Conmoción en Alicante tras reconocer los Agustinos abusos del padre Ángel Escapa, exdirector del colegio

Conmoción en Alicante después de que la orden de los Agustinos haya admitido abusos sexuales por parte del Padre Ángel Escapa, exdirector del colegio San Agustín de la ciudad, figura de gran relevancia en la comunidad educativa y fundador del equipo de balonmano en 1972. En concreto los Agustinos han accedido a indemnizar a dos víctimas que denunciaron los hechos en el año 2022, según adelanta El País. El padre Ángel Escapa, que tiene una avenida en Alicante desde 2010, también recibió una distinción olímpica por parte del Comité Olimpico Español en un acto en el que se le catalogó de "eminencia".

Las dos víctimas que han denunciado por el momento han recibido una compensación económica después de que la orden haya admitido la existencia de abusos sexuales del exdirector del colegio de Alicante. El padre Ángel era todo un icono del colegio por su importancia en el desarrollo del centro a nivel educativo, deportivo (siendo precursor del balonmano, que ha convertido a los Agustinos en un club base reconocido en todo el país) y en ámbitos extraescolares como los campamentos de verano en la sierra de Guadarrama.

Retiro a Huelva

Sin embargo, en 2021, "el cura" (como se le conoce popularmente en el entorno del colegio) decidió marchase a Huelva, ante la sorpresa de quienes le rodeaban, meses antes de que se oficializaran las acusaciones contra él.

Ahora, Ángel Escapa, permanece en la ciudad andaluza, próximo a cumplir 81 años. La orden, por su parte, da total credibilidad con este gesto a las víctimas, optando por indemnizarlas pese a no haber tenido proceso judicial ni sentencia que lo corrobore. En este sentido, la ausencia de una resolución judicial se debe principalmente a que los delitos ahora reconocidos han prescrito.

Una de las víctimas, que hoy tiene en torno a los 60 años, aseguró en referencia a los abusos que estos empezaron cuando estaba en Primaria, en los años 70, y siguieron al menos durante cuatro años más. "La indemnización no era una necesidad ni un objetivo para mí. El Padre Ángel era un monstruo, un depredador", relataba una de las dos víctimas al diario nacional. "Los abusos empezaron en la habitación, luego pasaron a un despacho y al vestuario del balonmano. Más adelante, ya usaba cualquier rincón del colegio para arrimarse", añade el denunciante en su relato.

Respecto a la avenida que el sacerdote recibió en Alicante en el año 2010, una de las víctimas ya ha pedido al Ayuntamiento que retire su nombre, tras reconocer la existencia de abusos. Este diario ha intentado ponerse en contacto con Ángel Escapa, sin obtener respuesta del exdirector del colego alicantino .