Colonia Requena llora el vacío que deja Antonio Colomina: "Lo ha hecho todo por el barrio"

El barrio recuerda desde el más profundo agradecimiento a un hombre que trabajó incansablemente por mejorar la calidad de vida de todos

Vecinos de Colonia Requena de Alicante lloran la muerte de Antonio Colomina

Vecinos de Colonia Requena de Alicante lloran la muerte de Antonio Colomina / Pilar Cortés

José Gómez

José Gómez

Las puertas del bar El Loro estaban cerradas. Flores, velas y mensajes de los vecinos honraban a su dueño en su primer día de ausencia. En la calle de la Perla, en Colonia Requena, solo resuena el nombre de Antonio Colomina.

Falleció este miércoles por la mañana a causa de las complicaciones de un accidente de tráfico que sufrió el sábado por la tarde. Fue la única manera de sacarle de su barrio, por el que tanto luchó. Colomina vivió en él desde 1980 y hace cuarenta años que trabajaba en su bar, El Loro, primero regentado por sus padres y en el que, hasta el fatídico día, le acompañaron sus hijos.

Era un hombre con dos facetas que se explicaban perfectamente en su profunda dimensión humana. Por un lado, fue un afable servidor desde su bar, donde siempre ofrecía conversación, consejo y calor a sus clientes, amigos y vecinos, que al final venían a ser la misma cosa. Por otro, un incansable líder vecinal que dedicó buena parte de su vida a hacer de Colonia Requena un lugar mejor.

Así era Antonio Colomina: entregado con los más vulnerables en el barrio de Colonia Requena

Así era Antonio Colomina: entregado con los más vulnerables en el barrio de Colonia Requena / Rafa Arjones / Pilar Cortés / Jose Navarro / Héctor Fuentes / Alex Domínguez

Al final, muchas veces el bar El Loro sirvió de centro comunitario para el barrio. La tarde de este miércoles fue el lugar en el que la población fue a dar su pésame a su familia y a rendir, de diferentes maneras, a un hombre que, por haber sido tanto, deja atrás un inmenso vacío con su adiós.

Así lo recuerda su barrio

Sofía Ortiz Cutillas, vecina de 47 años en el barrio muy amiga de la familia -como se consideran muchos-, hablaba con Susana Cerreda cerca del bar. Ambas coincidieron en declarar el gran vacío que deja la partida de Colomina. "Él lo ha hecho todo por este barrio, para los niños en reyes organizaba la cabalgata, en carnaval la fiesta. Llevo cuatro años aquí y lo siento en el alma", ha compartido Cerreda. Ortiz Cutillas, por su parte, ha declarado que era "su familia, una bellísima persona que ayudaba a todos el barrio. Esto ya no va a ser igual sin él". Ortiz también ha querido hacer memoria de la pandemia, cuando "Antonio tuvo que abrir el bar para que trajeran los alimentos y los repartía él, de día y de noche atendiendo a todas las personas necesitadas".

Su naturaleza, bondadosa y abierta, le ganó el respeto y aprecio de casi todos los que de alguna forma convivieron con él. Su papel más reivindicativo lo llevó hasta donde hiciera falta para devolverle su lugar en el mapa a un barrio muchas veces olvidado por las administraciones. Alicia Martínez, monitora deportiva en el centro comunitario, no habita en Colonia Requena, pero desde hace dos años sí que comparte vida con su gente. Antonio Colomina era parte de su día a día, y ha recordado entre lágrimas que siempre se preguntaban "qué iba a pasar el día que faltara", solo que nunca esperaron que ese día llegase tan pronto y de forma tan inesperada.

Líder y amigo para todos

En un barrio multicultural, el único con mayor población extranjera que nacional de Alicante, logró el reconocimiento a partes de iguales de todos los pobladores, sin distinción de nacionalidad. Él siempre se preocupó por todos de la misma manera. El comercio vecino a su bar, una carnicería, está gestionada por Ayoub Zineladin. Lleva solo un año en Colonia Requena, pero confiesa que Colomina era un muy buen hombre, querido por todos: "Me iba unas diez veces al día a verle a él". Ha asegurado que el líder vecinal siempre trató a todos por igual, "él hablaba a la persona, le daba igual si eras árabe, español o inglés. Una persona buena consigue que todos le quieran", ha añadido. Mientras el carnicero hablaba, otros clientes de origen árabe entraban y, dándose cuenta de que el tema era "lo que le pasó a Antonio", han expresado también su pesar: "Es una tragedia, era un muy buen hombre".

Colonia Requena muestra su dolor por la pérdida de Antonio Colomina

Colonia Requena muestra su dolor por la pérdida de Antonio Colomina / Alex Domínguez

Requena, como llaman los habitantes de más solera a su barrio, es un lugar que, por otra parte, tiene una población envejecida. Los de "toda la vida", como Amelia Estévez, quien vive en la esquina diagonal al bar El Loro y ha agradecido que siempre ha contado con "Antonio, su mujer y sus hijos". "Yo tengo problemas para moverme, que estoy mal de las vértebras, y Antonio y su familia siempre han venido a ayudarme", ha compartido la vecina desde su portal. Al rato, se acercó con una bandeja con pequeñas velas y las dejó frente al bar.

Muerte inesperada

Antoine Basek fue uno de los últimos vecinos que llegó a verle antes del accidente. Ha reconocido que le duele mucho ver hacia el bar con las persianas bajadas: "Yo le llamaba siempre maestro, ese día le vi llegar con la moto, escuché la caída y corrí a darle la mano. No me esperaba su muerte, es un vacío para el barrio". En la farmacia de Colonia Requena, Esther Conesa ha dicho que todos los días iba a tomarse el café en el bar El Loro, donde siempre recibía "una palabra agradable, una sonrisa, un consejo y ayuda para quien la necesitase". "Antonio quería que el barrio fuese una familia, que entre todos nos ayudásemos, siempre se va a notar su ausencia", ha concluido la farmacéutica.

Su velatorio comenzará este jueves a las 17:00 horas, en el tanatorio Cristo de la Paz, en San Vicente del Raspeig. La misa funeraria, y último adiós, será este viernes a las 19:00 horas. Los vecinos, por su parte, seguirán honrándole en la memoria popular de un barrio al que Antonio Colomina dedicó su vida, y del cual nunca se marchó.

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