes presentaron alegaciones al proyecto, que plantea una nueva zona de extracción de más de 29 hectáreas. De acuerdo con el proyecto presentado por la mercantil, los terrenos donde se propone ejercer la actividad minera se destinan actualmente a la recolección de dos tipos de especies frutales: naranjas y mandarinas.

En ellos, se apuesta por obtener recursos de roca consolidada (calizas y margas, principalmente) a cielo abierto, a través del uso de explosivos y el arranque mediante "bulldozer". Por lo que respecta al apartado ambiental, el texto asegura que la instalación llevará a cabo una restauración progresiva que “buscará la integración ambiental y paisajística de la zona afectada en su entorno, de una manera más rápida y efectiva”.

Tracking Pixel Contents