Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El poder de la palabra

Raúl Quinto en un recital. información

En la Biblia, el libro de todos los libros, cuando se pronuncia la siguiente frase, dixitque Deus fiat lux et facta est lux (Dijo Dios: Haya luz, y hubo luz), la importancia no reside en la luz misma, sino en cómo se pronuncia. El inicio de la creación reside en cómo se nombran las cosas, el lenguaje, la palabra, es lo más importante de todo. La poesía es eso, amar la palabra por encima de todas las cosas. En ocasiones nos encontramos con poéticas que demuestran el amor por la palabra, por encima de modas, convenciones y ruidos.

Sola, de Raúl Quinto, publicado por La Bella Varsovia, es un poemario pequeño en tamaño pero grande en contenido. Esta obra surge de un relato escrito por Thomas Bailey Aldrich a finales del siglo XIX: «Una mujer está sentada sola en su casa. Sabe que no hay nadie más en el mundo: todos los otros seres han muerto. Golpean a la puerta». Con esta premisa Quinto construye un poemario donde el misterio, lo atávico y el miedo que surge del origen de los tiempos se unen para contar lo que nos sucede a todos. El segundo poema nos introduce en el mundo que el autor ha visualizado:» aquí la afasia y la nana/de polvo y luna desconchada/aquí el sol de sal de liquen/en el esmalte de las uñas/raíces capilares/que tejen una piel/una funda de cáñamo/para los huesos una luz de mimbre/con la forma de un cuerpo/sentado en una silla/y entonces qué».

El poder de la palabra

El poder de la palabra

Sola, como bien define el título, es una elegía a la propia soledad. Pero no nos habla el autor de una ausencia de seres, sino del mal endémico que sufre esta sociedad que vivimos. En pleno siglo XXI, en un momento donde la hiperconexión es excesiva, estamos desbordados de estímulos, de herramientas de comunicación, pero nos sentimos más solos que nunca. La soledad no es la ausencia de compañía en sí, es esa sensación de abandono que tenemos todos. Sola es un poemario que te atrapa desde la primera lectura. El subtexto deja a la imaginación la oscuridad más atroz del ser humano. ¿Qué ser se encuentra al otro lado de la puerta? Raúl Quinto no nos responde directamente. Crea un juego con el lector que le lleva hacia los miedos primarios. En esta pandémica época podríamos definir Sola como un reflejo del tiempo que nos ha tocado habitar, pero no, esta obra trata de algo más antiguo, lo dice en este poema: «todos los otros seres han muerto/o bien/la única que ha muerto es ella/y el infierno es esto/quien llama a la puerta viene a contárselo».

Raúl Quinto (Cartagena, 1978) es uno de los coordinadores de la Facultad de Poesía José Ángel Valente y ha colaborado como crítico en publicaciones como Quimera. Es autor de los libros de poemas Grietas (2002; reeditado con Poemas del Cabo de Gata, 2007), La piel del vigilante (2005), La flor de la tortura (2008), Ruido blanco (La Bella Varsovia, 2012) y La lengua rota (La Bella Varsovia, 2019). También ha publicado los libros de prosa híbrida Idioteca (2010), Yosotros (2015), Hijo (La Bella Varsovia, 2017) y La canción de NOF4 (2021).

Sola, de Raúl Quinto, es un poemario duro por el mensaje que deja. La desolación está en cada uno de los versos que lo componen. Sola, como he indicado antes, es pequeño en tamaño, pero una obra inmensa fruto de un trabajo arduo. El autor se lo cuestiona todo: si todos los otros seres han muerto quién soy yo. Quinto se reafirma como un poeta de una voz personal y firme. Un autor al que seguir con atención.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats